Parte 19

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Amaro Salgado

Despertar con la esperanza de querer vivir, hace mucho no me despertaba con ganas de querer respirar, antes todo era una lucha mental para seguir sobreviviendo al dolor, tus ojos que sólo transmitían terror y desesperación al verme sobre el puente, han sido la más grande luz que ha iluminada mi vida, no lo sabes, pero te conocí en mis sueños, te conozco desde antes, en el puente no fue la primera vez que te vi , algo superior a lo que puedo pensar e imaginar me respondio y tu fuiste la respuesta, la anhelada respuesta, todo tu ser me paralizo, no puedo creer que realmente eres real, no eras parte de mi imaginación, quise detener el tiempo y evitar la decisión fatal, me arrepentí de anhelar mi muerte, sin embargo todo tiene su consecuencia, estoy aquí en el hospital una semana después de casi morir, sigo vivo y es casi cómico, querer, desear la muerte y estar apunto de obtener lo que hace mucho tiempo buscaste y que todo cambie en un segundo, una pequeña esperanza, cuando te vi quise correr y abrazarte, pero caí y mientras caía deseaba no morir, ¿ cómico no?, hay alguien ahí arriba, definitivamente lo hay, el hielo que había esa noche caló profundo en mis huesos y sobre todo en mi corazón, la corriente me arrastró curiosamente al club de remo que estaba cerca, se sabe que quien se lanza al río, tiene muy poca probabilidades de sobrevivir si es que no es encontrado prontamente, solo se que un chico que estaba cerca me sacó, nadie sabe de él hasta ahora y sus maniobras me salvaron, desperté a los dos días, solo tuve hipotermia y un pequeño golpe en la cabeza, ¿existe algo allá arriba? sí definitivamente si, algo me salvó, todos lo piensan, los médicos, todos creen que fue un milagro, lo que no saben es que tu voz me salvó antes que todo, quiero encontrarte, pero estoy hospitalizado en psiquiatría por intento suicida y ¿como les explico que ya no quiero morir?, algo ha cambiado, no soy el mismo Amaro que se subió a ese puente con ganas de morir. Lamentablemente lo que no ha cambiado aún, es la rabia que me produce relacionarme con mi padre, su presencia, aunque quisiera no sentirme así,  es algo profundo, es algo que no puedo evitar, es como una herida que no cierra, hace tanto tiempo que deje de decirle papa, que me parece extraño mencionarlo como tal, para mi solo se transformó en German y obviamente ante la presente situación, todos en casa estaban conmocionados, enfrentar a German, a Clarita y Freddy, ha sido....cómo decirlo más que difícil, nadie habla del tema, casi como si no hubiera pasado, como si no fuera suficientemente evidente que por algo estoy internado en el psiquiátrico, hoy viene German y hay cosas que debemos hablar, he tomado una decisión respecto a varios ámbitos de mi vida.

- Hola Hijo...¿como te sientes? - continuó  hablando al ver que no le respondía - el doctor dice que en un par de días te dará el alta, has tenido una buena evolución.... pero Amaro, comenzaremos el tratamiento psicologico y esta vez debe ser constante, ¿ entiendes que es por tu bien? ¿verdad?.

-Esta bien ... .tomaré la terapia ...- Me mira con cara de sorpresa ante mi respuesta sin cuestionamientos.

-Que bueno que lo entiendas.

-German quiero hablar contigo, de algo importante - me mira con cara de expectación.

- Sabía que la buena voluntad no vendría por que si...- dijo moviendo la cabeza mientras me miraba- ¿que pasa Amaro?.

-Quiero volver a Belloto, no seguiré viviendo en Santiago....- dije con cara de seriedad.

-¿Y ese cambio tan repentino?, siempre has dicho que odias esta ciudad.... y en Santiago tienes toda la libertad que siempre has querido. La libertad la tienes tú, así no tienes que ocuparte de tu hijo problema, lo pensé pero finalmente solo dije lo que necesitaba decir y lo que iba a decir sé que sería peor para él.

-Quiero conocer a mi hermana - su cara se desfiguró- ¿qué pasa? ¿ creíste que nunca te hablaría de ella?.

-Pensé que no querías saber nada en relación a eso - dijo un tanto nervioso.

Y lo que decía era cierto, mucho tiempo odié en mi corazón a la secretaría con la que papa había engañado a mamá, con la cual había tenido una hija, mi hermana, de solo pensar en que mamá había sufrido al enterarse de eso, me revolvía el estómago, nunca quise saber nada de ellas, las enterré en mi mente, solo sabía que ella estudiaba en uno de los colegios donde papá era el sostenedor, mucho tiempo guarde tanto resentimiento hacia la idea de una hermana pero lo cierto era que mi hermana no tenía la culpa de nada y si había sobrevivido, entonces intentaría hacer las cosas de manera distinta.

-Bueno, ahora cambie de opinión.....quiero ir a su escuela.

-Amaro....¿de qué hablas ?, ¿estas hablando enserio?. - German me miraba con los ojos casi en la mano.

-Muy enserio German - lo mire con una pequeña sonrisa.

-¿Estás haciendo esto para castigarme?- sus ojos parecían triste.

-No....la verdad quiero conocerla, quiero compartir con ella, quiero saber quien es...quiero disfrutar de tener otra hermana - al pronunciar esas palabras recordé a Helena, su recuerdo me dolía.

-¿Por que ahora? ¿por qué después de tanto tiempo? - German parecía en shock.

-Justamente por eso, porque ya ha pasado mucho tiempo y ya es hora de conocer a mi hermana - dije con toda honestidad.

-Pero...ya comenzó el año escolar......no puedes cambiarte Amaro, no a esta altura - dijo secamente German.

-No me vengas con eso.....eres el sostenedor de la mayoría de los colegios de Belloto ... y puedes meterme en cualquier colegio.....¿no eres el hombre con más influencia de esta ciudad?.

-Amaro ....no puedes decirle nada...ella no sabe de nuestra existencia... .la destruirias.

-¿Te importa acaso? .... luego de 17 años a German le importa lo que pueda sentir una chica que jamás ha sabido de tu existencia- lo mire con enojo.

- Claro que me importa......su madre no quiere que me acerque ...no he podido hablar con ella, ni mantener una relación padre e hija  - dijo con tono de tristeza, mientras caminaba hacia la ventana del cuarto.

-Claro ...eso justifica tu ausencia durante todos estos años - dije de manera sarcástica-......¿Cómo se llama su madre?- la verdad, nunca había buscado quien era esa mujer, tenía todos los medios para hacerlo pero nunca lo hice, nunca quise volver a saber de ella, con mi dolor era suficiente. Cada pregunta que le hacía a German parecía ser peor que la anterior, su cara se desfiguraba aún más con cada pregunta.

-Te cambiaré de colegio Amaro, te pondré en el curso donde estudia tu hermana, pero necesito que te comprometas ... .tienes que dejar todo tipo de excesos y me debes asegurar que seguirás en terapia psicológica.

-Dalo por hecho.- dije sonriente.

-Una última cosa Amaro...por favor ....te pido no le digas nada a tu hermana ...permite que sea yo quien lo haga.

-Te daré un plazo para hacerlo ... .y si no, se lo diré yo, creo que ella merece saber realmente quién es su familia.

German parecía no estar presente, creo que la conversación lo había dejado descolocado, su mirada se perdía por la ventana del cuarto, el silencio se apoderó del momento, pero en mi cabeza los pensamientos venían una y otra vez, sabía muy bien que no me diría quien era la madre de Lisa.... Lisa así se llamaba mi hermana, a lo largo de estos años, leí su nombre en las fotos escondidas que tenía German en su escritorio, la vi en fotos muchas veces, pero ahora por fin la conocería en persona y obviamente conocería a su madre, hay algunas cuentas pendientes que saldar con esa mujer.

El chico del puenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora