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Justo después de haber llegado, todos los chicos fueron a sus respectivas habitaciones para mostrárselas a sus amigos, la pequeña rubia se encontraba en su cama y junto a ella su mejor amiga, quería contarle todo lo que ha pasado, desde sus pesadillas hasta las cosas que ha visto, también quería contarle sobre el diario, pero no quería que sus hermanos escucharán, así que mejor decidió esperar.

Ambas hablaban de cosas triviales mientras reían, en eso la puerta se abrió y aquel pequeño rubio acompañado de su amigo pelinegro entraron a su habitación y fueron rápidamente hacía un lado de las chicas sentándose en el suelo.

-¿De qué hablan, chicas?- Dijo Mikey mientras apoyaba su mentón en el colchón y miraba a su hermana.

-De nada interesante, solo cosas normales, ¿Y ustedes? ¿Se aburrieron de estar en tu habitación o qué?-Hablo la rubia mientras se acomodaba en su cama y su mejor amiga imitaba su acción.

-No, pero Baji quería venir a saludarte.

-Es cierto, hace mucho no nos vemos, Emma, también tu, Hina, tiene varías semanas que no habíamos hablado.

Las chicas rieron con ternura, Emma y Hinata eran muy buenas amigas de Baji y de Kakucho, todos se llevaban muy bien y pasaban tiempo juntos cuando la familia Sano aún vivía cerca de ellos, pero ahora era un poco más complicado verse los seis juntos.

Los cuatro amigos seguían platicando, contando algo gracioso o interesante, ahora la chica de cabello marrón claro se encontraba contándole a sus amigos que tenía novio y que el chico era demasiado lindo.

-Takemichi siempre me ayuda en todo, es un muy buen chico y... Siento que tal vez con él si pueda llegar a formar una familia...

Todos sonrieron enternecidos al ver el sonrojo de la menor e inmediatamente después comenzaron a molestarla con el tema de su novio.

-Oye, en algún momento deberías presentarnos a tu novio, si ese chico te hace algo malo solo dilo, Mikey, Izana, Kakucho y yo iremos por ese idiota y lo haremos pagar.- Hablo el azabache mientras amarraba su cabello en una coleta ya que comenzaba a estorbarle un poco.

-Y yo también, nadie se va a meter con mi mejor amiga, además de que me tiene que servir de algo aquellas clases en el dojo con el abuelo, ¿No creen?

Las risas volvieron a inundar la habitación de la chica llamando la atención de otros dos chicos los cuales no tardaron en aparecer en el cuarto de Emma.

-¿Así que hacen una reunión y no nos invitan? Que malos son.

Los menores voltearon a ver a Izana y a Kakucho, el peliblanco tenía una mueca de fingida decepción mientras su mejor amigo reía levemente.

-Deja de hacer drama y entren de una vez, Hina nos está contando sobre su novio.

En cuanto el pequeño rubio dijo esa palabra los dos que estaban en la puerta se acercaron para sentarse en el piso mirando fijamente a la chica la cual les contó a ambos chicos sobre su novio dejando sorprendido a Kakucho.

-¿Takemichi? ¿Hanagaki Takemichi?

-¿Lo conoces, Kakucho?

-Si, podría decirse que éramos amigos de la infancia, lo conocí antes que a Izana, es un buen tipo, sé que te cuidará bien, pero como dijo Baji, si en algún momento te hace algo dilo, iremos por él y le haremos ver qué contigo nadie se mete.

El ambiente era bastante animado entre los chicos, siguieron hablando de cosas triviales, algunos contando cosas graciosas que les había pasado, la platica tomo una pausa cuando el mayor de los hermanos Sano subió a la habitación para decirles que la cena estaba lista y que debían bajar.

PsicofoníaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora