Si me lo preguntan, nuestra historia continuó desde ahí, haciendo el amor en cualquier lado, solo bastaba una mirada para encender nuestras llamas.
mi esposo se convirtió en mi vida entera, me cumplió cada capricho y fui muy feliz... pero el tiempo se agotó...Habían pasado varios años, y todo los vivi bien con tratamiento claro, pero bien... a veces me olvidaba que estaba enferma pero...
llegó el día que ya no me pude levantar de la cama, él estuvo para mí, hasta qué, le mencioné el tema de " la muerte digna", los médicos estaban de acuerdo y él pesé a su ceño fruncido y sus ojos llorozos aceptó...
— es que no se que va a ser de mi cuando no estes. — me dijo una noche, con su voz quebrada. — no quiero ser egoista por que entiendo que no quieres sufrir, pero no puedo dejar de pensar en como sera todo cuando no estes. ¿Cómo voy a atrapar tu aroma para que no se vaya?, ¿cuánto tiempo podre recordar tu risa o tu mirada?, ¿a quien miraré mientras duerme en mis noches de desveló?.
Seque sus lágrimas, en silenció. En realidad si estaba asustada, ojala pudiera tener más tiempo.
— prometo buscarte en mi próxima vida mi amor.— le dije acaricando su rostro.
— si no me encuentras tu, te encuentro yo...
Todo estaba pactado para un dieciocho de noviembre, hoy escribo la página final de mi historia. horas antes, me desperté como cada día, bueno... no. Éste era mi día final, sería dormida para ya no despertar, miré a mi costado y lo tenía a él, a mi amor abrazado fuertemente a mí, en su mano tenía un papel con una pequeña nota...
" amor mío, no soy tan fuerte para verte partir otra vez, en esta ocasión me voy primero y te espero allá...te amo mi vida"
Se había suicidado, tomando unas pastillas luego de que yo me quedará dormida.
Besé su mejilla dejando mis lágrimas en su piel y acaricie su hermoso rostro, - tranquilo mi amor, ya voy a tus brazos- le dije...Lo buscaría en el cielo y en el infierno, nuestras almas no eran dos piezas de un amor eterno, eran una sola que la vida había puesto en dos cuerpos. Por ley, nos atraiamos, sin importar lo lejos que estuvieramos.
Hoy termina mi vida, la de él ya terminó horas antes... pero nuestras historias de amor, sigue en el infierno seguramente por la lujuria que teníamos pero... sigue por toda la eternidad... y en cada una de las vidas que vivamos.
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Años más tarde, cuándo Cristal ya siendo demasiado vieja limpiaba la habitación que había sido de Azael, encontró el diario. Lo leyó entre lágrimas y con un poco de frustración por que realmente creía que ellos merecían más.
Salió de la casa y camino hasta un hermoso jardín detrás de esta, miró el cielo y agitó el libro.
— si que lo amaste he...— dijo como si Rubí pudiera escucharla.
Hizo un poso y lo enterro en el mismo lugar donde una unica tumba yacía. Larino se negó a poner debajo tierra dos tumbas, no por que no quiera gasta el dinero que habian heredado sino por que, ellos mejor que nadie sabían de amor enterno e incondicional.
Luego de eso, regó las plantas y limpió el lugar de las hojas que caían de los árboles.
Ambos cuerpos estaban ahi, habían sido enterrados juntos, Rubí en los brazos de su esposo, Azael abrazando a su esposa.
La historia del hombre que se había ido al cielo junto a su esposa recorrió todo los pueblos, incluso llegó a oidos de Lautaro quien lo había perdido todo, después de la muerte de su tío y madre.
Pues al final, independientemente del tiempo que estemos en la tierra, todo cosechamos lo que sembramos.
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EL DIARIO DE UNA SUMISA
RandomElena, es una chica huérfana, la presa ideal para un depredador...