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you check in and out
of my heart like a hotel




—¿sos real?— pregunto brisa desde el sofá, mirando a candela con una cara de asombro.

—si y ya vengo.

—no espera un segundo— dijo bri dirigiéndose hacia la castaña —¿luego de dos semanas saliendo de tu pieza solamente para ir a baño y comer sales arreglada y dices "ya vengo"?.

—pues, ¿si?.

—¿a donde vas?.

—bri, se me hace tarde, ¿hablamos luego si?.

sin dejar que su prima contestara salió rápidamente del departamento y empezó a caminar hacia la plaza que estaba cerca de su casa.

estaba muy nerviosa pero feliz a la vez, luego de dos semanas de su ruptura con ivan el la había llamado, pidiéndole que se vieran en una hora en esa plaza. ella se quedó muda cuando escuchó su voz, más no dudó un segundo en decir que si.

la emoción la había hecho salir treinta minutos antes, por lo que fue al starbucks y pidió un té.

fue a espéralo en una banca que era donde siempre se encontraban antes.

el le había dicho para verse a las siete y a las ocho y cuarto le llegó un mensaje.

"perdón, ocurrió algo y no podré ir"

candela vio el mensaje el mensaje y para su sorpresa no siento ganas de llorar, porque sabía que una parte de ella se lo esperaba.

se dirigió a su casa, brisa y angie estaban mirando una película en la sala. cuando la vieron entrar notaron que algo no estaba bien, así que la peliazul alzó un brazo en señal que se acerque a ellas.

candela sin decir nada fue hacia ellas y se sentó al lado de angie, abrazándola y brisa dejó un beso en su frente.

—coraline acaba de empezar, ¿queres verla con nosotras?.



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luego de cuatro días, un ya sábado a eso de las dos de la madrugada, candela que ya estaba durmiendo, recibió varias llamadas.

era de un número desconocido, pero la había llamado como siete veces, cosa que la hizo despertar.

le volvieron a marcar, así que esta vez contesto.

—¿quien carajos es?

—¿cande?, soy yo ivan.

—¿ivan?— candela sintió su corazón acelerarse al escuchar su voz —¿porque me llamas y de este número? ¿te pasó algo?

—no es que cambie de número, ¿podes bajar?.

—¿bajar?

—estoy en la entrada de tu edificio, el viejo ese no me quiere dejar entrar así que, ¿podes bajar?

candela se quedó en un tipo de shock, ¿que hacía el en ahí? ¿porque luego de dejarla plantada y bloquearla estaba en su casa?

—¿cande?

—si, ya voy dame un momento.


~~~


—no te preocupes fede, es amigo mío.

federico, el señor que cuidaba la puerta del edificio asintió y regresó a su puesto, no sin antes darle una mala mirada al morocho.

—¿que haces aquí ivan?

el sin decir nada la abrazo, candela se quedó de piedra cuando lo hizo pues no se lo esperaba, pero luego correspondió el abrazo.

—quería verte— dijo el morocho aún sin separarse, hundiendo su cara en su cara en el cuello de candela y inhalando su aroma.

luego de unos minutos candela se separó, más el no se alejó.

lo miro a los ojos, y notó el porqué de sus acciones.

—bebiste, ¿no?

—un poco, pero eso no importa.

—si importa, mejor te pido un taxi y ya luego...

no la dejo terminar, porque la beso.

era lo último que candela esperaba que el hiciera. con una mano la tomo de la cintura, atrayéndola hacia el y con la otra la tomo del rostro.

al principio ella no hizo nada por la sorpresa que se llevó, pero unos segundos después le correspondió, sintiendo esa sensación que solo aparecía cuando el la besaba, había extrañado tanto eso, lo había extrañado y necesitado tanto a el.


~~~


candela ya había acostumbrado dormir hasta muy tarde, sobre todo los fines de semana, por lo que se despertó a las casi tres de la tarde pero con una enorme sonrisa en el rostro.

para confirmar que no había sido un sueño revisó su historial de llamadas y si, ahí estaba el número desconocido.

anoche conversaron un poco más, evitando cualquier tema sobre lo qué pasó que los podría poner incómodos, el robándole algunos besos desprevenidos y ella mayor parte del tiempo sonrojada. a eso de las tres candela pidió un taxi para el.

noto que ese mismo número le había mandado un mensaje por whatsapp a la una de la tarde, así que lo abrió rápidamente.

era un audio, así que presiono el reproducir.

"hola cande buenas, escucha ehh quería disculparme por lo de anoche, estaba en pedo y no sabía lo que hacía de hecho recuerdo solamente que fui a tu casa y luego aparecí acá así que también agradecerte porque supongo que me ayudaste con eso. bueno ehh nada eso, posta que lo siento mucho."

candela tiro el celular al otro lado de la cama y se tapo la cara con mas manos, sintiendo las lágrimas salir de sus ojos.

sintiendo ganas de vomitar salió rápidamente hacia el baño, en este estaba brisa lavándose los dientes así que la castaña subió la tapa de la taza y vomitó.

brisa la miro asustada y sin decir nada se apoyo a su lado sujetándole el pelo y acariciando su espalda. candela sentía como cada arcada raspaba su garganta y sus ojos ardían.

luego de que ella soltara todo y brisa la ayudara a lavarse, la llevo a su habitación y la acostó en su cama, haciendo lo mismo y abrazándola.

—fede me contó que te vino a buscar anoche.

candela no dijo nada, solamente cerró los ojos.

—te amo muchísimo dela y odio verte así.

—lo siento.

—no te disculpes, pero prométeme que no vas a dejar que entre y salga de tu vida y de tu corazón como si fuera un puto hotel.

—te lo prometo.

—ahora vamos a que tomes y comas algo, angie trajo facturas.



















eth

reckless || spreen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora