Keira, una chica que solo buscaba salir de la sombra, despejarse y rehacer su vida.
Sufrió abuso por parte de su exnovio el cual busca venganza por culpable.
Todo cambiará cuando su amiga Sira, le invite a una gran residencia llena de futbolistas...
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-que pasa? --pregunto al ver su felicidad de una--
-nos coge Mario --dice y yo pongo cara de duda-- es el mio personal y como si fuese mi colega --me explica y yo lo entiendo--
Así que terminó de vestirme, le aviso y nos vamos en dirección a la sala privada de Ferrán (donde le hacían sus masajes, el doctor le inspeccionaba, hace pruebas...), este me tiene que ayudar ya que yo casi me caigo 3 veces por las malditas muletas. Llegamos y Ferrán abre la puerta, dentro encuentro a un chico pelirrojo con una sonrisa de oreja a oreja.
-hola hermano, que tal? --le dice el pelirrojo saludandole--
-hola Mario --dige dándole un abrazo--
-bueno, cuantame, que te pasa? --dige juntándose las manos-- molestias, calambres..?
-no es para mí --dice y el chico pone cara de duda-- es para ella --dice señalando mi pie.
-ouuuu, hola amiga --dice estrechando me la manos--
-hola --digo tímidamente--
-pero tu eres futbolista? --me pregunta rascándose la cabeza--
-no --contesta Ferrán antes de que yo lo hiciese-- pero esque es una urgencia y he pensado en dejarte mi bono para que puedas verla.
Mario se queda pensando un buen rato.
-esta bien, siéntate aquí porfavor --dice señalando la camilla--
yo me siento y el comienza a mirar mi pie y a tocarlo.
-es grave? esta bien? --pregunta Ferran preocupado apoyado en la puerta mientras nos observa--
el pelirrojo solo asiente hacia el mismo.
después de un rato se aleja de mi y se dirige a Ferran.
-no es grave, tranquilos, es una esguince leve --le dice mientras va al escritorio a escribir una cosa en un papel--
-entonces porque estaba morado y me duele tanto? --le pregunto confusa--
-veras... en una esguince lo normal es que duela, en tu caso como es tu primera esguince es normal que te duela un monton ya que no has experimentado este dolor otras veces --dice mientras termina de escribir en el papel y me mira-- el morado es por no tenerlo en alto, la sangre baja y por eso se ve asi --termina de explicarme, se levanta y se dirige hacia nosotros-- no hace falta el yeso, toma le receta para una tobillera, ves a la farmacia y te la darán, es una especial --dice y asiento--
-por cuanto tiempo la tendrá que llevar? --esta vez se me adelanta Ferran--
-2 o 3 días, mientras guarde recoso y la mantenga en alto serán solo esos días --le explica--
-vale, muchas gracias --sonrio tímidamente--
-denada preciosa --dice y me sorprendo, pero lo dejo pasar__
a Ferran parece ser que no le ha hecho tanta gracia, lo noto por su cara y a mi eso me hace gracia.
-gracias por traerme y dejarme tu tarjeta --le digo ya fuera--
-no tienes que agradecer nada, era necesario
-y no te pongas celoso anda --le digo pegándole un capón--
-oyeee --se queja del capón ya que le he dado un poco fuerte-- pues menos mal que te he dicho de venir, porque sino hubieses estado con el yeso sin moverte hasta que nos fuésemos --dice y yo me tapo los oídos--
-no me lo recuerdes --me quejo--
queda 1 mes para volver cada uno a su casa y a mi no me apetece, me he acostumbrado a esta vida y no quiero separarme de ninguno, estoy segura con ellos y hay muy buen ambiente.
aparte, el otro día me llamaron de mi trabajo y me dijeron que tenia que irme a Italia ya que necesitan gente y me han llamado a mi.
espero que os este gustando la historia, ya sabeis que cualquier comentario malo, bueno o duda que tengáis podeis decírmelo por aquí o por mi Gmail ( ainaraxpedri@gmail.com ). también podeis pedirme historias de cualquier persona (streamer, futbolista, jugador de baloncesto...).
