Parte 9.

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Me siento tan en paz, siento un suave calor que recorre todo mi cuerpo, un fino escalofríos en una parte de mis escamas, y escucho cerca mío una suave melodías.
-¿Crowley?- Me susurran, yo me aprieto más, para darle la señal de que le escuchó pero que no rompa mi paz, -Agnes nos dejo muchas pistas- yo no me muevo, -vamos Crowley te necesito despierto- siento su tacto rozar por todo mi cuerpo. Yo abro los ojos, unos bellos ojos están posados en mi con una sonrisa cansada pero feliz, -al fin te despiertas- me enredo aún más.

-¿Qué ocurre Assssi?- Le digo, él mueve su vista al escritorio.

-Agnes-, yo me deslizo hasta quedar a la altura de sus hombros y ver con él -estuve descifrando las profecías, y aunque no entendí todas, entendí una gran parte, tengo la dirección de Adam y el número del teléfono de línea de la casa- me comenta.

-¿Essso no lo ssssabíamos ya?- Le preguntó, él niega.

-Al menos yo no, pero eso no es lo único, mira- agarra el libro y lo abre, empieza a buscar una hoja al encontrarla y recita la profecía:

"En momentos de mayor tensión el niño es la solución, si no lo acompañan perecerá y la realidad cambiará".

-Claramente habla de Adán, pero cuando habla de acompañar puede que hable de nosotros, ¿no? Siento que es más una advertencia, más que una profecía- me dice Aziraphale, yo asiento.

-¿En que pienssssas Ángel?- Le siento respirar hondo.

-Vayamos a ver a Adam- me aclara.

-¿Ahora?- Le pregunto, deslizó mi cabeza hasta que mi cuerpo está en su mayoría rodeándole la espalda, mientras yo me alzado mirándole a los ojos.

-Si, tengo miedo que le hagan- traga en seco asustado.

-Pero en la sssserie hoy deberíassss ver a Gabriel hablar con él- le recuerdo, niega con la cabeza.

-Ya no podemos, hicimos lo máximo que se nos permitió ser igual a la serie, desde ahora no sé que pasara, y las profecías advierten muchas cosas- levanta su mano y toca parte de mi cabeza, realiza un suave movimiento. Siseo en satisfacción haciendo que Azi se ría, -querido tu cuerpo en serpiente es muy sensible- el apodo, más el rozamiento y además, el directo contacto con su cuerpo. Hace que me pusiera muy nervioso y no logre controlar mi cuerpo cuando pica y poco a poco me iba transformando otra vez, mi cuerpo se divide en partes y crece. Aprisionando a Michael, mis ahora piernas están en cada lado de su cuerpo, yo estoy encima suyo sentado... ¿Por qué me tienen que pasar estas cosas a mi? Mi corazón late muy rápido, tan rápido que me aterra la idea de que se escuchara desde afuera, Azi parecía que estuviera en una situación parecida. Está mirándome con un sonrojo notorio respirado rápido. Nuestras caras están cerca y su mano ahora en vez de mi cabeza está apoyado en mi mejilla.

-Ehh, perdón- Intentó disculparme, abre un poco más los ojos y se lame los labios cosa que reseca los míos y se llenan de deseo por probar los suyos, trago seco.

-No- su voz es tan grave ah dios, esto es demasiado. Me voy de matar por tantas emociones -no pasa nada- si pasa, pasa que necesito besarte y no es Crowley soy yo. Me inclino un poco hasta sentir su respiración. -¿David?- Yo no digo nada, nuestras narices se tocan -deberíamos... Ir ¿no?- Me murmura con voz alterada.

-¿Eso es lo que quieres que haga Ángel?- él se estremeció ante mi pregunta. Levantó mi mano y toco ligeramente su cuello, suelta el aire que parece que estaba acumulando. -¿Quieres irte ahora?- Le pregunto bajo, rozo nuestras narices suavemente.

-Si... Si, no ósea si vamos- me contesta tartamudeando, yo suspiro y me alejo, mira hacia abajo. Yo me levanto de la silla, y le extiendo la mano para ayudar a levantarse. El sigue sonrojado, no suelta mi mano. -Voy a... Estar en el auto así vamos- suelta mi mano y se dirige a la puerta. Hasta que no le deje de ver en mi campo de visión no respire.

Que pasaría si... "Good Omens"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora