Hay varias formas de celebrar un cumpleaños: desde comer pastel hasta hacer una fiesta.
Pero aquí se celebra con fanfics.
Jong's Month, una recopilación de oneshots para celebrar el cumpleaños de JongHyun.
Porque cada historia te hace creer, sentir...
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Dragón Animal fabuloso con figura de serpiente corpulenta, garras de león y alas de águila, muy feroz, que echa fuego por la boca.
A MinHo le habían pasado muchas cosas raras, demasiadas, pero la más extraña de todas era el dragón de la tetera.
MinHo había ido a una tienda de antigüedades con su madre, quién había insistido en querer comprarle algo vintage a su amiga de toda la vida. Era él quien tenía carro, y el fin de semana libre, así que fue usado de chofer y acompañante. La verdad era que prefería estar haciendo otra cosa, pero pasar tiempo con su madre no era malo de todas formas. Al norte de la ciudad estaba la tienda, luciendo tan antigua como MinHo la había imaginado. Entró aburrido y al empezar a pasear por los estantes empezó a prestarle atención a las cosas expuestas: desde platos hasta bolsos, libros y jarrones, de entre todo lo que vio le gustó una tetera de jade.
Su color verde relucía y los detalles en dorado la hacían lucir elegante.
«A KiBum le encantaría esto», pensó al tomarla con sus manos.
La revisó por todos lados, no prestándole atención a los grabados de un dragón y un hombre unidos. Simplemente la compró y la llevó a su casa para poder limpiarla y dársela a KiBum.
Invitó a KiBum esa misma noche, así ordenó y limpió todo. Al llevar la tetera para la cocina y alzarle la tapa para querer limpiarla, un humo rojo salió de ella, provocando que se asustara y se alejara del lavadero.
El humo aumentó de a poco y al final se disipó enseguida dejando ver a un dragón rojo, enroscado en sí mismo parado al filo de la encimera.
—Tú debes ser mi nuevo amo —habló el dragón—, ¿para que me invocaste?
MinHo parpadeó dos veces mientras procesa a lo que había en su cocina: un dragón parlante. Un dragón rojo que hablaba y que salió de la tetera.
De acuerdo, del susto del humo, que probablemente era algún tipo de hongo que tenía dentro la tetera, se resbaló, golpeó su cabeza y yacía en el piso inconsciente, su mente inventando cosas para mantenerlo vivo hasta que pudiera recibir ayuda.
—Pareces muy sorprendido… —comentó el dragón, desenroscándose y acercándose a él—. ¿No sabías que yo estaba aquí?
El pequeño dragón se acercó tanto que MinHo bien podía elevar la mano y estirar un dedo para tocarlo; eso hizo, y la dureza de la escamosa piel lo hizo estremecerse.
El dragón vio el dedo, el estremecimiento, e hizo una mueca indiferente.
—Puedo convertirme en humano si mi apariencia te incomoda.
O sea que era un dragón cambiaformas. Eso era nuevo, más nuevo que el simple hecho de ver un dragón. Sin embargo, asintió y el humo rojo que había salido de la tetera envolvió al dragón, disipándose para dar paso a un hombre con hanbok rojo.
¡Era una locura!
Cuando el timbre sonó MinHo se asustó y le pidió al desconocido que se ocultara.
—Solo tú puedes verme —informó—, así que ocultarme será innecesario.
MinHo ocultó la tetera, ignoró al dragón y llevó a KiBum a un restaurante con la excusa de que su cocina se había dañado.
Al final de la semana MinHo se quedó con la tetera, con el dragón, y con la certeza que se estaba volviendo loco.
Resultó que el dragón tenía nombre –JongHyun–, tenía poderes –cumplía tres deseos–, y era bastante apático.
MinHo estaba escéptico sobre los deseos y queriendo corroborar si era verdad o no, deseó poder hablar y entender mandarín como nativo. JongHyun se lo cumplió; lo comprobó cuando buscó una película sin subtítulos y comprendió todo.
Desde entonces MinHo tenía a JongHyun.
No iba a ser tonto y desperdiciar sus otros dos deseos en nimiedades por más que el dragón insistiera. Tenía que pensarlos bien porque era una oportunidad única. Así que tuvo a JongHyun con él por un tiempo.
El dragón era reservado y distante pero mientras más MinHo convivía con él, más se abría y se volvían cercanos, hasta el punto en que JongHyun dejó de preguntarle si pediría sus otros dos deseos. Y es que MinHo le había mostrado tantas cosas del mundo actual que JongHyun se interesaba más por ellas y menos por su trato. Y MinHo lo veía ser feliz.
Fue así que lograron forjar una amistad.
JongHyun le contó que estaba atrapado en esa tetera por una maldición y que debía servir a diez amos para poder liberarse y con él eran ocho. MinHo le pidió disculpas por retenerlo con él todavía pero el dragón le pidió no preocuparse, que aunque estaba atado a él por el contrato de los deseos lo trataba como a un igual y no como un esclavo, y le agradecía eso.
JongHyun esa noche le regaló a MinHo el poder tocar las nubes.
Era de madrugada cuando lo llevó a la terraza y le dio un paseo en su forma de dragón, JongHyun serpenteando por entre los edificios y MinHo disfrutando del viento revolverle el cabello.
Esa fue la primera vez que JongHyun disfrutó tanto de ser un dragón, y se lo debía a MinHo.
🐶🔥🐶
Notas:
Hola!
Gracias por la paciencia al esperar este corto ☺️
La cuestión era que cuando quise terminar de editarlo se me fue el Internet y luego me distraje 😅
pero aquí está!
no sé si recuerdan la historia de un MinHo dragón y un JongHyun cazador de uno de los Jong's Month anteriores, pero cuando escogí la palabra con D escribí un corto que era la continuación de ese corto de hace como dos años atrás.
me rehusé a subirlo porque no me gustó y porque, aunque han pasado años, sí tengo una historia para un fanfic. no he tenido tiempo ni muchas ganas de escribirlo pero sepan que sí habrá uno
nadie me quitará las ganas de escribir un fanfic MinHyun 😂 y por supuesto no dejaré de escribir fanfics 🤷🏽♀️
Gracias por leer! 💕
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