Capítulo 11

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El sol ya se había escondido y nosotros habíamos compuesto dos canciones. Todos estábamos muy felices con el resultado. Bel y Louis no dejaban de mirarse y sonrojarse, y Kendall no había dejado de mirarme, lo cual me confundía aun más.

-Chicos, ¿y si jugamos al escondite? —Propuso Louis

-¡Sí! —Dijimos al unísono

-¿Quien cuenta? Creo que tendrían que ser dos —Dijo Dustin

Hicimos piedra papel o tijera para ver quienes contaban y quedaron Kendall y Niall. Y como nosotros éramos 7 tenían que contar hasta 70.Los chicos dijeron "campo libre" y comenzaron a contar. Yo salí corriendo hacia unas rocas que estaban a unos metros de la fogata; cuando llegué me escondí entre un par y retomé el aliento. Sentí una mano tocando mi hombro y me exalté, me di la vuelta y pude ver que era Carlos.

-Hola —Susurro

-Hola —Conteste

-¿No te has dado cuenta de que te venía siguiendo?

Negué con la cabeza, sonrió y se sentó, me coloqué junto a él.

-Y bien, creo que es un buen momento para que respondas a mi pregunta

Volvió a sonreír y me miró — ¿Alguna vez me he enamorado? Claro que sí, muchas veces, pero de esos enamoramientos tontos, de esos que te colas por alguien y a la semana te preguntas "¿por qué me gustaba?" No por el hecho de si fuera linda o fea, en lo personal pienso que todas las mujeres son bonitas, si no porque ni siquiera conocía a la chica.

Reí —Continua

-Bien, pero si te preguntas de que si me he enamorando de verdad, pues sí, dos veces. Pero siempre me enamoro de la chica incorrecta, pues la primera se llamaba Kate, una chica muy bonita, y extrovertida, me gustaba mucho pero ella no lo sabía, la veía todos los días en historia, geografía y música, éramos muy buenos amigos y siempre salíamos con un par de chicos más. Un día el profesor de música nos mandó a hacer un trabajo en grupo, y pues como nosotros podíamos decidir con quién trabajar elegimos nuestro grupo. En fin, nos reunimos en su casa, y me propuse ser el primero en llegar, porque quería decirle todo lo que sentía por ella,  ya no lo podía guardar, era más fuerte que yo. Llegué a su casa, me hizo pasar, tomamos unos jugos y pues decidí que era la hora, y se lo dije, le confesé todo lo que sentía por ella. Me sonreía, y cuando iba a hacerle la gran pregunta el timbre sonó, así que decidí preguntarlo después. Llegaron los chicos, trabajamos y al final decidimos jugar "verdad o reto" —Hizo una pausa- ella eligió reto y tenía que besar a un chico, y ¿adivina qué? Yo no era ese chico, se besaron, y yo contenía miles de lágrimas, a la semana siguiente se habían puesto de novios y decidí olvidarme de ella —Me miró- Y fue así como me concentré mucho más en la música y te conocí... Digo, a tu padre; y a ti claro.

Lo tomé de la mano fuerte, parecía algo triste. Le sonreí y él a mi

-¿Y la segunda chica?

Al decir eso sonrío ampliamente —Solo te diré dos cosas es un amor imposible, pero sigo enamorado de ella.

"Sigo enamorado de ella" Esas palabras atormentaban mi mente, no me pregunten por qué, pues no lo sé, desconozco los sentimientos del amor, y de la amistad verdadera, pues nunca he tenido ninguno de los dos, tampoco sé diferenciarlos, así que no sé lo que siento, aunque es parecido a lo que Kendall me hace sentir cuando sonríe, supongo.

Un ruido me saco de mis pensamientos. Eran pasos; Carlos se llevo su dedo índice a los labios, con la intención de decirme que haga silencio, y que no me moviera. Se asomó para mirar hacia fuera, volteo para decirme que Niall estaba de espaldas a nosotros y que cuando el dijera 3 teníamos que correr.

-Bien —Susurró- 1...2...¡3!

Salimos corriendo y Niall se dio cuenta cuando ya estábamos delante de él. Corrimos para que no nos pasara y vimos a Kendall, empuje a Carlos para que corriera más rápido y llegara a picar y lo hizo, pero yo no logré, y tampoco Dustin que venía detrás de mí. Seguimos jugando por una hora más y a las 9:23pm volvimos a la fogata; la cual se había apagado y tuvimos que volverla a prender, comimos los sándwiches que quedaban y hablamos de temas variados, hasta nos pudimos conocer mejor. A la 1:45pm volvimos a las cabañas, nos lavamos los dientes y nos mentimos en nuestras respectivas camas. Recordé la conversación que tuve con Carlos, quería preguntarle que se siente, que se siente estar enamorada o "estar en las nubes" como todos dicen, así que comprobé que todos estaban dormidos y me pasé a la cama de Carlos, me acosté a su lado y me tapé

-Carlos —Susurré y lo sacudí un poco

-¿______(tn)? —Bostezó y se restregó los ojos- ¿Qué haces aquí?

-Es que tengo una pregunta más para ti, si no te molesta responderla...

-Claro que no cariño —Dijo dándose la vuelta para quedar frente a mí- Dime, ¿qué ocurre? —Me corrió el pelo de la cara.

-Pues... quiero saber cómo se siente, qué se siente estar enamorada...

Sonrió y se acercó un poco más —¿En verdad quieres saberlo?

El verano que me cambió la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora