¿Te gusta? #24

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"Y sin embargo qué triste es tenerte y no tenerte"
Mario Benedetti.

[Roman]

20:18 PM.

Puedo asegurar que Melissa está aquí, con Edmond, en su casa, toco el timbre un par de veces, me ha dejado en visto los mensajes, me alejo un poco, los veo a los dos correr las cortinas por un momento, la puerta es abierta, están juntos, sólo puedo mirarlos enojado.

—Vamos, Melissa, no te quedarás aquí.

—Eso es justo lo que planeaba hacer.

—¿Y por qué? ¿ahora que hice?— pregunté. Me percaté de la mirada de Edmond en mí —. ¿Qué me estás viendo? Déjame hablar con mi novia en privado, Melissa, díselo tenemos que hablar.

—Roman, estás siendo irrespetuoso, mira en donde estamos, es su casa y no está bien que vengas aquí subido de tono y a querer darnos órdenes ¿qué te pasa?.

—Ah, todavía preguntas, Melissa, ya deja de ser tan inmadura, eres mía, estás conmigo y a pesar de lo que pasó entre ustedes tengo que ver que te enojaste conmigo y te fuiste con él sin decirme nada, ya madura ¿quieres?.

Me detengo a ver su reacción, se ve muy triste, a pesar de eso me sostuvo la mirada por un momento, miró a Edmond.

—Edmond, quisiera hablar con Roman...—

—Los dejaré solos— dijo. Él me ve con tal seriedad antes de irse.

Melissa cerró la puerta lentamente, camina hacía mí, se abraza a sí misma.

—Vamos— insisto.

—Roman, yo me siento muy mal ¿tienes alguna idea de lo que pasó hoy?— preguntó. Sus labios se fruncen, veo sus lágrimas, mi expresión se ablanda.

¿Qué pasó hoy?.

—No, no lo sé.

—Tienes que ser honesto conmigo, ahora quiero preguntarte ¿besaste a Hailey el sábado pasado?.

Oh no.

—¿Qué?.

Su ceño se frunce.

—El sábado pasado, la noche de mi cumpleaños, la noche en que me pediste ser tu esposa, esa noche que me dejaste en casa de repente ¿era para ver a Hailey?.

—Melissa, otra vez con esto ¿por qué esto tiene que pasar cada vez que salgo a alguna parte sin ti? En todo caso tendría que ser yo quien te pregunte por qué sales con tu amigo y si se siguen besando en secreto.

—Basta, Roman.

—Voy a parar cuando tú dejes de señalar cada defecto mío y comiences a ver que tú no eres perfecta como piensas, a veces eres tan egoísta y no sé por qué lo haces así.

—¿¡Qué, qué defectos!? Esos no son defectos, tú me estas fallando a mí.
Eso es porque no quiero hacerlo ¿cierto?— sí, por supuesto que es por eso —. ¿Qué hay de malo en desear algo romántico? Y por cosas como estas prefiero hacerlo así. Hablé con Hailey, ella me dijo que pasó el sábado ¿la besaste realmente?.

—Le dije que nada va a suceder entre ella y yo, le dije que te quiero a ti, que estoy contigo, si estuve un poco confundido, llevaba tanto sin verla pero, yo te amo, Melissa.

—Te hice una simple pregunta a la que puedes responder con sí o con no, muy simple ¿se besaron?.

—Sí...— contesté. Melissa asintió, me ve con decepción, se da la vuelta, sujeto su brazo —. Pero no pasó nada más que eso y te prometo que nada de eso volverá a pasar, perdóname.

Amigos en matrimonio Donde viven las historias. Descúbrelo ahora