Capítulo 26

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Betty y Armando se dirigieron hasta la sala de juntas. Ya todos los demás miembros de la junta directiva estaban ahí, esperándolos.

- Buenos día a todos. - dijo Armando.

- Buenos días. - contestaron los demás.

- Betty, ¿esos son los informes? - preguntó Roberto.

- Sí don Roberto. - contestó Betty.

- Perfecto, ¿se va a quedar usted a la junta? - preguntó Roberto.

- Sí señor. - dijo Betty.

- Yo estoy ansioso por escuchar lo que tienen que decir. - comentó Daniel.

- Perdón, acá están los cafés que me pidieron. - dijo Patricia entrando.

- ¡Patricia esto está horrible!- dijo Armando cuando probó su café.

- Ay Armando, la culpa la tienen las de la cafetería así que a mí no me culpes.- dijo Patricia.

- Patricia y ¿dónde están los meseros?- preguntó Armando.

- No han llegado Armando.- dijo Patricia mientras salía de la sala de juntas.

- Bueno, ya no perdamos el tiempo. Niña por favor reparta las carpetas, empecemos de una vez por todas.- dijo Roberto.

- Yo quiero pedirles algo antes de comenzar. No quiero discusiones como las que han habido en las reuniones anteriores. Si hay diferencias, tenemos que manejarlas como la familia que somos esto no puede convertirse en una batalla ¿les queda claro? - dijo Margarita.

- Exactamente, no vamos a permitir que hayan peleas de negocios, menos cuando el matrimonio de Armando y Marcela está tan cerca, así que les exijo respeto.
Bueno, Betty por favor siéntese.- dijo Roberto.

- Claro.- contestó Betty.

- Bueno, entonces empecemos. - dijo Roberto mientras todos comenzaron a abrir sus carpetas.

- ¡Ay pero qué divinas las carpeticas! - dijo Hugo.

En el momento en que Armando abrió su carpeta se llevó una gran sorpresa.

- Pero... ¿Qué es esto? ¡¿La carta!? ¡Betty la descubrió!- pensó Armando muy asustado e inmediatamente volteó a ver a Mario.

- ¡¿La carta?! - pensó Mario mientras también observaba a Armando.

- ¿Qué significa esta primera página?- preguntó Roberto con confusión.

- Papá no leas eso, es solo una equivocación. - dijo Armando

- Don Roberto, la primera página es un resumen del balance general. - dijo Betty.

Armando optó por arrebatarle de las manos la carpeta con el informe a Marcela. Lo mismo hizo Mario con la carpeta de Gutiérrez, ambos se dieron cuenta de que los demás no tenían la carta, solo ellos dos.

- ¿Pero qué son estos números? ¿Qué es esto Armando? - preguntó Roberto.

En ese momento Mario se levantó y le entregó a Armando una nota: "Betty presentó en informe real".

- ¡Aquí hay una confusión! Esto no era lo que se iba a presentar ¡Hasta aquí llegó la junta directiva! - dijo Armando gritando mientras le quitaba de las manos a todos las carpetas.

- ¡No Armando! Sabes perfectamente que aquí no hay ningún error, así que la junta no ha terminado. Roberto lo que estás viendo aquí, significa nada más y nada menos que Terramoda tiene la prenda sobre establecimiento comercial de Ecomoda. - dijo Daniel enojado.

- ¿De qué están hablando? - dijo Margarita.

- Margarita, Terramoda es la propietaria de Ecomoda. - dijo Daniel.

- ¿Terramoda? ¿Qué es eso?- preguntó Margarita.

- Terramoda es la empresa unipersonal de la doctora Beatriz Pinzón Solano ¿te acuerdas? - preguntó Daniel.

- No sabes de lo que estás hablando Daniel. - dijo Armando.

- ¡Ya deja de mentir Armando! Acá aparecen todas las cifras de las que hablamos. - contestó Daniel mientras ponía sobre la mesa un registro.

- Esto no puede ser cierto. - murmuró Hugo.

- Armando destruirte nuestra empresa, ya es hora de que des la cara. - dijo Daniel.

- Yo no la destruí, la tengo protegida. - dijo Armando.

- ¡Estúpido está embargada! - gritó Daniel.

- ¡Y llegaron los meseros! - entró diciendo Patricia interrumpiendo.

- ¡Patricia Fernández! ¡Larguese de aquí! - gritó Armando.

- Vamos a calmarnos, por favor. - dijo Roberto.

- No puedo calmarme. Lo que tenemos que hacer es vender lo poco que queda y repartirlo entre todos. - dijo Daniel.

- Eso no es necesario. Como pueden ver en el informe si Ecomoda sigue trabajando de la misma manera en que lo está haciendo, en unos meses pueden llegar a un balance. - contestó Betty.

- ¡Maravilloso! Pero yo necesito mi capital para invertirlo en un negocio. - dijo Daniel.

- ¿No te das cuenta? No hay una empresa, no tenemos que vender. - dijo Marcela.

- ¿Qué dicen? ¿Eso significa que ya no voy a recibir mi cheque mensual?- dijo María Beatriz.

- Así es María Beatriz. - dijo Hugo.

- Beatriz ¿qué debemos hacer para qué nos regrese la empresa? - preguntó Daniel.

- Lo único que quiero es dejarles claro el estado real de la empresa. Les dejo un poder en blanco para que dispongan de Terramoda como les plazca.

- Me parece bien. - dijo Roberto.

- Marcela ¿estás bien? Se me hace raro que no hayas dicho nada, pareces muy tranquila con todo esto.- dijo Margarita.

- Margarita, lo que pasa es que... yo ya lo sabía.- dijo Marcela nerviosa.

- ¿Qué? ¿Y no dijiste nada? ¿Cómo es eso posible Marcela? - dijo Margarita indignada.

- No podía decirlo, Armando merecía que lo expusieramos frente a todos. - dijo Marcela.

- Claro, ahora lo entiendo todo, esto lo tenían planeado hace mucho tiempo, por eso han estado tan extrañas conmigo. Marcela lograste que Betty se pusiera en mi contra y me traicionara. - dijo Armando enojado.

- Yo no puse a nadie en tu contra, tu sabes perfectamente lo que hiciste junto a Mario. Deberías agradecer que acá solo estamos hablando de la empresa y no del asco que son como hombres, si es así que se les puede seguir llamando. - dijo Marcela furiosa.

- ¿Pero a qué se refieren? - dijo Margarita.

- Marcela ¿con qué moral vienes a decirme esto? ¿Por qué no le dices a todos lo que pasa entre Betty y tú? Vamos, diles. Sabes que eres peor que yo, ambas son peor que yo, son unas enfermas...

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Hola, ¿qué les pareció?

Marcetty: Un amor súbitoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora