Death Boy (TERMINADA)

16. Epílogo

Will

Dioses. No sabía de dónde había salido ese valor. ¿De verdad había hecho eso? Cuando me marché de la habitación me encontré con Austin, quien estaba terminando de ordenar los armarios.

─Hey, ¿necesitas que te eche una mano con eso?─ Me acerqué y guardé unas vendas. Ayudé a mi hermano a recoger toda la enfermería y entré en la oficina para empezar a ordenar unos papeles pero Austin entró también y, cruzándose de brazos, me miró con desaprobación.

─Will, cuéntame, ¿qué ha pasado entre Nico y tú?─ Se me erizó el vello de los brazos pero traté de disimular.

─¿Nico y yo? Pffft, nada. Sólo… sólo hemos regresado al campamento, no pasa nada entre nosotros. ¿Por qué preguntas? ¿Qué sabes?─ Ok, sé que no sonó muy convincente, sobre todo por la cara de Austin, pero es que no sé mentir, ¿vale?

─Mira, sé que Nico te gusta y todo eso pero, en serio, ¿por qué intentas ocultárselo? ¿No sería más fácil decirle la verdad de una vez?─ Quizá tenía razón, quizá, después de todo, sería más fácil decirle todo. Pero no podría soportar volver a estar en su presencia nunca más…

─¿Y si luego me odia?─ Pregunté, con la voz estrangulada.

─Nico no te va a odiar, y en caso de que eso ocurra, nos encargaremos de que tengas una bonita vida en China.─ Golpeé a mi hermano, sabiendo que de nuevo se estaba riendo de mí. De repente escuché un golpe detrás de mí y apareció Kayla.

─Ooooooh, así que estáis hablando de alguien. Dime, es Nico, ¿cierto?─ Mi hermana sonrió al ver mi expresión.─ Bah, no hace falta que digas nada, tu rostro ya lo dice por ti.

─Cállate.─ Dije, dándome la vuelta y saliendo por la puerta. Justo en ese momento me encontré con Gracie.─ Oh, lo siento.─ Dije, dejándole pasar.

─No pasa nada, Will, por cierto, ¿dónde está Nico? Pensaba que te encargabas de cuidarlo.

─¿Qué? Oh, no…─ Salí corriendo y entré en la habitación donde había estado Nico durmiendo. La cama estaba deshecha y el pijama de calaveras estaba doblado en una silla. Busqué por toda la enfermería, en su cabaña, la Casa Grande, todas las cabañas y en los campos de entrenamiento pero no estaba por ninguna parte.─ ¿Dónde estás, di Angelo?

─¿Me buscas?─ La voz de Nico a mis espaldas me dio un susto de muerte (XD, es xq es hijo de hades). Al darme la vuelta vi a Nico, vestido de negro de nuevo. Su espada de hierro estigio colgaba de su cintura y su cabello estaba muy enredado.

─¡Nico!─ Me lancé sobre él y lo abracé con fuerza. No fue hasta que me aparté que me di cuenta de que me miraba extraño, sin embargo no hice caso a su mirada.─ ¿Dónde estabas? Me asustaste.─ Él no respondió. Me fijé en su mano y vi algo que me asustó.─ ¿Por qué… llevas una maleta?─ Él evitó mirarme a los ojos y dijo:

─Lo siento, Will…─ Apreté los puños.

─Eso no es una respuesta.─ Él siguió mirando al suelo. No sabía si era por arrepentimiento, vergüenza o quizás otra cosa diferente.─ Nico, dime lo que está pasando.

─ … voy… campamento.─ Susurró, pero no entendí lo que decía.

─¿Qué?

─Que… me voy del campamento.─ Dijo, esta vez dejándome oír la horrorosa noticia.

─P-pero… ¡no puedes hacer eso!─ Lo sujeté de los hombros y alcé su rostro.─ ¿Por qué te vas? ¿Es por mi culpa?

─No… No es tu culpa… yo sólo… me voy al inframundo a vivir con mi padre… ¿Will? ¿Te encuentras bien?─ Salí corriendo. No podía soportar eso. ¿Nico me abandonaba allí y se marchaba al inframundo? ¡Se suponía que éramos amigos! Oí las pisadas de Nico tras de mí y corrí más rápido.─ ¡Will, espera! ¡Puedo explicarlo!─ Llegué a mi cabaña y me encerré en el baño. Unos minutos más tarde llegó él.─ ¡Will, abre la puerta!