Sueños Compartidos

20 años

Senku resultó encajar muy bien en el grupo de amigos de Kohaku, y ya no le era raro verlos una vez cada dos o tres meses. También a veces accedía a salir con ella y su grupo de vez en cuando.

Ahora mismo, después de pasar una época de exámenes, Mozu y Luna lograron convencerlos de ir a una discoteca, y aunque al principio Kohaku fue una de las que estuvo en contra, después de beber varias botellas de cerveza su ánimo se disparó por los cielos y ahora estaba acaparando la pista de baile, borracha y alegre, llamando mucho la atención de la mayoría de personas por su talento y su belleza.

Senku sorbió calmadamente de su copa de vino, mirando hacia el techo de la discoteca, antes de que sus ojos volvieran una vez más inevitablemente a la figura de su mejor amiga bailando sola en la pista. Ella lo había invitado a bailar, pero se negó, y ahora no podía evitar maravillarse por su energía y alegría al bailar. Ella no dejaba de sonreír mientras movía sus caderas sensualmente al ritmo de la música, pero no lo hacía para impresionar a nadie, ella era así por naturaleza, preciosa e inquieta, llena de gracia y apasionada en todo lo que se proponía.

Rio entre dientes ante sus propios pensamientos. Últimamente no era nada raro sorprenderse a sí mismo mirándola más de la cuenta, pensando cosas nada propias de un amigo.

¿Sus hormonas finalmente estaban despertando, o saliendo de sus tumbas, más bien? Aunque tampoco es que fuera algo completamente nuevo, para ser honesto.

Recordaba la fiesta de graduación, cuando ella lo besó en la mejilla para una foto, luego de superado el fastidio inicial, la sensación de sus suaves y cálidos labios en su mejilla lo distrajo toda la noche, y cuando le concedió un solo y único baile en la fiesta, sujetar su cintura y tenerla pegada a su cuerpo, sintiendo la piel desnuda de su espalda contra la yema de sus dedos, lo hizo tener sensaciones... raras...

Ahora que pasaba prácticamente cada fin de semana en su departamento o ella en el de él, esas sensaciones raras ya no lo eran tanto, de hecho, estaba bastante seguro de que era una especie de atracción hacia ella.

¿Ella le gustaba? Prefería no pensar en eso, debido a lo ocupado que estaba, porque de todos modos no tenía tiempo para una relación. Aunque, viéndola bailar así, no podía evitar tener el impulso de querer ir hacia ella y preguntarle si su oferta de bailar con él seguía en pie. Quería saber qué se sentiría estar pegado a su cuerpo mientras ella se movía así y... y... quizás debería dejar de beber ahora.

La diversión de Kohaku se acabó cuando un tipo quiso pegarse a ella para toquetearla mientras bailaba. De inmediato lo abofeteó y se regresó a la mesa, sentándose junto a Senku.

—Ja, una ya no puede divertirse sin que algún idiota crea que lo hace para seducir. —Rodó los ojos, tomando una botella de la mesa—. ¿Dónde están los demás, por ciento?

—Chelsea se durmió después de la primera copa. —Señaló con la cabeza a la pequeña mujer dormida en dos asientos—. Kinro y Kirisame se fueron juntos hace rato. Mozu está seduciendo a una chica afuera y Luna está bailando con su nuevo novio. —Bostezó—. Yo quiero irme ahora, para ser honesto.

—Sí, ya debería irme también. —Dejó la botella con una mueca de tristeza—. ¿Me ayudas a llevar a Chelsea a casa? No confió en Mozu o Luna para no olvidarse de ella.

—Claro.

Pidieron un taxi y fueron primero a dejar a Chelsea a su departamento, antes de ir al departamento de Kohaku.

—Pasaras la noche aquí, ¿verdad? —preguntó ella mientras se quitaba sus tacones.

—Sí, ya que mañana estaré ocupado con un proyecto en mi laboratorio. —Se quitó su chaqueta y miró con las cejas arqueadas como ella se quitaba su vestido, quedando en ropa interior—. ¿Puedo preguntar qué haces, Kohaku?

—Voy a darme una ducha. —Sonrió inocentemente—. ¿Por qué? ¿Quieres ducharte primero?

—N-no... Ve tú.

—¡Ok!

Senku soltó un largo suspiro tembloroso.

Qué extraño... a veces le daba la impresión de que Kohaku sentía más que amistar por él, pero otras veces ella actuaba como si no lo viera como hombre en lo absoluto... Eso lo confundía, pero era mejor no pensar en estas cosas, eran absurdamente molestas y problemáticas.

Cuando Kohaku terminó de ducharse salió a la sala envuelta en una pequeña toalla, totalmente indiferente a Senku atragantándose en la sala al verla así. ¡¿Esa leona quería matarlo?!

Se repitió mentalmente no pensar en esas cosas problemáticas mientras tomaba una ducha, una ducha fría, y cuando salió encontró a Kohaku ya vestida bebiendo un gran vaso de agua.

—Ya me siento mejor, ¿quieres ver una película o quieres dormir?

—Yo no bebí tanto, veamos algo. —Se sentaron en la sala a ver una película vieja de ciencia ficción, con Kohaku riéndose cada vez que Senku hacía sus correcciones científicas a cada cosa tecnológica que aparecía en la película.

Ese momento lo hizo irse a dormir con una sonrisa esa noche.

No necesitaba ni un milímetro esos sentimientos y pensamientos problemáticos y complicados. Ellos eran más que felices así, tal como estaban, sin necesidad de nada más.

Continuará...

Holaaaa :D

Ay, ya estamos en sus veinte años TwT Solo faltan 10 capitulos para q se acabe este fic Q-Q

Y como siempre les recuerdo q tienen el fic ya finalizado en mi Patreon, por si quieren apoyarme ahí! Se los agradecería de todo corazón :'D

Ojala q este cap les haya gustado, ya varios se venían preguntando cómo se sentía Senku respecto a Kohaku y pos... ahí lo tienen xD

De verdad muchas, muchas gracias por todo su apoyo! No olviden que se les ama!~ :3

Me despido!

CELESTE kaomy fueraaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!