16 Razones― Karl Jacobs

Capítulo 07.

Capítulo 07
El callejón

Feliz, estaba feliz o eso quería pensar ya que era muy extraño.

Todo ocurrió hace aproximadamente dos semanas y tres días.
Desde ese día George cada vez que me ve me saluda, y eso es extraño.

Al principio los chicos me daban miradas extrañas ya que usualmente ni siquiera nos miramos.

Ahora eso cambió, supongo que quiere nuevas amistades, y eso es bueno.

En lo que relaciona a Karl sinceramente no sé mucho de el.

Está con Emily, supongo que todo está bien entre ellos. Me duele mucho aún verlos juntos pero no puedo hacer nada, y tampoco entrometerme.

Si el es feliz estando con ella yo debería serlo de igual manera, pero no lo consigo.

Demonios, me siento estúpidamente estúpida.

Se que querer a una persona es difícil, pero es más difícil saber que esa persona ni siquiera tiene algún interés en ti.

Caminaba con Franklin a mi lado sin algún destino.

El hablaba y hablaba sin parar, para ser sincera ya ni siquiera le prestaba atención a lo que decía.

- Oh, mira a esos chicos- dirigí mi mirada hacia el grupo de desconocidos- No soy gay o algo por el estilo pero por ellos si me lo pienso

No respondí solo rodé mis ojos caminando pasos adelante de el.

- No me ignores- dijo acelerando sus pasos hasta llegar a mi lado- No te obligue a venir

Clave mi mirada en el elevando una ceja.

- Bueno en gran parte si

Solté una risita ya que me pareció gracioso su tono pero decidí fingirla con una falsa tos.

- Eres rara- ahora fue el quien aceleró sus pasos dejándome atrás

No lo seguí y decidí esconderme de el entrando a un callejón.

El lugar al que decidí entrar fue sin duda alguna una mala elección.

Estaba sucio y habían sobras de comida y basura al rededor.

Suspire y trate de salir.

- Vaya, vaya- una voz desconocida hablo tras de mí

Me gire logrando ver a dos chicos que al parecer tenían entre dieciséis y dieciocho años.

Uno era alto y delgado mientras el otro parecía ser más bajo y vestía ropa más grande que su talla impidiendome ver su físico.

- Quien eres- pregunto uno de ellos

Estaba asustada, no sabía qué tan lejos estaba, era poco de eso estaba segura ya que corrí para que Franklin me siguiera.

Pero al parecer no se percató de mi ausencia.

- Te hicimos una pregunta

El tono en el que habló me hizo temblar hasta el punto de casi perder el equilibrio y caer al suelo.

- Soy Boniee- trate de sonar firme y con seguridad

- ¿Que haces aquí?- hablo por primera vez el chico de la ropa grande- Responde

El tono en el que hablaba era relajado, parecía no querer espantarme mientras el otro chico parecía no tener otro objetivo que no ser el de intimidar.

- Me desvíe- mi respuesta fue corta

El chico alto tomo con fuerza mi brazo haciendome soltar un gemido de dolor.

- Cosas muy malas te pueden pasar aquí- susurro cerca de mi oído

El olor que desprendía era repugnante, parecía aver tomado alguna clase de bebida ya que el olor era demasiado fuerte.

Hacerco su rostro al mío quedando a centímetros.

Tomo mi mandíbula con fuerza haciendo presión elevandome con agresividad hacía arriba.

Apretó su agarre al rededor de mi cuello haciendo que poco oxígeno llegué a mi.

- Ya sueltala- dijo el otro chico siento ignorado- ¡Que la sueltes, es una chica!

El pareció recapacitar ya que soltó su agarre enseguida.

Tome aire con urgencia captando su atención.

El chico se dió la vuelta dejando atrás al otro.

Comenzó a correr siendo seguido por su compañero dejándome sola.

Tome mi cuello suspirando.

Empeze a caminar con dificultad hasta la luz que daba al fondo del callejón.

Pero ahí ya no estaba Franklin.

Tome mi celular y busque su número, le di click a su nombre empezando a llamarlo.

- Hola- hablo desde el otro lado- Te busque por todos lados ¿en donde te metistes?

- Solo me desvíe- repetí

- Ahora estoy cerca del antro de Wood, en el local 13 ven a buscarme, creí que habías vuelto a casa por eso no te espere

- No-suspire- No iré, estoy cansada volveré a casa

El hizo un sonido extraño en la línea pero decidí ignorarlo.

- Como digas- hubo un silencio- Te tengo que cortar, cuídate

El corto la llamada, me pareció extraño, pero Franklin era extraño no podía esperar menos de el.

Una vez llegue a casa empezó a llover, pobre Frank seguro tendrá frío.

Me coloque mi pijama ya que no tenía previsto salir y decidí recostarme.

Me era difícil dormir, no paraba de pensar en lo que acababa de ocurrir. Sabía que esto duraría un tiempo.

Tenía miedo.

Un sonido desde abajo despertó mi curiosidad así que decidí ponerme mis pantuflas de osito y bajar.

Iba a mitad de las escaleras cuando logré ver con claridad los rostros de las personas que me "despertaron"

- Hola Boniee- mi corazón se detuvo al instante al escucharlo

El me hablaba.

El me hablaba a mí.

Karl, Karl estaba parado frente a mi.

Mis ojos se abrieron a tal punto que creí que en cualquier momento se saldrían de su lugar.

- Hola- fue todo lo que dije

- Boniee- mi hermano llegó a mi lado sosteniendo en sus manos una taza de café

- Hija, ¿que haces despierta?- ahora fue mi madre la que habló, ¿de dónde salen?

- No podía dormir- ya ni siquiera sabía lo que decía

- Karl se quedará con nosotros esta noche- me quedé estática por tercera vez en el día- Sus padres no están y las llaves de su casa se quedaron adentro

- Mañana a primera hora vendrán los cerrajeros a ayudarme-explico- Espero no molestar

- Claro que no lo haces- mi hermano dijo en seguida- Además fui yo el que prácticamente te obligó a venir conmigo

- Te lo agradezco- agradeció el chico de las llaves - Junior trato de entrar por el techo pero no lo logro

Mi madre se giró hasta quedar frente a Junior mirándolo interrogante.

- Vamos madre- trato de justificarse- El chico se miraba tan indefenso ahí, hacía frío y estaba lloviendo

- Está bien- respondió mi mamá aunque sabía que después lo interrogaria

- Sígueme Karl- mi madre empezó a subir las escaleras- Te mostraré la habitación de invitados

Oh, no, no, no, mi habitación.

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