6 "Lo siento"

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Hyuck, necesito hablar contigo.

Uh...

Donghyuck miró con un poco de desconfianza a su hyung y el agarre que este mantenía en su muñeca.
No tenía problemas exactamente con él, no lo odiaba, no le tenía rencor ni nada del estilo. Solo se sentía un poco vulnerable en este momento, y el hecho de estar empezando a deslizarse a su little space no ayudaba mucho.
De todas maneras no sabría decirle que no, así que solo se resignó y respondió —Oh, claro, hyung ¿Qué sucede?

—Y-yo... Ugh ven, salgamos.

Doyoung tiró de su mano obligándolo a seguirlo hasta la entrada del edificio, pero antes de que pudiera tomar el pomo de la puerta el menor forzó su agarre desconcertado un poco al azabache.

—Yo... Hace frío, hyung.— dijo con un poco de pena.

Por la mañana salió tan rápido del departamento que olvidó tomar su abrigo, que seguramente se encontraba tirado en la entrada de la casa, por lo que solo vestía un bonito pijama blanco.
Su cuerpo se mantuvo gran parte de la mañana cálido gracias a Sungchan, pero ahora realmente podía sentir el frío calar sus huesos.

—Oh es verdad, estás solo en pijama, lo siento.— El azabache soltó su mano antes de caminar un poco hasta un sofá individual de la entrada, dónde habían varios abrigos esparcidos sin cuidado. —Toma, es de Jeno, pero el no saldrá hoy. Además, huele bonito.

El mayor lo ayudo a colocarse el abrigo, abrochandolo totalmente, tapando en el proceso un poco de su rostro ya que era bastante grande hasta para su dueño original.
Pero sí tenía razón, olía muy bonito, como a Jeno.

Era un aroma que lo hacía sentir protegido.

—Bien, salgamos.

Se mantuvo todo el camino en silencio, ni siquiera sabía a dónde se dirigían, solo dejó que su hyung lo guíe por la fría ciudad de Corea.
Sus mejillas se ruborizaron un poco al sentir como el azabache agarraba nuevamente su mano para cruzar las transitadas calles.

El destino lo sorprendió un poco. Doyoung lo había guiado hasta una cafetería a poca distancia de su edificio.
Solian ser clientes frecuentes de lugar, era cálido y bonito, además ¡Tienen las mejores galletas del mundo mundial! Con formitas y colores distintos, era muy creativo, Hyuckie lo amaba.

—Ven, sentemos allí.

Haechan siguió con su vista el lugar señalado por Kim; una bonita mesa alejada del resto pero al lado de una ventana con vistas a la ciudad.
Una sonrisa iluminó el rostro del menor y tirando de la mano de su hyung se encamino hasta la mesa.

Una vez sentaditos en el lugar elegido una camarera se acercó en busca de sus pedidos.

—¡Haechannie, Doyounggie oppa! Tiempo sin vernos.

—Oh, Yuna ¿Cómo has estado?

—Muy bien, el negocio ha crecido mucho en este último tiempo; ¿Ya saben que van a pedir?

—Mhg yo quiero..¡Un chocolate caliente y una galleta! Por favor.— pidió el menor con una amigable sonrisa para su noona.

—Claro que si, cariño. ¿Y tu, oppa?

—Un americano, por favor.

—Excelente, sus pedidos llegarán en unos minutos.
Una vez la fémina termino de tomar nota de sus pedidos se despidió con una pequeña reverencia y dos besitos soplados, cortesía de la tienda.

Yuna era algo así como una buena amiga. Se habían conocido hace un tiempo, poco después de debutar.
Ella siempre se mantuvo al margen de su "condición de idol" tratándolos con total normalidad y simpatía. Todos le tenían un cariño especial.

Doyoung siguió con la mirada a la azabache hasta que esta desaparecía en dirección a la cocina del local.
Regreso su vista hasta su acompañante; Donghyuck miraba a las afueras del café con una pequeña sonrisa en su rostro. Se lo notaba sereno, calmado, no obstante su mirada lucía cansada, las marcas violacias bajo sus ojitos tampoco ayudaban mucho.

Aquello lo hizo sentir muchísimo más culpable.

Se había comportado como un jodido idiota. Sus sentimientos habían explotado repentinamente sin siquiera importarle herir a su compañero. Solo desahogó su rabia y estrés en él.

Se aclaró la garganta decidido a hablar y disculparse de una vez por sus acciones. Lo ocurrido fue incorrecto, eso le quedó bastante en claro.
—Mhg Hyuckie, yo-

—No es necesario que lo haga, hyung. Sé lo que va a decir, y está bien.— el castaño giró su mirada en dirección al azabache, ofreciéndole un sonrisa de consuelo. —Yo fallé, lo reconozco. Todos estamos igual de cansados, solo fui débil y ya.

—¿Qué? No, no, Haechannie en serio yo lo lamento, no merecías para nada ser tratado así. Mark y tu han estado trabajando más que el resto, es normal que se sientan más cansados y y-yo... Yo no pensé en eso, solo explote y tu.. Yo... Lo siento mucho, en serio. Esto no volverá a pasar, bajo ninguna circunstancia.

Doyoung parecía realmente nervioso y arrepentido, hablaba de forma rápida, atropellando de paso sus palabras, logrando que sea un poco dificultoso entender todo lo que decía.

Donghyuck solo rió en bajo, apartando
la mirada con repentina pena.
Se sentía bien que su hyung se disculpe; un pequeño peso caía de sus hombros al saber que ya no se sentía enojado por su fallo, sino que al contrario sentía pena de haber perdido los estribos de aquella forma.

Él no era una persona rencorosa. Al contrario, ni siquiera podía estar enfadado por más de dos horas porque empezaba a sentirse triste, por lo que simplemente se permitió perdonar a su hyung, e intentar olvidar todo lo ocurrido. Después de todo deberían seguir trabajando junto, conviviendo y relacionándose quieran o no, era mucho mejor perdonar y olvidar, que recordar y sufrir...

¿Verdad?

.•°🧡°•.

LO SIENTO MUCHO (╥﹏╥)
Llevaba un ritmo de actualizaciones muy bueno, y de repente me bloquee. Y ahorita ando estresada por la escuela...
Pero espero que les guste el capítulo, aunque no llegue ni a las 1mil palabras :(

Si notan errores me avisan!! 🧡

Little Hyuckie // NCTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora