El verano que me cambió la vida

Capitulo 8. Maratón -1/5

Mientras Kendall bajaba la velocidad, me di cuenta de que no podía contarle mi sueño… No lo conocía lo suficiente como para hacerlo. Me caía bien, pero aun así era un desconocido.

-Dime –Dijo cuando ya estaba quieto en su columpio

-Pues… -Tenía que inventar algo- Creo que tengo el compañero perfecto para ti, digo, para que compartas habitación

En parte era cierto, en parte no. Me re refiero, había visto a un chico un poco más bajo que el, usaba lentes y cada vez que lo veía estaba tocando la guitarra y era de esta parte del campamento. Nunca le había ido a hablar pero ya lo haría. Lo único que recuerdo es que su nombre es Dustin y tiene 19 años, según él se había presentado.

-¿Ah sí? –Dijo mirándome fijo.

En su mirada se notaba un destello de desilusión, supongo que esperaba que le dijera que se podía quedar en nuestra cabaña.

-Sí, su nombre es Dustin, creo y tiene 19.

-Y ¿por qué piensas que es perfecto para mí?

-Pues cada vez que lo veo está tocando su guitarra con tanta pasión…

Sonrío- Sí, creo que me has encontrado un compañero genial

-Bien, luego de clases hablaré con él.

Kendall me miraba de una manera tan cálida, sentía que sus hermosos ojos verdes me envolvían bajo la luz del sol que dentro de unas horas bajaría. Me sonrojé y supongo que lo notó, porque me sonrío.

-Vámonos, ya está por terminar la clase –Dije

Y así, en total silencio caminamos hasta llegar a la cabaña donde, nuevamente, Belén y Louis reían.

-Lamento interrumpir, nuevamente su bello momento, quizá me odien por esto pero Kendall se quedará unos minutos aquí –Lo miré- Iré a hablar con Dustin y luego te vendré a buscar para que vallas, ¿sí?

-Está bien –Me sonrío- Por cierto… gracias ____(tn)

-No hay de que –Le mostré una media sonrisa y me marche del lugar

Me dirigí en busca de Dustin. Recordé que la última vez que lo había visto había sido en el lago, cuando me dirigía al bosque. 
A lo lejos lo puede ver, otra vez, tocando su guitarra. Cuando más me acercaba, más oía la melodía de su guitarra, con errores, mejorando, y nuevos errores. Así que comprobé que componía.

-Hola –Me senté tímidamente a su lado- Dustin, ¿cierto?

-Sí, hola –Dijo y me sonrío- Nunca creí que tú vendrías a buscarme

-Pues aquí estoy –Le sonreí- ¿Tienes compañeros de cuarto?

-Sí, pero en verdad no estoy muy cómodo allí…

-Pues tengo uno perfecto para ti. Toca muy bien la guitarra y canta tan bien como compone, se llama Kendall y tiene 17.

Rió- Gracias ______(tn)

-No tienes que agradecerme –Lo interrumpí- Hablaré con mi padre para que les asigne una nueva cabaña solo para ustedes dos. –Me detuve a escuchar la melodía que creaba- ¿Compones?

-Sí –Sonrió- En casa, allá en Alabama, nunca nadie lo nota, la gente pasa por mi lado y solo ríen porque piensan que no sé tocar, cuando en verdad sólo estoy buscando una nueva melodía.

-Lo siento –Pasé mi mano por su hombro- Yo creo que suenas increíble, aunque estés componiendo. –Mire mí reloj- Me agradas chico, pero es hora de irme. Le diré a Kendall que te busque aquí, así que no te vallas. Seguiremos nuestra conversación luego, ¿sí?

-Claro _____(tn) –Me volvió a sonreír- Gracias nuevamente