Capítulo 6

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Capítulo 6

Jimin despertó igualmente enojado ese día y lo enojaba aún más eso, porque se suponía que tenía problemas más importantes que Jeon Jungkook, pero ahí estaba, molesto con y por él, realmente le fastidiaba Jeon, era un idiota odioso y era más fastidioso que influyera en su humor.

Vamos, ese tipo no se merecía nada de él, pero aún así Jimin le guardaba muchísimo resentimiento, el sentimiento era intenso y abrumador.

Ese día logró despertar igualmente temprano por lo que la casa estaba oscura y silenciosa, escabullirse fue sencillo como siempre, su madre tenía el sueño profundo por lo que podía alistarse sin tantas preocupaciones, aunque esa sensación de alerta no desaparecería, nuevamente abandonó la idea de desayunar, sería muy arriesgado y era mejor no tentar a la poca suerte que tenía, así que se iría, mientras más pronto saliera de ahí mejor.

Su entrada de la noche anterior era una buena idea para salir de casa, dejó el pestillo colocado en la puerta de su habitación para evitar encontrarse a su madre en caso de que esta entrara en su regreso o algo así, llámenlo paranoico pero Jimin le tiene miedo a su madre, mucho.

Salir por la ventana no fue un problema, él era delgado y pequeño así que moverse por ahí no resultaba muy difícil, lo más incómodo del proceso era el bajar la escalera metálica aderida a la casa, como ayer había mencionado era una escalera únicamente para bajar porque se encontraba a cierta altura para evitar que alguien subiera por lo que tenía que prácticamente tirarse de espaldas, la idea no era atractiva para nada pero tampoco tenía opciones.

Jimin se lanzó.

Cayó con las piernas un poco rectas y estas se flexionaron y se tambaleó, mierda, estaba loco, iba a romperse algo si seguía así, ni siquiera quería pensar en como haría para subir de vuelta, estaba en un lío.

Una ráfaga de frío pasó, la mañana estaba bastante fría y lo sintió en la punta de sus dedos. Jimin se acurrucó lo más que pudo en su sueter y escondió sus manos temblorosas en él, siempre había sido muy friolento y no llevaba unos guantes encima, así que de por sí el día no se veía ni un poco prometedor, simplemente perfecto.

El camino al instituto fue tranquilo y solitario como siempre, habían pocos alumnos cuándo llegó debido a que era temprano así que sería una buena oportunidad para Jimin aprovechar y visitar la cafetería que a esas horas debía estar solitaria, era lo oportunidad perfecta.

Tal como predijo la cafetería estaba poco concurrida, solo vió un par de grupos de personas en el fondo a los que no les prestó atención, demasiado enfocado en llenar su estómago que rugía como león hambriento encerrado en una jaula.

Las señoras que servían la comida lo atendieron más rápido que nunca y según sus indicaciones le extendieron la bandeja con comida, estaba por voltearse para irse a sentar, una voz sonó antes de eso a sus espaldas.

─Te ves magullado Park─dijo Hyojong, o Dawn que ra su nombre de pila, haciendo que se quedara quieto en su sitio─¿quién ha tomado mi lugar de golpearte? ─preguntó, soltando una risa que Jimin describiría como irónica─¿han sido mis amigos de último año?, ¿O ha sido que andabas de zorra ofrecida y finalmente te han dado una lección?.

El rió como si hubiera dicho lo más gracioso del mundo y sus amigos al fondo que se mantenía atentos soltaron risitas y comenzaron a susurrar entre ellos.

Eran unos imbéciles y estaban equivocados si pensaban que iba a quedarse callado.

─Mira hij-

─¿Tienes algún problema Hyojong? ─alguien habló.

Todo el mundo quedó en un silencio expectante, era inaudito que Jeon Jungkook se metiera directamente en lo que hacían, Jeon solía ser un tipo que evitaba meterse dónde no lo llamaban, pero esa mañana fue diferente y estaba interviniendo, Jungkook puede ser considerada una persona pacífica pero se veía intimidante debido a su altura, cabello negro desarreglado y perforaciones, era corpulento y no es del tipo de sujeto del que quieres recibir un puñetazo, definitivamente no.

─Si─respondió Dawn, Jeon comenzaba a atravesársele, era fastidioso y Kim Hyojong no era un tipo que se preocupaba por represalias─ tengo un par de cuentas pendientes con ese pequeño fupapollas,¿Qué hay de ti?, ¿vienes a pedirle servicios?.

Dawn formó una sonrisa ladeada, arrogante y prepotente aunque su expresión duró poco.

Su cabello castaño oscuro que siempre estaba recogido en una pequeña coleta baja se desordenó por el brusco movimiento, los mechones tapaban su rostro entonces cuando Jungkook le dió un fuerte puñetazo que impactó directamente sobre su pómulo derecho, sacudiendolo y estremeciendolo desde su cabeza.

La tensión era tan fuerte que podías sentirla con claridad, toda la cafetería estaba en silencio, procesando que Jeon Jungkook le había dado un puñetazo certero y limpio, sin vacilar ni un segundo a Kim Hyojong, quien podría ser el líder de el grupo de matones de esa escuela. Estaban tan estupefactos como debía de estar de aturdido HyoJong por la fuerza que impactó en su mandíbula.

Sin tiempo a una reacción, Jungkook tomó el antebrazo de Jimin con  suavidad, el tacto de sus dedos fríos como una pluma sobre la piel de Jimin lo hizo estremecer y antes de darse cuenta ambos se estaban moviendo fuera de la cafetería con Jungkook guiando el paso. Otra vez.

─Hey─llamó Jimin, fue ignorado─Oye imbécil mi desayuno se ha quedado en la cafetería y joder, suéltame, me harta que me arrastres por ahí como si nada.

Habló brusco, la molestia marcada en su voz. Jungkook lo soltó y suspiró entre agradecido y fastidiado, el tipo no conocía los límites o algo así.

─Te invitaré a desayunar en la cafetería de la esquina─simplifica, soltando su solución como si fuera la más obvia del mundo.

─¿Por qué iría contigo?, personalmente no me agradas Jeon—espetó, cruzando sus brazos sobre su pecho.

Ahí estaba esa postura a la defensiva.

─Irás porque quieres desayunar y volver no me suena como una opción, además tómalo como una compensación por lo de ayer—explicó y la verdad Jungkook esperaba que su tono no salieran tan demandante, no quería fastidiarla más aún con el más bajo.

─Así que eres de ese tipo─afirmó.

─¿De que hablas? ─cuestiona Jungkook frunciendo en entrecejo.

─De los que la joden y entonces compensan, debí imaginar que serías de esos.

─No se si ti comentario es para que me ofenda o me halague.

─Es para que te ofendas, te lo aseguro.

─Acepta la disculpa al menos─suplicó Jungkook, sus ojos oscuros fijos sobre Jimin, sus orbes brillaban como los de un cachorrito abandonado, Jimin se maldijo por dejarse convencer por algo así.

─Te disculparé si me ayudas a subir la escalera a mi casa─propone y definitivamente es lo mejor que se le pudo haber ocurrido, es un ganar ganar para él.

Jungkook sonrió complacido, ese era un buen trato.

─Lo haré aunque casi me rompes la nariz.

─Te queda ese estilo Jeon.

Soltó malicioso, las sonrisitas complices en sus rostros casi imperceptible mientras caminaba tranquilamente a la salida de la universidad, rumbo a desayunar juntos.

Jimin y Jungkook podían tener una interacción muy peculiar pero definitivamente, a pesar de todo, podía llegar a ser divertido.

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Hellsky | KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora