|Capítulo 17|

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Mía entró cabreada a Skeld porque el inútil de Kentaro descubrió y reportó el cadáver reciente.

—¿Ahora quién carajos se murió? —fingió no saber—. Y hablen rápido, no quiero perder mi valioso tiempo.

—Ya sabes, idiota —atacó Lynn—, si tú...

—Le pregunté a él —interrumpió, señalando al japonés.

—Se murió la gallina de Isabella —respondió el aludido—, el imbécil de MasterChef venía conmigo discutiendo porque no quería darme de comer y la vimos ahí tirada. Al parecer le dispararon.

Lynn se molestó al escuchar la forma en que Kentaro llamó a la difunta y se lo hizo saber. —No te expreses así de ella, por lo menos respeta su memoria.

—La llamaré como se me de mi puta gana —espetó el nipón—, era una cobarde de mierda. Merecía que le pasara esto.

—Bueno, ¿quién la quemó? —intervino Alice—. No quiero que termine apestando todo el lugar.

—La cremarás tú, Lady Conquista —Ethan le ordenó y se rió—, a partir de ahora te encargarás de eso.

—Me niego rotundamente a hacer eso. Mejor que Break Dance se encargue de eso.

Lynn no podría soportar hacerlo, haber perdido a alguien a quien le había tomado cariño en estos días, pero ese cuerpo debía ser cremado, ya que no había esperanza de que ella despertara.

—¿Por qué no lo hacemos entre todos? Ahora más que nunca deberíamos estar unidos para poder desenmascarar a alguien que está aquí presente —ahora habló Renner.

—No me voy a ensuciar —se opuso Amy—, nunca me ha gustado la mugre.

—Nos bañaremos después de cremar el cuerpo, así le hacemos siempre —respondió Idalia.

Los presentes dejaron de discutir al notar el sorprendente buen humor de la mexicana. Alonso lo expresó en voz alta.

—¿Por qué estás tan de buen humor, licenciada?

—¿No puede uno amanecer de buenas? —preguntó la aludida sin perder la calma. Incluso ella se sentía extraña de su tranquilidad, aunque estos le arruinaran el día.

Axel Navarro se burló diciéndole a Lynn, "las mujeres son siempre tan raras". Renner se molestó y le respondió que se reservara sus comentarios tan machistas y estúpidos como lo que acababa de decir, luego se dirigió a los demás para pedirles:

—Vamos, entre más rápido acabemos de cremar, estarán desocupados en menos tiempo —aunque trataba de sonar optimista, se sentía bastante mal.

Idalia se molestó un poco porque lo sintió como una órden pero obedeció, luego los demás la siguieron. Lynn, Idalia y Alice hicieron el trabajo mientras los otros tripulantes solo miraban.

Mark comenzó a agredir a Harry, el más joven se enfureció ante los golpes y le respondió de la misma manera. Lorraine y Alice intentaban separarlos pero solo consiguieron salir golpeadas también.

—¡Ya basta! —sollozó Mía—. ¡No debemos matarnos entre nosotros! Ya echamos a los polkras y aún así murió Isabella, no perderemos a alguien más.

Lynn decidió que aún no era momento de exponerla, así que solo apoyó su petición.

—Mía tiene razón. Repito: sé que no somos los mejores amigos, ni siquiera nos toleramos pero ahora debemos estar unidos hasta poder salir de aquí —habló. Pensó en decirle a la peruana que su teatro iba a caerse pronto pero lo razonó y decidió que era mejor no abrir la boca.

Gandía sonrió internamente, repitiéndose por enésima vez que su plan iba demasiado bien. Contándose ella, quedaban doce personas y ya no le sería tan difícil matar a once aunque puede que le tomara un poco de tiempo hacerlo, además de quitar del mapa a Liko y a Conne. En total debía deshacerse de trece vidas.

—Lo principal es que nadie esté solo —recomendó Lorraine—, al menos dos personas deben estar juntas.

A ella no le agradaba mucho la idea pero debía hacerlo si no quería morir, pero ya no confiaba en nadie. Ni siquiera de la inofensiva Lynn, quien casi fue asesinada por el traidor.

—Buena idea —le siguió Harry.

Mía quiso hablar y oponerse pero decidió que sería algo muy estúpido de su parte. Idalia sí se puso más a la defensiva.

—No quiero que me acompañe nadie, menos cuando aquí todos ustedes son sospechosos, aunque yo sé que es MasterChef —su buen humor terminó de desaparecer.

El aludido habló en su defensa rápidamente.

—Tú también eres sospechosa, Licenciada, al igual que todos. Aunque... la verdad yo he pensado que la asesina eres tú, y hasta podría decir que estás planeando acabar conmigo.

—¿Qué pruebas tienes? No me acuses sin razón.

—Al igual que tú, Licenciada, ninguna. De ese modo nos culpas a todos.

Mark se hartó de tanta estupidez.

—¡Ya dejen de pelear! O buscaré una forma de irme de aquí.

—¡Lárgate! Nadie te quiere aquí —espetó Lorraine.

Esto se puso bueno, pensó Mía aprovechando la distracción de esa pelea para pensar en su siguiente víctima.

Alonso fue el primero en irse, luego los demás le siguieron. Mark intentó salir pero Mía lo llenó de gasolina y lo empujó junto a un encendedor para luego dejarlo encerrado.

Lynn se dio cuenta de que Wilson estaba quemándose vivo, intentó ayudarle pero ni siquiera podía abrir la puerta de ningún modo.

El hombre finalmente murió, aquellas imágenes mentales dejaron a la inglesa al borde de las lágrimas, sintiéndose mal por no haber podido ayudarle.

holii

EvelynCastillo169 MECD1818 liaisengene DayTwiste , con dedicatoria para ustedes.

espero que les guste!

fue un capítulo corto pero no tenía inspiración unu, ¿qué me cuentan?

los quiero!

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