𝐌𝐢 𝐃𝐮𝐥𝐜𝐞 𝐎𝐥𝐢𝐯𝐢𝐚 #2 ©

𝗘𝗜𝗚𝗛𝗧 8

La llegada del verano estaba comenzando otra vez, se aproximaba el cumpleaños de Olivia, la fecha el quince de diciembre. Olivia se encontraba en casa de mis padres,  T/n y yo estábamos cenando solos, ya que Olivia rogó quedarse a dormir en la casa de mis padres y accedimos.

Quería saber si Olivia se estaba comportando bien asi que tome el teléfono y marqué el número de mamá, el tono continuaba y continuaba, me preguntaba porque no contestaba aún.

— Aidan — era la voz de mamá

— Mamá, ¿está todo bien por allá? — mire hacia atrás ya que había escuchado un ruido — ¿Olivia? ¿Se está comportando?

— Si, si. Todo está genial por aquí —se oían las de papá y Olivia de fondo — Olivia está jugando a las cartas con tu padre, póquer para ser exacta — rio

— Está bien mamá — sentí unas manos que me rodearon por la cintura — pásame a Olivia porfavor — Mire hacia atrás y era t/n, me había dado un susto tremendo

— Amor — bese sus labios y tape el teléfono contra mi pecho

Sonrió — ¿Hablas con Olivia?

Volví a poner el teléfono en mi oreja — Con mamá — Susurré — ¿Olivia?

— Si dame abuela, si, si — se oían unos murmullos — ¿papá? — sonreí al escuchar la voz de Olivia

— ¿Cómo está la niña más hermosa de todas?

Se oyó una risa de Olivia — bien

— ¿Estabas haciendo travesuras? — pregunté

— No, no papá. Ya no hago travesuras, lo juro — Se oía sería

— Olí, no le mientas a papá — Sonreí ya que sabía que algo había sucedido

— Está bien, está bien. Hice trampa en el póquer cuando jugaba con el abuelo, lo admito — Reí al oír eso, Olivia es muy traviesa

— Mmm... Ya veo, debes ir a dormir amor, tienes que volver mañana y tienes que ir al hospital — Mire a t/n la cual aún me abrazaba por la cintura y pegaba su rostro a mi espalda

— Lo sé — parecía desanimada

— Linda, todo esto acabará pronto, mamá y yo te estamos esperando, mañana estarás llena de besos y muchos abrazos.

— Los quiero mucho — Sonreí

— También te quiero olí, ambos te queremos mucho, mucho — Sonreí — Ah, y zafiro te está esperando también, aún que no lo creas hasta ya te extraña — Se oyó una risa

— Cuiden a zafiro, mañana iré a verlo. Bueno papi ya me iré a dormir, la abuela hizo la cama para que me duerma allí — Se oía emocionaba

— Esta bien, ve a dormir — corte el teléfono

Mire a t/n la cual sonreía, deje el teléfono y la tome de la cintura trayendola hacia mi —  Te ves hermosa con esos mom jeans — Sonrió para esconder su rostro en mi pecho — Que no te de pena cielo, eres hermosa — La bese

— Hay que ir a dormir — Me miro, asentí y la abrace, es la mujer más hermosa

— Te amo — Acaricie su espalda

— También te amo aidan — Me tomo de las mejillas y pego mis labios a los suyos, un momento único, no dudo ni un poco del amor que siento hacia t/n, todo en ella me atrae, es como un imán me atrae hacia ella. Obviamente yo soy otro imán

[...]

— Buen día — Bese los labios de t/n mientras acariciaba su mejilla, está abrió sus hermosos ojos y me sonrió

— Buen día, precioso — Me beso, sonríe sabiendo que era la persona que la hace feliz y sacar su lado cariñoso y tierno.

— Hay que ir por Olivia, no creo que mamá quiera venir aquí... — me interrumpió

— No tengo nada contra ella — Se puso de pie y camino hasta su armario, me senté en la cama y la observé, creí que no la perdonaría jamás

— ¿No estás enojada con ella? ¿O? — Se dió la vuelta y camino hasta la cama para sentarse aun lado de mi, me sonrió y me tomo la mejilla

— No tengo nada con Lauren, aidan — Asentí — Ya la perdone, aunque jamás me haya perdido perdón, pero no tengo nada contra ella, hay que aprender a perdonar — se puso de pie y continuo buscando ropa en su armario

— Que bueno — Camine hacia dónde ella se encontraba — Quizás haya un momento en el que tú y mamá hablen, y aclaren todo, se que ella te pedirá perdón

— Si tal vez haya un momento en el que hablemos, pero todo a su tiempo, quizás ella aún no está lista para tener una charla conmigo. No quiero hacerla sentir incómoda o que crea que la atacó — Sonreí

— Esa es mi chica — Deje un beso en sus labios

— Ve a buscar a Olivia — Le dió una palmada en la mejilla

— Como lo ordene mi amor — Hice una seña de soldado, sonrió y me señaló la puerta — Ya voy, ya voy — Me fui de la habitación