¿Y ahora que se supone que haría?
Bien.
Si sabía, pero no creía lo que estaba haciendo.
Si bien, no es como si fuera novato en eso, pero... ¿buscar a un tipo que posiblemente sólo va por ahí gastándose la plata de su papá y matarlo? No era un plan que a él le agradara tanto, pero aún así, no le removía nada, ya se había ofrecido, no podía echarse hacia atrás.Según informes, los amigos de Im siempre estaban en los mismos lugares, ¿la razón? Desconocida, pero si los encontraba ahí, no le interesaba en lo más mínimo.
Terminaría de instalarse en esa pequeña casita rentada solamente por el momento y tres días después, iría a aquel lugar donde encontraría a esos tipos... esos tipos que fueron tan fácil de rastrear que incluso daba miedo.
Aquel chico más bajo que Hyungwon con nombre Kihyun y aquel otro que estaba sentado a su lado, Hoseok.
Cuando la información de los amigos de Changkyun se le fue entregada, pensó que ambos eran guapos pero Hoseok... Hoseok pasaba límites. Lo extraño era que estaban solos. ¿Eran realmente los únicos amigos de Im? Aunque ni siquiera él estaba.Se acercó a la barra donde estos estaban, pidió algo y espero que uno de ellos diera media vuelta para él hacerlo también y justamente... tirar todo el líquido sobre él.
—¡Hey!
—¡Oh no, lo siento! ¡De verdad lo lamento! — Hyungwon pidió con su mano un par de servilletas para comenzar a restregarlas por la playera del más bajo.
—Es blanca, hermano, necesitaré una tintorería para esto.
—Cuánto lo siento, estoy muy apenado. —Una risa un tanto grave comenzó a soñar tras de ellos, llamando la atención de ambos.
—Mira nada más, te dije que esa playera era horrible.
—No es pretexto para empaparla. —Para ese momento, tanto las manos de Hyungwon como las de Kihyun, limpiaban un poco los rastros que aún yacían sobre la playera.
—Perdóname.
—Deja de pedirle perdón, es lo peor que puedes hacerle a este tipo.
—Cállate, Hoseok.
—Yo pagaré la tintorería, sin duda.
—No necesitas pagar nada... —Hoseok hablo y luego entrecerró sus ojos un poco.
—¡Oh! Incluso el susto me hizo ser descortés... Hyungwon, me llamo Hyungwon.
—Pues entonces, Hyungwon, aceptaré que lleves mi playera a...
—Yo pagaré, Kihyun, deja al chico en paz. —Dado que Hoseok empujó un poco al más bajito, los nervios de Hyungwon subieron.
—¡No, no, no! Insisto, o entonces llévala tú, pero déjame pagarla.
—No es necesario tanto intermediario, sólo dame el dinero y yo lo llevaré.
—Kihyun...
—¿Entonces tú eres Kihyun y tú...?
—Hoseok.
—Bueno, Kihyun y... Hoseok, yo pagaré, no es molestia.
—Hemos desperdiciado mucho tiempo solo discutiendo quien paga que, estoy helando, Hoseok... —Este pareció comunicarse con la mirada y siguió el camino. Una vez estaban los otros dos solos, Hyungwon giró su vista hacia Hoseok, quien lucía un tanto incómodo, con una mirada desesperada pero dura, una mirada que no conocía muy bien pero sabía de que trataba. El más bajo, para evitar incomodidad, sonrió ligeramente y volvió a recargarse en la barra.
—Hoseok, dame tu número, me comunicaré y daré el dinero.
—De verdad no es necesario, digo...
—Para mí lo es.
—Hyungwon... —El mencionado se acercó a recargarse de igualmanera, y de una manera accidental (con todo el propósito del mundo), hizo que sus manos se tocaran, intentando incluso, enrollar los meñiques.
—No es molestia, lo que yo hice, si es una. —Los ojos de Wonho fueron a dar a los meñiques juntos y entonces resopló alejando un poco su mano.
—¿Por qué asumes tan rápido las cosas? —Esas simples siete palabras, lo hicieron tener piel de gallina. Había tantos escenarios en su cabeza; lo tomó mal y no estaba interesado en hombres. Sabe que fue para acercarse a Im, o... sólo estaba intentando no parecer tan fácil de llegar y sólo debía insistir un poco para terminar con esas manos sobre él.
—¿Asumir qué? —Wonho se incorporó y estiró su mano.
—Dámelo... tu celular. —Hyungwon sacó su celular pero no lo entregó.
—Solo dame tu número.
—Te daré el de Kihyun.
—Pero quiero el tuyo. —Cuando dijo eso, agregando que fue con una voz baja y ronca, su mirada dio contra el contrario, el cual tensó su mandíbula visiblemente.
—¿Pagaste la bebida que ni siquiera probaste? —Hyungwon negó. Hoseok volvió a recargarse en la barra y espero que pasara alguna persona por el otro lado y le detuvo. — Pon lo que tomó este hombre a la cuenta de Yoo.
Yoo. ¿Yoo no era el otro tipo?
—¿Y encima me invitas? ¿No era yo quien debía pagar?
—Me vas a pagar luego. —La piel de Hyungwon se erizo, pero aún así, no iba a mentir, se sentía emocionado sobre eso. Entre más cerca tuviera a los amigos de Im, más rápido lo iba a encontrar e iba a poder volver. El contrario sacó su celular y clickeo algo para luego alejarse un poco. Decía un par de cosas y luego soltó una risa, colgó y volvió a acercarse. —¿A dónde vas de aquí?
—Mi casa.
—Vamos entonces.
—¿Qué?
—Invítame a tu casa.
—Que miedo, ¿y si me secuestras? —Hoseok soltó una risa y negó.
—¿No es más peligroso que yo te invite a mi casa que tú me invites a la tuya?
—Bien, vamos.
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MAPHIA (HYUNGWONHO//2WON)
أدب الهواةHyungwon, hijo de un gran millonario (claramente no por las cosas más legales), se le encarga deshacerse del hijo de la competencia, lamentablemente, sus planes de eliminar del mapa a Im Changkyun, se ven interrumpidos por Lee Hoseok.