CAPÍTULO 191 - LA LÁMPARA VUELVE A SER ROJA

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No había sol ni luna fuera de la ventana, por lo que no se sabía el paso del tiempo.

Fue el mismo caso incluso la última vez en la cueva de Qingming, pero esta vez fue más caótico e intenso en comparación con la última vez, hasta el punto de que era simplemente insoportable.

Después de ser frotado constantemente por las enredaderas, su piel estaba tan sensible que temblaba. Todos los lugares intocables estaban bajo el control de las vides y el estímulo era como arrojarlo a los mares embravecidos y tormentosos; las sensaciones van y vienen constantemente, haciéndole olvidar el día y la hora.

Si fuera un cuerpo mortal, seguro que se habría desmayado hace mucho tiempo.

Sin embargo, estando en el reino de Cruzando la Tribulación, primero, su alma era muy fuerte y no perdería el conocimiento fácilmente y segundo, el cuerpo tenía la capacidad de recuperarse por sí mismo. Estos dos factores le permitieron mantener su claridad y, por lo tanto, fue atormentado repetidamente durante un período de tiempo muy largo.

Aunque la respiración acelerada y el jadeo eran suficientes para demostrar que ya había perdido todo el decoro, todavía se mordía el labio inferior, tratando de no hacer ruido.

La vid se llevó descontenta a su boca. No tenía fuerzas y dejó que jugara con él como quisiera. Su garganta se atragantó debido al bulto causado por la enredadera y se sintió un poco incómodo.

Si hubiera sido antes, habría gritado de nuevo, pero en ese momento, solo había un leve brillo de agua ante sus ojos.

Tenía miedo de que ya no quedara líquido en su cuerpo para fluir.

Fue dado vuelta por las vides y su posición fue cambiada. Las enredaderas lo habían enredado debajo de la ropa, por lo que la ropa aún permanecía intacta en su cuerpo y no se la quitaba. Este material era tan ligero como las nubes que fluyen. En este momento, estaba empapado en sudor fino, e incluso él no tenía rostro para mirarse a sí mismo.

Fue espantoso. Era un sentimiento demasiado intenso. No quería tocarlo y tenía miedo de tocarlo.

Pero después de comprender la intención de Xiao Shao, aunque tenía miedo, siguió la corriente.

Pensando en esto, no podía esperar para sumergirse en el mundo de los mortales y la lujuria. Cuando Xiao Shao estuviera satisfecho, quizás escucharía a Lin Shu.

Pero fue engañado hasta el punto en que había caminado de un lado a otro entre la vida y la muerte, pero aún tenía la mente clara: vio que la expresión de Xiao Shao se volvía cada vez más fría.

Tenía miedo de que todavía no funcionara.

Finalmente, Xiao Shao se levantó y caminó hacia él.

La vela roja en la sala de bodas se hizo con aceite refinado de tiburones y no se apagaría en los próximos años. Luego vio la sombra de un hombre entre la neblina del humo rojo de las velas.

La figura le resultaba vagamente familiar, pero ¿cómo no iba a reconocerla?

Xiao Shao colocó su dedo en su mejilla derecha.

El toque era frío, inmediatamente dejándolo sobrio un poco.

Las yemas de los dedos vagaron y se movieron hacia su oído, pero la acción fue fría y mecánica, al igual que la crueldad en los ojos de este hombre.

Lin Shu lo miró como si hubiera regresado a los días en que era un hámster a su lado.

En ese momento, estaba aterrorizado, siempre evitando a su dueño y luego lo atraparon nuevamente. Ahora soy yo quien te ama y estoy dispuesto a vivir en paz contigo, una vez más, todavía me quedo atrás.

CHICO BONITODonde viven las historias. Descúbrelo ahora