Midvale, National City, 2011
Un solo plan, pocas municiones, nada de comida mas que barras de cereal, eso tenían en su poder los Legends, sin embargo, eso no los detendría de luchar hasta que no les quedara más aliento para seguir. En dos días estuvieron poniéndose de acuerdo con respecto a los ataques y de cómo enfrentarse a los cazarecompensas que se toparan en el camino; porque iba a suceder. Tenían como desventaja el número, mas no les faltaba la inteligencia, eran pocos pero hábiles a comparación de estos, un par de pandilleros con un único interés, atrapar a Lena Luthor, no usaban más que la fuerza bruta. Cada uno pasó con su familia, nadie se veía afuera, solo deseaban compartir con ellos antes de marcharse, era como el Ejército, podrían volver, o no, todo dependía de lo que sucediera en el camino. Alistaron el mini bus con todo lo acordado, las granadas ayudarían a limpiarles el camino de los zombis, tenían una bazuca con un solo misil, era su arma secreta y que no dudarían en utilizar como último recurso. Utilizarían toda la gasolina que les quedaba, si en el camino necesitaran irse a otro rumbo tomarían otro auto. Kara no dejaba de pensar en lo mucho que necesitaban ganar, miraba las estrellas como si fuera la última vez que lo haría, sintió unos brazos alrededor de su cintura y suspiró recostado su cabeza en el hombro de Lena, también había estado muy callada, pasaba escribiendo muchas cosas en una hoja blanca, como si dejara todo planeado para que la humanidad volviera a surgir de las cenizas. La rubia acarició sus manos permitiéndose cerrar los ojos para tratar de sentir la brisa del mar, ya no se sentía como antes, por supuesto, hasta las maravillas de la naturaleza quedaron destruidas.
—Pronto amanecerá, cariño —le susurró Lena con una tristeza profunda.
—"Incluso en la noche más oscura terminará y saldrá el sol" —recitó Kara entre suspiros a Victor Hugo—, todo el esfuerzo tendrá que valer la pena, se lo debemos a nuestros hijos.
—Valdrá la pena, siempre la valdrá —se aferró más a Kara—. He hecho un esquema para que Brainy lo ponga a trabajar si… —se detuvo para tragar grueso—si no regresáramos.
—Regresaremos, tal vez no del todo intactos, pero lo haremos —se giró con lentitud para mirarla a los ojos—, Lee, si por alguna razón yo no vuelvo, me quedaría tranquila sabiendo que Lizzie te tiene a su lado, eres una madre para ella.
—Kara Danvers, vas a volver con nosotros, ¿sí? —le acarició el rostro con vehemencia— No te dejaré atrás aunque me disparen en los pies.
—Eres la mujer más hermosa que he visto en mi vida —la tomó del rostro con suavidad y la besó.
Permanecieron abrazadas largo y tendido rato, unas horas antes de que el sol saliera por completo, se acostaron para descansar un rato antes de que no volvieran a hacerlo en quien sabe cuántos días. Se ducharon, alistaron y despertaron a la pequeña Lizzie para que desayunara en casa de sus abuelos, ellos cuidarían de sus nietos hasta su regreso, lo mismo haría Samantha sin dudarlo. La pequeña se veía muy triste, sabía que sus madres estarían afuera, no podría verlas en mucho tiempo y, le dolía que no pudieran estar en su cumpleaños número siete, aunque estas le prometieron muchos regalos en su regreso. Los señores Danvers estaban afuera con una mirada perdida, comprendiendo muy bien la misión que tenían por delante, le dieron un sentido beso a las hermanas Danvers en sus cabezas y un abrazo muy fuerte que Lena también recibió, debían partir. Alex se despidió de Sam dándole erróneamente un beso en los labios, ambas terminaron sonrojadas, pero nadie se burló, abrazó y besó a la pequeña Esme y Ruby por última vez, comenzaron a caminar en silencio hasta donde se encontraba el mini bus, Brainy, Nia, Barry, John, la esposa de este, Lyla, Clark, Lois y Ava se despidieron de ellos con efusividad, los pequeños solo lloraban porque sus correspondientes padres se irían.
—Es hora de irnos, Legends —anunció Kara dejando que subieran primero, miró de soslayo a su familia y les sonrió con tristeza—, tenemos a un bastardo que hacer pagar.
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National City Z
Science FictionMetrópolis, Illinois City, 2000 En un laboratorio subterráneo en un punto muerto de la transcurrida Metrópolis City, dos grandes científicos se encontraban ocultos en sus penumbras y gélidas instalaciones, tenían un poco de frustración y maravilla e...