La familia Sano se muda de casa para poder tener cada uno su privacidad, además de vivir más cómodo, lo que no saben es que a partir de ese día el infierno para ellos comenzará, sobre todo para la menor de la familia, Emma Sano.
"Te encontré"
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Un nuevo día había comenzado, después de lo ocurrido la noche anterior solo los patriarcas de la familia Sano y la menor no habían podido dormir nada, Shinichiro tenía que estar al cuidado de su hermana la cual seguía bastante asustada, el abuelo Sano solo le daba vueltas al asunto al igual que a su cama, Emma cada vez que cerraba sus ojos veía a aquella persona con todas esa heridas, simplemente ya no pudo conciliar el sueño, y Manjiro e Izana, bueno, ellos habían dormido como bebés.
En el desayuno los dos chicos trataron de animar un poco el ambiente, sobre todo cuando cierto pelinegro casi entierra la cara en el tazón de cereal a causa del cansancio, pero todos sus intentos de hacer reír a cierta rubia no sirvieron de nada ya que seguía mirando su desayuno como si dentro de la leche fuera a encontrar la respuesta a lo que pasó la noche anterior.
En cuanto terminaron de desayunar Shinichiro se levantó para comenzar a lavar todos los trastes, pero se sorprendió al ver qué la única que aún quedaba en la mesa mirándolo fijamente era su hermana menor, suspiro y cerró el fregadero para luego acercarse a ella, poniéndose en cuclillas y sonriéndole de forma cansada pero con sinceridad.
-¿Te sientes mal, Emma? ¿Quieres ir a dormir otro poco?-Pregunto con detenimiento mientras la chica solo miraba sus manos y negaba con lentitud.
-No quiero dormir... Me da miedo
El mayor suspiro y se levantó para luego extenderle la mano a su hermana la cuál lo miro con curiosidad, sus ojos eran bastante tiernos apesar de aquellas ojeras adornando su rostro.
-Ayer te dije que iríamos por la pintura para la casa, iremos en el auto, puedes acostarte en los asientos traseros y descansar mientras llegamos a la tienda de pintura, ¿Te parece bien?
La rubia sonrió y asintio mientras tomaba la mano de su hermano para luego levantarse y ambos caminar a la habitación de la chica, ella ya ni siquiera quería entrar ahí pero debía arreglarse antes de salir a la calle.
Cuando termino salió de la habitación encontrandose al azabache mirando seriamente a sus dos hermanos.
-Vamos, nosotros también queremos ir, será divertido ir todos juntos.-Hablo Mikey mientras abría su Taiyaki y le daba una mordida para luego estirarlo en dirección a Emma la cual negó ligeramente.
-Ya les dije que no, Emma va a ir descansando un poco y ustedes dos solo hacen ruido, es mejor que se queden, además el abuelo no se puede quedar solo y lo saben.-Dijo todo mientras veía como Izana jalaba la mano de Mikey para darle una gran mordida al postre el chico, el cual hizo un pequeño berrinche al ver cómo la mitad de su pastelillo ahora estaba en el estómago de su hermano.
-Esta bien, pero espero que para mí cumpleaños me regales una motocicleta.
-Hablamos de eso cuando tengas la estatura adecuada.
El rubio le enseño la lengua a su hermano mayor para luego correr detrás de Izana, el cual se había reído por lo que había dicho el pelinegro y ahora estaba ahogándose con un trozo de Taiyaki para luego salir corriendo al baño, Shinichiro suspiro y volteó a ver a su hermana con una sonrisa.
-¿Nos vamos?
-Si.
Ambos salieron del lugar, llendo al auto para luego partir al lugar, pero ni ellos ni el resto de la familia se dio cuenta de que desde la ventana de la rubia una sombra negra miraba fijamente al auto el cual se alejaba de la casa.
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Después de varias horas de compras para la casa y la decoración ahora ambos ya iban de regreso, Emma estaba en el asiento del copiloto, desde que subieron al auto se había quedado dormida, el mayor simplemente decidió dejarla descansar, sabía que ella era la que peor la había pasado anoche.
Aún faltaba mucho para llegar a casa así que fue con mucho cuidado para evitar despertar a su hermana.
El seguía mirando el camino fijamente, hasta que algo llamo su atención, mirando de reojo por el espejo retrovisor vio una silueta alta sentada en los asientos de atrás, miro rápidamente para darse cuenta de que no había nadie, suspiro al pensar que el cansancio estaba comenzando a pasarle factura, así que simplemente ignoro todo y siguió conduciendo con cuidado, pero todo se arruinó cuando sintió una respiración cerca de su oído y luego escuchó un suave susurro.
-Aquí estoy
Freno de inmediato mirando asustado a la parte trasera, pero nuevamente no vio a nadie, su respiración era agitada, ahora ya se encontraba sudando, miro a Emma la cual seguía dormida, agradecía que ella pudiera descansar, al menos eso la ayudaría a relajarse, pero sus pensamientos de vieron interrumpidos por suaves quejidos, los cuales salían de los labios de la menor, iba a despertarla pero ella se reincorporo en su asiento de forma rápida, estaba asustada, sudaba frío y tenía lágrimas en los ojos, volteó rápido a ver a Shinichiro el cual suspiro con preocupación y la abrazo fuertemente.
Después de un rato ella le contó lo que había soñado, un chico alto, bastante fuerte e intimidante sostenía su cuerpo sin vida, la menor se había visto a su misma muerta, aunque se veía bastante lastimada y lo que más recuerda es aquel gran y horrible golpe en un costado de su rostro, aquella lesión se veía muy fea, tanto que logro espantar a la rubia para que está pudiera despertar.
Después de varios minutos llorando en los brazos de su hermano ambos se dispusieron a ir de regreso a la casa, aunque ambos sabían que todo lo que se venía era completamente nuevo y aterrador, los dos sabían que esto no eran unos simples sueños, y por más que quisieran que fuera así, no podría pasar desapercibida aquella situación, Shinichiro quería empezar a investigar sobre aquel lugar, pero primero quería despejar su mente, ahora más que nada se arrepentía que haberse mudado a esa casa junto a sus hermanos y su abuelo.
Te estoy observando.
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¡Hola! Aquí Fern de nuevo :D
Espero que les haya gustado este capítulo y vuelvo a decirlo, todo va a ir subiendo de nivel a cada actualización, así que prepárense :^
Otra cosa, las frases del final de cada capítulo no las pongo al azar, serán importantes en capítulos más adelante, así que no las pasen como cosa de nada :D
En fin, espero que la estén pasando bien, tomen agua y coman frutas.
Recuerden vigilar su espalda y checar debajo de su cama, puede ser que él esté ahí escondido.
