MAPHIA (HYUNGWONHO//2WON)

4. Importar menos

Era una de esas tantas veces en las que encontrarías a Hyungwon en casa de Jooheon. Así como con Hoseok, comenzaban a ser inseparables pero de una manera amistosa.
Los brazos de Hyungwon estaban estirados sobre la mesa, y en medio su cabeza. El menor estaba junto a él pero en cambio, él estaba en el celular.

—Extraño a mi no novio.

—¿Y por qué no estás con él ahora? —El mayor levantó su vista y asintió.

—¿Vamos a su casa?

—No, gracias, no me gusta participar en relaciones ajenas.

—Es solo a visitarlo, no sé qué te imaginas.

—¿Al menos está en su casa?

Estuviera o no, ambos iban camino a casa de Hoseok.
Para ser sinceros, era extraño que Hyungwon no estuviera ya allá o que Hoseok no estuviera en la casa del menor, pero era uno de esos extraños días que ocurría.
Tocó un par de veces sin recibir respuesta hasta que recordó por fin, la contraseña para aquella puerta.

Si no fuera porque creció entre ellas, aquella arma que estaba siendo apuntada a él podría haberlo hecho desmayar, pero no era el caso, sin embargo, para Jooheon lo era, que con un pequeño grito levantó sus manos. Un tipo desconocido apuntaba un arma hacia ambos hasta que un alarmado Hoseok apareció llevándose la sorpresa de su vida al ver a Hyungwon ahí parado.

—Won. —El mayor puso una mano sobre el brazo del tipo haciéndolo bajar el arma. — Es mi novio y su amigo, déjalos en paz. Ve a la cocina. — Para ese momento, ni Hyungwon ni Jooheon decían nada aún, pero a diferencia de Jooheon, el más alto lucía calmado. — H-hola, ¿qué hacen aquí?

—Venía a verte. —Hoseok tragó visiblemente y entonces una risa un poco nerviosa apareció.

—Hablaremos después de esto, ¿si? Jooheon te pido una disculpa. —Jooheon parecía estar apunto de pasar por una crisis de ansiedad así que con ayuda de Hyungwon fue hacia algún lugar cercano para recargarse.

—Necesita agua. —Una cuarta persona apareció en la habitación llamando la atención de los otros tres, pero indudablemente, la más llamada fue la de Hyungwon, que no necesitaba mirar dos veces para reconocer que quien estaba frente a él era el mismo Changkyun, con su frente arrugada y a paso lento.

—¿Está todo bien? —La vista del más alto no se separaba del más joven ni siquiera cuando Hoseok se acercó rápidamente a Changkyun y lo empujó un poco.

—Vuelve a la cocina, yo me encargo aquí.

—Uy, ¿quienes son? ¿Mh? ¿Contrataste a alguien? Solo que somos tres, tenemos que compartir uno.

—No te equivoques, Im... —Im, Im, Im, Im, tenía a Im Changkyun frente a él, justo ahí, en ese momento. —Estás hablando de mi hombre. —Posiblemente si fuese otra persona, los órganos, sentimientos y todo el cuerpo de Hyungwon estaría echando fuegos artificiales pero en ese momento no. Sólo quería buscar cualquier arma y poder acabar con todo, no le importaba nadie ni nada que estuviera ahí.

—¿Cuál de los dos? —Hyungwon giró hacia Jooheon quien lucía más tranquilo y con una cara un poco fruncida miraba hacia el otro par.  Hoseok puso sus manos sobre su cintura y miró hacia el suelo.

—Changkyun, te presento a Hyungwon y a Jooheon... son... —El mayor miró hacia Hyungwon quien lo veía de vuelta esperando para ver si tal vez este le negaba o reclamaba. — Mi novio y su amigo... en ese orden.

—¡Oh, el novio de Hoseok, por fin! —Casi corriendo, llegó a un lado de Hyungwon tomando su mano y estrujándola un poco. Aunque Hoseok había intentado detenerlo había sido inútil. El agarre quemaba para Hyungwon. —Un gusto... y aquí tenemos a... ¿Jooheon? Un gusto también, soy Im Changkyun, para lo que necesiten.

—Yo necesito que te vayas. —Hoseok jalaba el brazo de Changkyun mientras de vez en cuanto miraba a Hyungwon, pues la mirada de este no lucía muy agradable.

—No seas aguafiestas.

—Esta no era una fiesta. —La sonrisa de Changkyun se apagó un poco y asintió.

—Tienes razón, es verdad. No olvides marcarme de nuevo para... estamos buscando algo, Hoseok, no te distraigas mucho.

—Nunca. —Changkyun fue hacia donde antes se encontraban para luego salir con el otro hombre.

—Él es Minhyuk. —El recién presentado, dejó ver una sonrisa que para nada lucía como si acabara de apuntarle con una pistola. —Ya nos vamos.

—Lamento haberlos asustado, yo solo...

—Minhyuk. —Hoseok le llamó la atención así que este asintió y miró hacia Changkyun, quien asintió también.

—Bueno, espero vernos luego, en una mejor disposición. —El menor soltó una risa pequeña, su cabeza se agachó un poco y entonces salió. Los tres sobrantes esperaron un par de segundos y entonces Hoseok habló.

—Me hubieras dicho que venías.

—No sabía que ibas a estar en una exposición de armas en tu propia casa. ¿Esto era lo que no querías que supiera?

—¡No quería asustarte! Iba a decírtelo pero no de esta manera. — El cuerpo de Jooheon fue agachándose hasta quedar sentado en el suelo mientras escuchaba a los otros discutir.

—¡Pues si sabes que yo podía venir en cualquier momento! ¡No sabía que eso de cosas ilegales era tan literal! —Si lo sabía.

—¡Sueles avisar!

—Ah, claro, a la siguiente te avisaré, no sea que en esa ocasión me estés engañando.

—Ya cállense los dos. No puedo creer que te importe más que pueda estar engañándote la siguiente vez a que te acaban de apuntar con un arma, Hyungwon, pudiste morir y a Hoseok no podía importarle menos al parecer.

—Me importaba, Jooheon, no sé de qué hablas.

—Le estás reclamando el porque no aviso en lugar de... no sé, revisar si se encuentra bien.

—Estas teniendo una crisis nerviosa.

—¿¡Como no la voy a tener!? Acabo de descubrir que el novio de mi amigo es ¿qué? ¿Traficante? ¿Un criminal?

—No es mi novio.

—¡Ves como no te puede importar menos!

—Hyungwon, necesito hablar contigo a solas. —Jooheon sin dudarlo se puso de pie.

—Dame las llaves de tu auto, Hyungwon. —El mencionado lo miró unos segundos e hizo lo que se le pidió.—Gracias. —Sin más que decir, el menor salió de la habitación.