Una historia donde dos hermanos buscan la forma de mantener a salvo las personas que más quieren.
Donde se pondrán a prueba las verdaderas amistades.
Donde volverán a creer en el amor.
Una historia donde se cuenta la vida de Tn y Peter Stark.
Wan...
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— ¡Por Dios! Cómo es que… — las lágrimas comenzaron a salir con más fuerza no podía ni siquiera hablar — ¿D-de verdad estás aquí? ¿E-res tú? — tragué en seco mientras me acercaba lentamente a ella tratando de no caer.
Ella me miraba con sus ojos llenos de brillo.
— Podría decir que sí, cielo. — me miró dándome a la vez una cálida sonrisa y abriendo sus brazos para recibirme.
Me abalancé a ella y la abracé con demasiada fuerza.
— No sabes cómo te he extrañado…
— Lo sé mi niña — dice mientras acaricia mi cabeza, sonreí ante su apodo.
— Así me dice Thadd — La noté sonreír a ella — Todos te extrañamos tanto… ¿Te quedarás? Dime qué te quedarás.
Se separó de mi abrazo y me tomó del mentón con una medio sonrisa.
— También los extraño demasiado, cielo, pero no lo creo — contestó con una mirada triste — No puedo quedarme por mucho tiempo.
Joderrrr.
— Me siento perdida sin ti, mamá.
— Eres una mujer fuerte mi amor, has pasado por mucho y aún así mírate — me da una vuelta — estás hermosa y lo más importante… estás todavía en pie, podrás con esto y con más, cielo — acaricia delicadamente mi mejilla — la vida te recompensará — me miró tiernamente — aunque de hecho ya lo está haciendo — Sonríe ampliamente — la has encontrado… Ninguna Salvatore tuvo ese privilegio.
— Tu encontraste a Thadd.
— Pero fue demasiado tarde — habla triste — ¿La amas? — sigue acariciando mi mejilla y luego coloca un mechón de mi cabello detrás de la oreja.
— Como no tienes idea, madre — no dudé en contestar.
— No sabes lo feliz que me haces, quiere decir que aún si se rompe la maldición seguirás con ella…
— ¿Y si ella no me quiere igual?
— Cielo — me mira como si quisiera reprenderme — si ella no estuviera enamorada de ti estoy segura que no habría aceptado estar contigo — toma mis manos en un leve apretón — la marca es como un compromiso y no todos están dispuestos — joder no lo había pensado de esa manera ¿Y si ella está por compromiso? — ¿Puedo verla?
— ¿La marca o a Wanda ?
— Las dos — sonreímos.
Me levanté un poco la sudadera que llevaba, dejando ver la marca que ahora adorna mi torso.
— Es… muy… es hermosa.
— Son sus manos dejando ver su poder, también lleva los anillos… es justo ella — dije sonriendo, ahora saqué mi móvil y miré mi galería, le mostré varias fotos que tengo con Wanda, con Peter y Pietro.
