Overlord "El Reino Dragonico"

Parte 3

El grupo de Aura había viajado hasta la frontera del Reino Hechicero y luego hacia la ciudad fronteriza de Kircha, una ciudad avanzada de la Teocracia Slane. Normalmente, un enviado tendría que viajar hasta la capital para recibir una recepción oficial. Sin embargo, dada la composición del séquito de Mare, la Teocracia decidió hacer una excepción y encontrarse con ella en la ciudad fronteriza, y luego acompañarla a la capital para evitar incidentes.

Un Caballero de la Muerte se adelantó a la procesión y fue recibido por un aspecto normal en las puertas. A persar se la apariencia aterradora del jinete, el hombre no mostró signos de miedo. Los dos intercambiaron saludos, y después de confirmar la llegada del enviado, el jinete volvió a procesión mientras el hombre llamaba a su superior.
-"Dominic-sama, el enviado del Reino Hechicero llegará en breve."-
-"Gracias, Kegor,"- le dijo el viejo hombre de aspecto amable.
Por supuesto, como el nuevo capitán de la Escritura Windflower, Kegor Bosk no sería engañado por la apariencia del hombre. El Cardenal era una figura de renombre y había exterminado a muchos demihumanos como parte de la Escritura de la Luz del Sol. Incluso ahora, en su vejez, todavía poseía poder similar al de un capitán de las Escrituras.
Los dos vieron como el carruaje rodeado por unos veinte jinetes no-muertos se acercaba.
-"Puede ser una posibilidad remota, pero ve si puedes aprender algo sobre estos jinetes",- dijo Dominic, y Kegor asintió.
La procesión finalmente llegó a las puertas, y el carruaje se detuvo. La puerta se abrió, y una pequeña y oscura niña descendió al suelo. Lo más llamativo de ella el rollo de Pergamino de muy alto valor que llevaba.
El elfo oscuro miró a su alrededor antes de dirigirse a los dos hombres con voz imperativa.
-"Yo, soy un enviado del Reino Hechicero , Aura Bella Fiora."-
-"Soy Dominic Ihre Partouche, Y este es mi subordinado, Kegor Bosk,- "el
anciano los presentó.
-"Encantado de conocerte."-
-"Entonces, ¿procederemos a la capital? Kegor y su hombre proporcionarán una escolta, para evitar malentendidos. Yo, por otro lado, soy demasiado viejo para montar a caballo, ¿te importaría si te acompaño en el carruaje? "-

-"No… en absoluto, tú, eres bienvenido a unirte a mí,"- dijo la niña elfa después de un momento de vacilación Dominic sonrió por dentro,
-“Tan bien hasta ahora. Ahora mi trabajo principal comenzará. Aún así, ¿porqué los seguidores del rey Hechicero eligieron a un joven elfo como enviada?
¿Acaso es una forma de burlarse en nuestra propia cara por la situación de
guerra que tenemos contra la nación de elfos? Mmmm.... no, no tiene sentido.
Con la muerte de ese demonio en el reino santo quizá ellos estén planeando…”
Ahhhh, ya veo”.-

En ese momento una idea maliciosa acababa de entrar en su pensamiento.
El cardenal Dominic entendía que si jugaba bien sus cartas habría una oportunidad de reducir poco a poco el poder del Rey hechicero asesinando a cada uno de sus leales súbditos antes de que tuvieran tiempo de resucitarla.
Los dos subieron al carruaje y toda la procesión comenzó a moverse, con jinetes humanos guiando el camino. Después de un momento de silencio, Dominic iba a preguntar, pero el elfo habló primero.
-"Me gustaría hablar con usted sobre la agenda que deseo seguir mientras
estoy aquí"-, dijo ella.
-"Como saben, mi maestro, Ainz-sama sacrificó heroicamente su vida para
vencer a Jaldabaoth. Ahora, todos en el Reino Hechicero están buscando una forma de vencer y, preferentemente, sellar a Jaldabaoth. Como nación que posee un poder militar considerable, me gustaría pedirle a la Teocracia que comparta su conocimiento, para que juntos podamos vencer al malvado demonio”.
"También me gustaría recorrer la capital y aprender más sobre su cultura e historia, a fin de promover las relaciones entre nuestras naciones".-
-"Por supuesto, Aura-dono. Por nuestra parte, nos gustaría aprender más
sobre el Reino Hechicero y su rey. Perdónenme por decir esto, pero un no-muerto que no mata a los vivos es un ser raro ".-
Con la Escritura de Clearwater trabajando activamente en el Imperio de Baharuth cuando sucedió la invasión de los trabajadores a la Gran Tumba de Nazarick, los Cardenales se habían enterado de los eventos que ocurrieron en el palacio cuando este elfo acompañado por su posible pareja llegó a la capital. Por lo que era consciente del extremo cuidado que debía mantener con este elfo a pesar de lo que sentía hacia su especie si quería mantenerse con vida.