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Aquel aroma tan llamativo, que su olfato había percibido, su alfa estaba inquieto queriendo encontrar a quien fuera el portador o portadora de ese bonito aroma.
A... fresas, deliciosas y frescas fresas.
Siguió tratando de encontrar entre todos los clientes de la cafetería, a quien fuese el que olía a fresas.
No fue hasta que sus ojos se posaron en un bonito chico, el cual estaba esperando para pedir su pedido en la fila; su cabellera negra peinada un poco hacia atrás dejando ver un piercing el cual decoraba su ceja.
Era su turno en la caja, así que se sintió tan afortunado de poder atender a aquel chico tan lindo.
Si su olfato no le fallaba, era un omega.
—¿Que desea ordenar? — precunto tratando de mantenerse cuerdo, y no hacer preguntas fuera de lo común.
Por su parte, Jeongguk quería seguir escuchando y apreciando a aquel atractivo y lindo alfa, que estaba frente suyo. su omega sin duda alguna se encontraba inquieto por la imponente presencia de el chico que lo atendía.
— Me gustaría ordenar un Latte con leche de almendras, y una rebanada de pastel de zanahoria. —trato de no parecer nervioso pero aquello le fue imposible por su pequeño tartamudeo.
—¿Para llevar o para comer en el establecimiento? — alzo su mirada, sin querer hicieron contacto visual, sus cuerpos sintiendo algo extraño.
— p-para comer aquí...
Taehyung asintió, le dio su cuenta y el omega pagó aquella cantidad.
Al momento de que Jeongguk pago, sus manos se rozaron y denuevo aquella rara sensación.
—En un momento se le entregará s-su pedido. —dijo regresandole el dinero sobrante.
Cuando el omega se retiró, Taehyung porfin pudo tratar de calmarse, aunque el y su parte animal querían seguir oliendo el bonito aroma que aquel chico desprendía por sus poros.
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Minutos después Taehyung ya estaba llevándole las cosas que este había ordenado.
Trato de aprovechar el pequeño momento que estuvo ahí, para aspirar más de su aroma, esperaba no verse como un loco maniático enfrente de todos, o que sus fosas nasales no se estuvieran expandiendo tanto,aquello ¡Sería una verguenza!.
En cambio Jeongguk, estaba un poco desesperado porque no podía percibir el aroma de aquel bonito empleado de nombre Taehyung, lo supo gracias a el pequeño brochecito que portaba en el uniforme laboral.
Solo lograba percibir un poquito de este, el cual podría ser chocolate.
Comió tranquilamente sus cosas; estaba agradecido de que aquella mesita en la que estaba le daba la vista perfecta de Taehyung.
¡primer capitulo publicado! Espero disfrutaran de la lectura, estoy tan feliz de publicar una nueva historia, que espero de todo corazón les guste. Aún no tengo los días establecidos en los que publicaré cada capítulo, si tienen alguna sugerencia de días díganmelas, sin más me despido :] —J
