Un mes después y lejos de mi Azael, mi estado de salud empeoró mucho. Ya no le encontraba mucho sentido a seguir peleando la batalla de la vida, así qué, mis días se limitaron a vagar por aquel parqué, era bastante grande asi que no había problema, podía caminar durante horas...
Hasta qué un día ya no pude más, fue una sensación extraña, recuerdo que caminaba arrastrando los pies, con mis ojos adoloridos por llorar cada noche, me pesaba el cuerpo y me dolía mucho el estómago, no había comido nada desde el día que llegué a ese lugar, y una sola imagen se hizo presente antes de perder la conciencia, el rostro de mi amo...
Era una historia rara, como había empezado todo y más aún, la forma instantánea en la que me había enamorado, pero lo amaba...
Cuando desperté, estaba en una cómoda cama, y ahí estaba él, a mi lado.. esperando paciente a que despertará, no podía creer lo que estaba viendo, no sabía como, incluso pensé que era un sueño o un espejismo, pero no...
- eres una mujer difícil de encontrar- me dijo sentándose a mi lado.
- ¿ co.. co.. cóm...- intenté preguntar.
- ¿ cómo te encontré?... pagando, cuando te dije que te fueras, yo quería que fueras libre, que vivieras tu vida... que fueras feliz, aunque a mi me doliera... pero resulta, que te fuiste sin nada de dinero y dejando una carta... comencé a buscarte inmediatamente, pero parecía qué te había tragado la tierra, divulgue sutilmente que te buscaba, junto con una foto, cuándo te desmayaste, una pareja de ancianos te llevo al hospital, ahí habían unos conocidos que son médicos y cuando te vieron, supieron que eras vos, asi que me llamaron...¿ Rubí?- me dijo, atrapando con sus manos mi rostro... - yo te amo y mucho, no queria que pasaras tu último tiempo viviendo al lado mio, por eso te di todo mi dinero, todo lo que tengo te lo di, por que nada de esto tiene sentido si no estás. Después de ti, no hay nada.
me abrazo, sollozando. Yo también lloré con él, no me importaba el tiempo que tuviera, pero necesitaba que fuera con él.
Lo besé apasionadamente, estaba loca por esos labios, él me rodeó con sus brazos y me presionó hacia él.
- te he extrañado- me susurró besando mi cuello. Me subí arriba de él, al mismo tiempo que se dejo caer en la cama, sus manos estaban pérdidas tocando mi cuerpo, me desnudó velozmente y se metió mis senos en su boca, los apretaba con las manos para juntarlos y los saboreaba con su humeda lengua.
—para, para...— musitó. — antes de hacer lo que hacemos siempre, quiero saber ¿si quieres casarte conmigo?. —
— pero Azaelz yo estoy casada...
— no realmente, hace algún tiempo te lo iba a proponer asi que me estuve averiguando y resulta que te engañaron.
— en ese caso, acepto. — sonreí.
De un movimiento muy audaz, luego de que yo, desabrochará y sacará su pene, el cuál palpitaba incesantemente en mi mano, me arrancó el camisón. ( sí, al parecer me había cambiado él, solo que en ese momento lo que menos me importaba era la ropa que vestía, por favor... lo tenía en frente, era lo único qué valía). Corrió mis bragas y entró en mi, como un toro desesperado bramando en medio de la noche.
Hicimos el amor, desbordado de locura, apagando o intentando apagar las llamas del deseo, de nuestro deseo, me movía encima de él, cómo una bandera flameando en lo más alto del mástil, al compás de sus gemidos y los míos, era un baile sensual, lleno de amor... - te amo- dijimos ambos en coro, luego de acabar el coito, sudados pero sastifecho, decidí no moverme ni un centímetro, me quedé encima de su cuerpo, con su miembro dentro mío, acostado en la cama. Él debajo de mi cuerpo, recorriendo con sus dedos mi espalda desnuda y caliente, mis labios buscaron los de él, para chocar lentamente...
*****
Al otro día, me encontre temprano con Cristal quien de un salto me abrazo. Como acostumbraba , me ofrecio mucha comida por que decia que estaba muy delgada.
Yo solo reía, siempre me pareció una mujer muy dulce. Quería a Azael como una madre, lo sé por que me lo dijo muchas veces.
—Cristal, me salvo aquél día del accidente. — dijo Azael, mediante desayuno. — ella apareció y me colocó debajo del agua fría. Sí, había sido una mala idea. La gente dice que yo quemé vivo a un chico, pero la verdad es que fue un accidente. Jugamos con una botella de alcohol que él habia conseguido, estabamos al lado de una fogata que los grandes habían hecho para cocinar. Se me resbaló de las manos y todo ardió...
—¿y tus padres Azael?.
—murieron, eran muy grandes.
Sonreí y tomé su mano. — te amo.
— yo a ti...
Larino y Cristal entraron a la sala, salvo excepciones acostumbraban a desayunar, almorzar o cenar todos juntos.
Azael, esperó un tiempo antes de darle la noticia.
Cristal saltó y grito de emoción, incluso dijo que tenía su vestido de boda, me lo ofreció con tanto amor que acepté honrada de poder usarlo.
Larino abrazo a Azael y le dijo que el lo queria como si fuera su hijo.
Se que, iba a hacer feliz el tiempo que viviera en la tierra, después de todo... las personas estamos en cuenta regresiva desde cuando nacemos.
Todo se hizo rapido, por que la idea era casarse cuánto antes, asi que un mes después yo caminaba al altar del brazo de Larino.
No habían más invitados que ellos y el juez.
Azael estaba nervioso, tanto que se le cayeron los anillos. Reí por eso.
Se volvió mi esposo, pero nunca dejó de ser mi dueño.. mi amo... mi hombre.
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EL DIARIO DE UNA SUMISA
RandomElena, es una chica huérfana, la presa ideal para un depredador...