Para Amelia

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No todas las historias
poseen un final feliz
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La muerte llegó con tres minutos de retraso. Al empujar la puerta, halló a Lucia con las mejillas húmedas y los labios llenos de palabras no dichas. Un revólver humeante y el cadáver de un mal hombre yacían cerca de ella, vestidos de su ataque de furia.

La muerte le acercó papel y pluma mientras le murmuraba tiernamente una advertencia: "No tienes mucho tiempo, los vecinos escucharon el disparo, así que escribe y luego vete". La mano de Lucia se deslizó sobre el papel y las líneas se convirtieron en el mensaje que sus labios nunca pudieron formular. Se oyeron sirenas, se oyeron neumáticos acercándose con frenesí, Lucía soltó el bolígrafo y salió del lugar. La ciudad se la tragó, la luna borro sus huellas, nadie logró encontrarla...

*

Amelia salió adolorida de la clínica, su madre le servía de soporte para caminar. Su rostro estaba pintado de morado y los puños de su novio había sido los pinceles. A pesar de todo, el bebé permanecía estable. Amelia no dejaba de acariciaras el vientre, murmuraba promesas para el huésped dentro de ella.

Al llegar a casa, una barrera de oficiales le impidió el paso tanto a ellas como a su madre. Sin embargo, uno de ellos se dio a la tarea de explicarle la situación.

Amelia casi desgarro sus pulmones luego de enterarse. Gritó el nombre de su novio creyendo que si lo repetía suficientes veces, él se levantaría. Su llanto y alaridos casi revientan él foco de un poste de luz. Quiso contemplar por última vez el rostro de su novio, pero una bolsa negra no se lo permitió.

El oficial le entregó una nota de papel improvisada que había encontrado dentro de la casa. Amelia distinguí de inmediato la letra de su mejor amiga Lucia. El mensaje decía solo verdades, fue por eso que le pareció tan hiriente:

"Lamento no haber nacido hombre como él. Te amo. Lo hice siempre. Tú nunca ibas a dejarlos, y un día él terminaría matándote.
Perdóname"

El papel aún tenía rastro de llantos.

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Todo el mundo es un asesino
si se le provoca lo suficiente

Pérdida |toh| |siblingau|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora