Es martes por la mañana y dentro de una hora tengo clase en la universidad. Busco mi café y miro entre las mesas, todas vacías excepto una.
Me dirijo a la mesa en la que Harry está sentado y le saludo con una sonrisa.
- Buenos días, Harry, ¿qué tal?
Levanta su mirada verdosa hasta mí.
- Bien, Violet, gracias -Responde y sigue con su libro.
Me quedo desconforme con su respuesta pero agradezco que por lo menos no me haya ignorado. Tomo mi café mientras le observo leer tranquilamente, casi como si no estuviera allí. Levanta su mirada nuevamente luego de un rato y me observa durante varios minutos.
- ¿Qué lees? -Le pregunto bastante incómoda ante su profunda mirada. Seguramente estoy sonrojada, por lo que bajo mis ojos al libro que sostiene con sus manos contra la mesa.
- Wuthering Highs -Su voz es ronca y baja, utiliza un tono de voz casi imperceptible, y si no hubiese estado completamente concentrada en él, no habría logrado escuchar su respuesta.
Asiento, aún con la vista fija en el libro, y doy otro sorbo a mi café.
- Nunca lo he leído -Comento y Harry sólo hace un pequeño movimiento con su cabeza, como asintiendo. Obviamente mi comentario no le interesó en nada.
Siento el calor en mis mejillas por lo patética que me siento en este instante y tomo el resto de mi desayuno en silencio, lo suficientemente avergonzada cómo para no atreverme a decir nada más.
Reviso la hora en mi celular y me doy cuenta que son las 8:35, y que tengo sólo 20 minutos para llegar a mi primera clase, teniendo en cuenta de que me agrada llegar 5 minutos antes.
Guardo mi celular y el resto de mis cosas en mi bolso, me coloco de pie lista para irme. Harry levanta su mirada verdosa y la clava en mí, con fuerza, como penetrándome con ella, y me siento horriblemente incómoda nuevamente.
- Hasta luego, Harry, que tengas un buen día -Murmuro torpemente, antes de comenzar a caminar hasta la puerta con la mirada baja.
Pero cómo no, cuando estoy por tirar del picaporte de la puerta, la madera golpea mi frente con fuerza, haciendo que caiga al piso. Mis dibujos se desparraman junto a mí y veo, algo borroso, a un muchacho de pie frente a mí, tendiéndome su mano para ayudarme.
- Dios mío, no sabes cuánto lo siento, en realidad no quise hacerlo, lo siento mucho, lo lamento -Repite el chico y niego con la cabeza.
- Está bien -Digo, volteando a ver las hojas junto a mí, y me sonrojo más de lo que ya estoy al ver a Harry con la mirada fija en ellas. Un dibujo de él en primer plano está encima de todo.
Con las mejillas ardiendo, las tomo rápidamente, guardándolas en mi carpeta nuevamente, y evitando todo contacto con los ojos de Harry.
Salgo prácticamente corriendo de la cafetería, ignorando al chico que sigue disculpándose.
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Coffee
Fanfiction❝De cómo cada mañana el chico de rizos lee en su cafetería preferida.❞ © 2015 paynexgod