Capítulo 17

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- ¡¿Qué?! ¿lo estás diciendo en serio? - preguntó Armando. 

- Claro hijo ¿por qué te mentiría? - dijo don Roberto. 

- Perdóname papá pero es que esto me toma completamente por sorpresa ¿a qué se debe qué quieras adelantar la junta?- dijo Armando con un tono de voz fuerte para que Mario se enterara de lo que ocurría. 

- Pues resulta que unos amigos nuestros nos invitaron a tu mamá y a mí a su casa justo cuando se iba a realizar la junta y no podemos rechazarlos, son amigos queridísimos que no vemos hace mucho tiempo. - dijo don Roberto. 

- Papá pero ¿no pueden ir en otro momento a donde esos amigos de ustedes? - preguntó Armando. 

- No, no podemos ellos no tienen la suerte de tener un hijo que se encargue de su empresa así que aún no se retiran. Entonces estaríamos yendo durante sus vacaciones.- dijo don Roberto. 

- Está bien, yo entiendo y ¿Qué tanto se adelanta la junta?- dijo Armando nervioso. 

- Tu mamá y yo pensamos viajar a Colombia dentro de un par de días. - dijo don Roberto. 

- ¡¿Cómo?! ¡¿Tan rápido?! - dijo Armando alterado. 

- Sí, ¿por qué te afecta tanto la noticia? ¿acaso sucede algo con la empresa? te noto muy nervioso. - dijo don Roberto preocupado. 

- No papá ¿Cómo crees? lo que pasa es que, como te dije antes me toma por sorpresa la noticia y nosotros no teníamos planeado realizar el balance hasta dentro de un buen tiempo y ahora tenemos que correr para poder entregarles el informe. - dijo Armando excusándose. 

- Entiendo hijo pero yo confío en ti y sé perfectamente que ustedes son capaces de entregar ese informe a la junta directiva con puntualidad, además esa muchacha Beatriz es muy buena en su trabajo. No creo que debas de preocuparte tanto Armando, si todo va bien con la empresa no veo razón para que estés tan estresado.  - dijo don Roberto. 

- Gracias por esas palabras papá, tienes toda la razón. Vamos a tener listo el informe. - dijo Armando. 

- Claro hijo, yo lo sé. - contestó don Roberto. 

- Bueno papá, te tengo que dejar porque necesito informar a los demás miembros de la junta directiva sobre el cambio de fecha de la junta. - dijo Armando. 

- No te preocupes por eso, yo me encargo. Tu mejor enfócate en lo que tienes que preparar para ese día ¿te parece?- dijo don Roberto. 

- Muchísimas gracias, nos vemos.- dijo Armando. 

- Nos vemos hijo. - le dijo don Roberto despidiéndose. 

Armando colgó el teléfono para luego hablar con Mario: 

- ¿Escuchaste Mario?- preguntó con fuerza. 

- Ay Armando estamos en problemas ¿cuántos días tenemos para que Betty haga ese informe?- preguntó Mario.

- ¡Dos días! - dijo Armando preocupado. 

- ¿Cómo qué solo dos días Armando? - preguntó Mario asustado. 

- Sí, mi papá me dijo que estarían llegando a Colombia en dos días. - dijo Armando. 

- ¿Usted aceptó eso?- preguntó Mario. 

- Pues sí ¿qué quería qué hiciera? ¿Qué le dijera que no podíamos hacer la junta porque no estaba seguro de que Betty fuera a maquillar el informe?- dijo Armando enojado. 

- Estamos con el agua hasta el cuello. Usted tiene que hacer algo ¡HAGA ALGO! - dijo Mario alterado. 

- ¿Qué hago?- dijo Armando. 

- Pues vaya y busque al mostrete y endúlcele el oído para asegurarnos que haga ese informe. dijo Mario. 

- ¿Quiere qué vaya ya mismo a su casa?- dijo Armando. 

- Claro, no sé que está esperando, el tiempo es oro Armando. Aún es temprano puede ir a su casa e invitarla a ir a algún lugar por ahí y así aprovecha para comentarle sobre la junta. 

- Buena idea Calderón ¿pero usted cree que ella acepte salir conmigo? - dijo Armando inseguro. 

- Por supuesto, lo de Marcela es un capricho. Betty se muere por usted, va a ver que cuando llegue a buscarla ella va a caer rendida a sus pies. - dijo Mario con total seguridad. 

-Está bien, lo voy a hacer, necesitamos la ayuda de Betty. - dijo Armando. 

Armando salió velozmente de Ecomoda y se fue hasta la casa de Betty, cuando llegó se dirigió a tocar la puerta: 

- ¿Quién será?- dijo doña Julia. 

- No sé mamá, pero no se preocupe yo abro. - dijo Betty mientras se dirigía a abrir la puerta. 

Betty se llevó una gran sorpresa cuando vio que quien estaba en la puerta esperando era Armando:

- ¿Usted? ¿qué hace aquí?- dijo Betty confundida. 

- Betty lo que pasa es que...- Armando fue interrumpido por don Hermes. 

- ¿Don Armando? - dijo don Hermes alegremente mientras se dirigía hacia la puerta para saludarlo. 

- Don Hermes ¿cómo le va? - preguntó Armando. 

- Muy bien don Armando, ¿viene a recoger a su prometida? ¿cierto?- dijo don Hermes. 

- ¿A mi prometida? - preguntó confundido.

- Sí, a Marcela. Ella está aquí con su hermana pero imagino que ya lo sabía y por eso está aquí. - dijo don Hermes con una sonrisa. 

- No, la verdad es que yo no tenía idea de que ellas estaban aquí. - dijo Armando muy incómodo mientras veía a Betty. 

- Pues que raro, yo creería que ustedes son muy unidos, digo como están a punto de casarse. - dijo don Hermes. 

- Pues ¿qué le digo don Hermes? no siempre puedo saber donde está Marcela.- dijo Armando.  

- Claro yo entiendo, pero no se quede ahí, pase por favor. - dijo don Hermes. 

- No, don Hermes yo se lo agradezco muchísimo pero solo venía a hablar un momento con Betty sobre un asunto de la empresa, si me lo permite. - dijo Armando. 

- Está bien, los dejo un momento pero no se tarden mucho que ya es tarde y ¿qué van a pensar los vecinos al ver a mi hija con un hombre a esta hora? No olviden que es diablo es puerco. - dijo don Hermes mientras los dejaba solos. 

- No se preocupe papá que rápido vuelvo con ustedes.- dijo Betty. 

- ¿Así qué Marcela y María Beatriz están aquí? ¿Una cena de amigas?- dijo Armando celoso. 

- Sí, es una cena de amigas. - respondió Betty. 

- Y dígame ¿no preferiría venirse conmigo a dar a una vuelta?- dijo Armando. 

- Don Armando como usted bien lo dijo Marcela y María Beatriz están aquí ¿no tiene miedo de que lo escuchen invitándome a salir? - preguntó Betty. 

- La verdad no Betty porque yo solo quiero pasar tiempo con usted. - dijo Armando. 

- Pues no va a poder ser hoy, no las voy a dejar solas con mis padres don Armando. Ellas son mis invitadas no puedo simplemente irme con usted porque ese sea su deseo. Así que si solo venía por eso le pido de la manera más educada posible que se vaya. - dijo Betty mientras intentaba entrar a su casa. 

- No espere Betty, no se vaya también quería comentarle algo muy importante sobre la empresa. - dijo Armando. 

- ¿Qué cosa?- preguntó Betty. 

- Mi papá me llamó hoy, hace poco y me dijo que necesitaba que la junta se adelantara. - dijo Armando. 

- ¿Y eso cuándo sería?- dijo Betty. 

- Vienen en dos días y Betty yo necesito con urgencia que usted maquille ese informe, sin usted yo no salgo vivo de esa junta, por favor ¿puedo contar con usted?- dijo Armando...

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Hola ¿Cómo están? Espero les guste este capítulo. 💖

Marcetty: Un amor súbitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora