Capitulo 19

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— ¡Ned! — MJ gritó, haciendo que el chico abriera un portal de donde salio suficiente agua para alejar al lagarto de ellos.

— ¡Corran! ¡Corran! — Gwen gritó, tomando la caja con más fuerza, para tomar la cura del lagarto.

— ¡Gwen! — le gritó Peter¹, mientras ella se la lanzaba, logrando curarlo.

— ¡Dios! Juro que odio esto. — la rubia suspiró, deteniéndose a respirar unos segundos.

— ¡Vamos, hay que esconder la caja! — MJ les dijo. — Haz un portal, rápido.

— Si, si. — Ned comenzó a mover sus manos, abriendo un portal.

— ¡Si! — MJ lo felicitó, sonriendo, hasta que el doctor Strange salió de ahí.

— ¡Ay no! — la rubia lo miró.

— ¿Dónde está? — dijo él furioso, arrebatándole la caja.

— ¡Auch! — Gwen se quejó.

— Antes de que diga algo señor, el plan de Peter funciona. — Ned explicó.

— ¿Que plan?

— Los está curando. — él chico señaló al lagarto, quien ya estaba convertido nuevamente en el doctor Connors.

— ¿Doctor Connors? Bienvenido señor. — Peter¹ habló.

— Miren nada más. — el hechicero los miró. — ¿Tu abriste un portal?

— Si señor. — Ned respondió, mientras el asentía, caminando hacia Peter.

— ¿Que esperan? Siganlo, aún hay malos aquí. — Gwen les dijo a sus amigos, siguiéndolo, atravesando un portal.

— Strange, espere, ya falta poco. — Peter¹ suplicó, al mirarlo con la caja en sus manos.

— ¡Callate! Estuve colgado en el gran cañón por 12 malditas horas.

— Ya se, ya se y yo... Disculpeme por eso señor. — los otros dos Peter aparecieron frente a él, dejando confundido a Strange.

— ¿Se fue al gran cañón? — Peter² preguntó.

— Hubiera podido ayudarnos. — Peter³ apoyó.

— ¡No, no, no! Está bien, ellos son mis nuevos amigos, el es Peter Parker, el es Peter Parker, el es spiderman y el también. Son mis otros yo— los señaló. — El es el hechicero del que les hablé.

— Oye, estoy muy impresionado de que pudieras darles una segunda  oportunidad, pero esto se tiene que acabar ya. — Strange advirtió.

— ¡¿Puedes salir a jugar Spiderman?! — un grito se escuchó a lo lejos, poniendo a todos en alerta.

El duende verde apareció, robando la caja de las manos de Strange, mientras lanzaba pequeños drones que explotaban a su alrededor.

El doctor Octavius detuvo su huida, permitiendo que Strange tomará la caja de nuevo.

— ¡Strange no! — Peter¹ gritó, justo cuando la caja explotó, destruyendo el monumento.

— ¡Gwen! — gritó MJ, tratando de sujetarla, fallando en el intento.

De pronto todo pareció comenzar a ser en cámara lenta para Gwen, sintió como el aire movía su cabellos, la brisa de la noche acariciando su cara.

Un grito inundó su garganta por la sorpresa, al sentir como iba cayendo, sin poder hacer nada para evitarlo. Suspiró con alivio al ver a Peter¹ frente a ella, extendiendo su mano.

Le dio una sonrisa, extendiendo su mano también, rozando sus dedos, justo en el momento en que Norman apareció, golpeando a Peter, alejándolo de la posibilidad de salvarla.

El shock se apoderó de ella, iba a morir, era su destino, estaba escrito que así fuera, Gwen Stacy debía morir.

— ¡No! — el castaño negó, su amiga, su alma gemela, no podía terminar así.

Ella lo miró tratando de mostrarle que estaba bien, lo había aceptado desde que lo supo, conocía el precio de estar con Spiderman y estaba dispuesta a pagarlo.

Cerró los ojos, resignada, pero unos fuertes brazos se ciñeron en su cuerpo, rodeándola por completo, logrando salvarla, ella abrió los ojos, mirando a su salvador.

— ¿Estas bien? — él³ preguntó, aun sin soltarla, tratando de evitar llorar por el cúmulo de recuerdos que vinieron a su mente. — Gwen, ¿estas bien?

— Si, estoy bien. — respondió en voz baja, aun si creer lo que había sucedido. — ¿Tu lo estás? ¿Tu estás bien?

El asintió, dejándola en el suelo, aun sin soltarla del todo, las miradas de ambos aun seguían conectadas, ella levantó su mano, tratando de limpiar una lágrima que había corrido por la mejilla del chico.

— Estoy bien, gracias a ti. — le dijo, comenzando a sollozar. — ¡Oh, Dios! Creí que este sería el momento, estaba tan asustada.

— ¡No, no! No llores, tranquila ¿si? — el tomó su rostro en sus manos, perdiéndose por un momento en su mirada, acercándose lentamente a sus labios, besándolos.

Gwen correspondió al beso, hasta que ambos se separaron por falta de aire.

— Yo lo siento, fue un impulso. — el negó.

— Está bien, lo entiendo. — ella asintió. — Se como te sientes al verme, soy Gwen Stacy, pero no soy tu Gwen.

Ella sonrió, separándose un poco de él, mientras ambos veían como el escudo caía, rompiendo todo a su alrededor.

Ned y MJ llegaron hasta ella, corriendo a abrazarla.

— ¿Estas bien? ¿Estás herida? — MJ la escaneó de arriba a abajo.

— Estuve tan asustado. — Ned también la abrazó. — Creí que íbamos a perderte.

— Estoy bien chicos, ¿ustedes lo están? — ella les preguntó preocupada.

— Si, la señora capa nos salvó. — Ned respondió. — Tu herida se abrió.

— ¿Que? — ella tocó su frente, notando que tenía sangre de nuevo, sintiendo sus piernas trastabillar, perdiendo el equilibrio, siendo sostenida por Peter³.

— Hey, ¿que sucede? ¿estas bien? — él preguntó preocupado, sosteniendola.

— Si, solo, me golpee la cabeza. — ella les sonrió, haciendo un esfuerzo en vano de tranquilizarlos.

— ¡Gwen! ¿Dónde estás Gwen? — gritó Peter¹ a lo lejos, estaba asustado de que algo le hubiera sucedido a la rubia.


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No way Home ||• Gwen Stacy •||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora