SOULMATES [Rick Grimes/Daryl Dixon]

07

Los ojos de Rick se oscurecen tres tonos al observar el cuerpo desnudo de Eleonora, las bragas siguen en sus manos y se permite llevárselas a la nariz, aspirando el aroma de la intimidad de la castaña.

—Hueles delicioso.

Eleonora traga saliva y la humedad entre sus piernas aumentan ante ese gesto. Les indica que se vayan desnudando para no ser la única, los dos no demoran en acatar la orden y quedan como vinieron al mundo. Sus penes erectos pasan a primera escena, haciendo que Eleonora se coloque sobre sus rodillas, en el suelo, en medio de aquellos dos hombres que tanto desea. Las pequeñas manos de la castaña envuelven los falos y al hacer fricción nota ese relieve por las venas y el palpitar en busca de más. Eleonora les regala una sonrisa llena de perversión y se inclina para alcanzar el pene de Daryl, donde lo mete poco a poco, acostumbrando a su boca y lengua ante ese tamaño. Sigue masturbando a Rick y suelta el pene del cazador, haciendo un sonido obsceno, para pasar hacia el de Grimes. Eleonora se reparte entre los dos, succionando sus pollas con rapidez, embriagandose de sus jadeos y sus manos recorriendo desde sus pechos hasta esa zona que la hace sentir increíblemente bien.

La boca de Eleonora se llena de saliva ante las mamadas, pero continúa con su labor de seguir satisfaciendolos. Algo que le gustaba de ellos es que nunca se privaban de gemir, más bien eso la encendía y hacia de ella un mar de fluidos.

Fue Rick quien la detuvo porque quería acabar con ella dentro, no literalmente, en todo caso sería dentro del condón, pero quería sentir las apretadas paredes del coño de Eleonora y correrse como si no hubiera un mañana. Le dio una mirada a Daryl, quien interpreto que él había extrañado tener a su Eleonora en todos los sentidos, tanto amoroso como en el ámbito intimo. Eleonora soltó un gritito de sorpresa cuando Rick la agarró por sus muslos, tras ponerse la protección, y la colocó sobre su regazo con ambas piernas a sus costados.

Lo gracioso es que Eleonora después de tanto tiempo separados había comenzando con el pene de Rick y no con su boca, por lo que soltó una risita sobre los labios de él y profundizaron el beso mientras hundía su cuerpo lentamente. Sus cuerpo se arroparon y comenzaron un vaivén.