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Tanto Shu como Doyeon no fueron a clases en lo que restaba de semana. Doyeon se excusó diciendo que no se sentía bien, y Annie le pasaba los apuntes y las tareas.

Por otro lado, Yui volvió el lunes a clase. Tardó en recuperarse, y obviamente los Sakamaki pusieron como excusa que su anemia había empeorado, lo cual de cierta manera era verdad, pero no decían el motivo.

Annie llamó a la Minami el lunes, anunciándole que la rubia había vuelto. Y eso fue la única razón por la que Doyeon volvió a la Academia.

Cuando sonó la campana que anunciaba la hora del receso, fue de manera decidida a la clase de la Komori. Necesitaba hablar con ella, necesitaba explicaciones.

Así que, cuando la vio salir, la jaló de la muñeca, obvio sin ser muy brusca, pero sí con la fuerza suficiente para poder obligarla a caminar.

--- ¡Do-chan! ¡¿Qu-Qué haces?! ---sin embargo, no recibió respuesta. Fue obligada a caminar hasta la azotea.

Cuando llegaron, Doyeon se sentó en un pequeño banco que había, junto a ella. Tragó saliva de manera nerviosa, mirándola sin saber que decir. La abrazó.

Yui se quedó quieta. Podía notar el cuerpo de la azabache temblando. Se notaba que le había afectado ese encuentro, y lo entendía, ella tampoco tuvo la mejor de las reacciones cuando se enteró del oscuro secreto que guardaba esa familia.

Correspondió el abrazo, dando pequeñas caricias en su cabeza---. Estoy bien. . . En serio, ya me encuentro mejor ---su voz tenía un tono dulce, con la intención de calmarla.

--- Yui. . . ---se separó un poco para mirarla a los ojos---. Yo. . . necesito saber la verdad. ¿Él es un. . .?

--- Vampiro ---terminó la frase. Podía ver la angustia en la mirada de su amiga, cosa que no le gustaba. A estas alturas, no le podía esconder las cosas---. Escucha, yo. . . te diré todo, pero prométeme que no se lo dirás a nadie, ni siquiera a Annie ---vio como dudaba, por lo que tomó sus manos, apretándolas un poco--- ¡Po-Por favor, Do! ¡Promételo!

---. . . Bien ---murmuró.

Yui sonrió levemente, aliviada. Aunque su sonrisa se desvaneció en cuestión de segundos. Primero, miró a los lados, asegurándose de que ellas eran las únicas en ese lugar. Casi ningún estudiante subía aquí.

--- Realmente, todos los Sakamaki son. . . ya sabes ---cada vez hablaba más bajo, con miedo a ser descubierta---. Y yo estoy allí porque. . . po-porque soy una novia de sacrificio ---tragó saliva de manera nerviosa---. Beben mi sangre todos los días y. . . estoy acostumbrada, pero es tan cansado.

Yui comenzó a temblar---. A quién más unida estoy es a Ayato. Realmente había cambiado, pero. . . últimamente está muy alejado de mí. Me dijo que lo hacía por protegerme, porque tiene una sed tan inmensa que duda poder controlarse. Reiji me comentó que tiene que ver con algo de su padre, algo de Adán, pero. . . ---apretó sus manos, cerrándolas en forma de puños--- sus hermanos ahora están bebiendo mucha sangre de mí. Ayato antes no dejaba que se acercasen a mí, y ahora. . .

Unas pocas lágrimas cayeron sobre las palmas de la rubia; sus propias lágrimas---. Estoy cansada, Doyeon. Quiero que Ayato vuelva a la normalidad, quiero dejar de estar desmayándome, quiero. . . ---alzó la cabeza, mostrando sus ojos llenos de lágrimas--- ¡Quiero ser libre!

Ante esa situación, Doyeon volvió a abrazarla, dejando que se desahogase en su hombro. Estuvieron así varios minutos: Yui llorando, Doyeon dando caricias en su espalda, en su cabello, diciéndole que a su lado no tenía nada que temer.

--- Podrías. . . Podrías venirte conmigo. A Snowball le caes muy bien.

Yui soltó una pequeña risa---. Agradezco tu oferta, pero si me voy, ellos vendrán a buscarme. Además, no quiero que. . . ---se retractó, evitando decir que podrían matarla--- . . . no quiero meterte en esto, Do ---se limpió las lágrimas, estando un poco más calmada--- . . . ¿Sabes? Shu es quien menos me ha mordido.

Su comentario provocó que la Minami se encogiera de hombros--- ¿Entonces por qué te trató de esa manera?

--- Llevaba un tiempo sin beber mi sangre y. . . bueno, era luna llena, los vampiros están más sedientos y se ponen más violentos ---murmuró.

Hubo unos momentos de silencio incómodo.

--- . . . Lo vi llorando.

--- ¿Eh?

--- A él. . . Se quedó dormido cuando volvimos en el coche y me acerqué a verlo. Aún había una lágrima bajando por su mejilla.

--- . . . No lo entiendo, ¿por qué llora por mí?

--- Tal vez le agradas mucho ---dijo, un poco más animada---. Tal vez te lo tendría que haber contado antes, pero. . . me pregunta todos los días como me fue. Y sonríe un poco cuando le hablo de ti.

--- ¿Qué me quieres decir con eso?

--- Creo que tiene interés en ti.

Las mejillas de la Minami se pusieron rojas--- ¡E-Eso no es posible!

--- Cuando le hablo de ti, aunque está con los ojos cerrados, me escucha.

--- ¿Y todo lo demás no lo escucha? ¿Cómo sabes que no está durmiendo?

--- Porque cuando le digo todo lo demás se pone a roncar.

Eso le sonsacó una pequeña risa, que enseguida se borró---. Yo. . . realmente no quería hacerlo sentir mal. Solo que es una situación tan irrealista: uno de tus amigos es un vampiro de un día para otro. Además, al ver tanta sangre me asusté porque. . . m-me trajo malos recuerdos ---por un momento, su mirada se ensombreció en cuestión de segundos.

--- Es entendible. Aunque a mí también me sabe mal ver así a Shu-san. Nunca ha estado tan decaído.

Doyeon bufó, echando su cabeza hacia atrás---. Esto es horrible. Todo se está acumulando: Shu está mal, el anónimo dejó de mandarme cartas. . . ---cuando lo dijo, sacó una de las tantas cartas que había recibido del bolsillo de su chaqueta. La había releído varias veces.

--- Espera, ¿dejó de mandarte cartas? ---vio como asentía--- ¿Por qué?

--- ¡No lo sé! ¡Ha sido de repente, sin dar explicaciones! ¡Primero lo de Shu! ¡Ahora esto! ¡Y lo peor es que todo ocurrió el mismo día! ---gruñó, desesperada--- ¡Extraño a Shu! ¡Extraño que ese anónimo me mande cartas! ¡Me da igual si me llama "mujer tonta, obscena" o "ruidosa" como hace. . .! Como hace. . .

--- . . . ¿Do?

La azabache leyó la carta varias veces. Luego, miró al frente, con sus ojos más abiertos de lo normal por la sorpresa. Parecía que había tenido una revelación.

--- Rubio. . . un año mayor. . . le gusta la música y tiene relación conmigo ---comenzó a citar de manera lenta cada una de las pistas que había recibido--- . . . Yui, creo que se quién es el anónimo.

--- ¿Hm?. . . ¿No me digas que. . .?

Doyeon asintió. Todo encajaba perfectamente: las pistas, su manera de expresarse, como actuaba con ella, lo que le había contado Yui. . .

--- Le gusto ---afirmó, no pudiendo evitar esbozar una sonrisa tímida---. Shu está enamorado de mí.

𝐀𝐍𝐎𝐍𝐘𝐌𝐎𝐔𝐒 ━ 𝐒𝐡𝐮 𝐒𝐚𝐤𝐚𝐦𝐚𝐤𝐢 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora