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Doyeon estaba feliz, pero a su vez confundida. La pista que había recibido no era de mucha ayuda. Pero, por otro lado, estaba contenta de volver a establecer comunicación con esa persona anónima.

Algunas veces, en la hora del descanso, se quedaba junto con Annie y Yui, especulando sobre quién podría ser. Lo bueno es que los dos primeros cursos quedaban descartados. Lo malo era que no encontraban a nadie de tercer año como posible candidato a ser el responsable de esas cartas.

--- ¿Y no le puedes rogar que te dé más pistas?

--- Annie, ya te lo dije. Me tengo que esperar al lunes. Además, dice que mis súplicas no servirán. Ayer lo probé. . .¡Le dibujé corazoncitos y pandas con caritas suplicantes y me dijo que no!

--- Aw, eso es adorable.

--- ¿Qué? ¡Claro que no! ¡Se llama manipulación o chantaje emocional!

--- Se llamaría así si funcionase, pero creo que lo único que das es ternura.

--- ¡Que no es-! ¡Annie!

La albina comenzó a estirar levemente las mejillas de la Minami, riendo por las muecas que hacía y la manera medio ininteligible con la que soltaba quejidos.

--- Ah, ahora vamos en serio ---soltó las mejillas de la azabache, evitando reír cuando la vio sobarse las mejillas---. Supongo que tienes razón y lo mejor es esperarte al lunes. Después de todo, conforme más pistas te vaya dando, más fácil será descubrir su identidad.

--- Bueno. . . tal vez en algún momento sí que podré saber quién es, aunque tengo miedo de no descubrirlo nunca ---murmuró, algo desganada. Desvió su mirada hacia el reloj de pared que había en el aula, alterándose y poniéndose enseguida de pie--- ¡Debo irme!

--- ¿Hm?. . . ---Annie la miró extrañada, rodando los ojos al ver como se le caían las cosas al suelo por recogerlas de manera tan nerviosa---. Do, deja de temblar. ¿Qué te pasa?

--- ¡E-Es que se me pasó un poco la hora! ¡Había quedado en la sala de música con Shu y-!. . . Annie, ¿por qué haces esa cara?

--- ¿Shu no era de tercer año?

---. . . Annie, eso es ridículo. Somos amigos.

--- Es extraño. Parece que le tenga alergia al resto de estudiantes menos a ti. Eres la única con quién se relaciona.

--- ¿Y Yui?

--- Yui vive con los Sakamaki. Y a mí me tiene que soportar porque soy tu amiga, no tiene otra opción.

--- ¡No voy a sacar conclusiones tan pronto! ¡Tú misma dijiste que esperase a recibir más pistas!

--- Bien, bien ---alzó levemente sus brazos en señal de rendición---. Entonces, suerte. Y recuerda: nada más sepas algo el lunes, me lo dices.

--- ¿Por qué estás tan interesada en esto?

--- ¿Perdona? ¿Estás viviendo una situación romántica como la de un fanfic donde un desconocido te manda cartas de amor y tú tienes que descubrir quién es? ¿Te crees que voy a perder la oportunidad de participar en algo así?

--- Sabiendo la obsesión que tienes con leer fanfics románticos e irrealistas. . . la verdad, no sé ni porqué te pregunté.

--- Tú misma te has respondido. Ahora ve, antes de que el ricitos de oro se moleste porque llegas tarde ---se burló.

Y mientras Doyeon iba corriendo a la sala de música, pasaba por su cabeza lo dicho por Annie: la probabilidad de que el mayor de los Sakamaki fuese el dueño de esas cartas.

𝐀𝐍𝐎𝐍𝐘𝐌𝐎𝐔𝐒 ━ 𝐒𝐡𝐮 𝐒𝐚𝐤𝐚𝐦𝐚𝐤𝐢 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora