~Capitulo 26~ Opciones

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¿La policía?
No podía ser una buena opción ¿o sí?

Miro detenidamente la entrada del cuerpo de policía. Había mucho tránsito en el lugar, preguntándose si la gente que iba ahí obtenía solución a sus penurias.
¿cuáles eran las razones para acudir a la policía?
Según tenía entendido, las personas frecuentaban el lugar cuando eran víctima de robo, secuestro o violencia intrafamiliar ¿el abuso era una causal? Quizás había otra organización que se ocupaba de niños que fueron o son abusados. Si acudía a la policía, ¿ellos podrían hacer algo por el? No tenía una respuesta clara, y quizás, era buena idea preguntar.

Quería entrar, pero el miedo lo invadía. No sabía cuáles serían las consecuencias que traería preguntar o contar su historia. 
Dio un paso hacia adelante para luego retroceder al instante.

Jimin quería que lo hiciera. Lo había llevado hasta allí para que confiara en la policía y pudiera salir de esa casa que solo traía desgracia a la vida de su protegido.

—¿ Te encuentras bien? — el muchacho gira mirando a un fornido hombre— no... yo solo... solo, tenía una duda.

El oficial noto el deplorable estado en el que se encontraba el adolescente,  por lo que no dejaría que se fuera sin antes responder algunas inquietudes.

— ¿Qué edad tienes? — pregunta.

— Diecisiete, señor.

— Ven—  pone una manos sobre el hombro del chico — hablemos adentro — ordena.

— No estoy seguro...

— Veamos si puedo hacerte de ayuda — sonríe ampliamente, generando confianza.

Quizás seria buena idea entrar, pensó.

La oficina de policía era realmente grande, con grandes paredes blancas, tapizadas con un sin fin de carteles de todo tipo. Las bocinas de los teléfonos no paraban de sonar, lo que traía un gran agobio para el muchacho que se sentía como un gatito en un gran lugar.
El hombre lo llevó hasta uno de los taburete donde le pido aguardar un instante para comenzar a hablar mientras este le brindaba una taza de té caliente.

— Ten— le tiende la taza para que este la tomé— bebe un poco para que tu cuerpo comience a entibiar.

Yoongi tomó temeroso la taza llevándola hasta su boca, sintiendo como el calor del agua viajaba por todo su interior, haciéndolo sentir cálido y acogido.

— Qué te trae al cuerpo de policía— pregunta amablemente.

— No estoy seguro de qué hago aquí, oficial — el hombre inclinó un poco la cabeza para mirarlo mejor— no estoy seguro si podría ser de ayuda.

— Dime cuáles son tus inquietudes y así veremos si puedo ayudarte— sentía que algo iba mal con el chico, por lo que intentaría hablar con el sin formalidad para que se sintiera más en confianza—  ¿puedo saber tu nombre?

No sabía si sería buena idea decir su nombre...

— Yoongi... me llamo Yoongi.

— Muy bien Yoongi,  me gusta mucho ese nombre — el chico alzó la mirada encontrándose con la gran sonrisa del oficial — eres estudiante, ¿cierto?— el chico asiente — debes estar a poco de salir del colegio, debes preocuparte mucho por tus calificaciones para que puedas entrar a una buena universidad...

Estaba demasiado mareado. La voz del oficial se sentía como un eco en su cabeza.

— Yo... — interrumpe— yo no me encuentro bien — advierte— necesito que me alejen de mi casa, necesito que alejen a alguien de mi casa.

Duelo De Ángeles 《》MYG+PJMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora