Capítulo 3

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Ahora Wanda se encontraba sola en el apartamento del Doctor strange. Estaba sentada en la mesa mientras navegaba en una laptop, ya que no tenía nada que hacer.

── "¿Cómo se encuentra tu corazón?" ──leyó con su voz una publicación que encontró── Mhm... Vengativo.

── La venganza es mala, mata el alma y la envenena ──Wanda se giro y vio a Wong── Espero no estés pensando como deshacerte de nosostros.

── No lo hacía, pero ahora que lo mencionas...

── Ya deja de meterle ideas raras, Wong ──apareció Stephen con las bolsas de compras.

Al ver a Stephen, la mirada de Wanda se tornó mortífera. El mago notó aquello, y suspiro exhausto. Temía que la bruja lo odie por el tema del matrimonio.

── Como sea, ahora no estoy de humor para deshacerme de ustedes.. tal vez luego ──la pelirroja deja de mirar a ambos presentes para regresar a ver que encontraba en la laptop.

El hechicero caminó hasta su compañero y le pidió de favor que se fuera, necesita hablar a solas con la bruja y tratar de solucionar ese pequeño problema.

── Claro, nos vemos ──Antes de abrir el portal ve como la pelirroja lo ve y se fija en sus ojos y ve como desprende un leve color escarlata en ellos── Alguien se saldrá de control. Strange, cuídala ──abre el portal y desaparece del departamento.

── Ah.. se supone que esto no debía pasar ──El azabache camina hasta la mesa y se sienta alado de la pelirroja── ¿Podemos hablar?

── Ya hablaron lo suficiente ──Wanda no le toma importancia a lo que le decía el contrario, pero ve como este cierra la laptop de golpe y la retira── Pobre aparato ──pensó.

── Te pido que no te molestes conmigo. Siento como si tu mirada me quisiese matar ──escucha cómo la mujer da una leve risa para después volver a estar seria.

── Y si fuera así... ¿Tiene algún problema con eso, doctor? ──la pelirroja se acerca y desprende de sus ojos el color escarlata sólo que esta vez es más visible.

── No ¿Por qué debería? ──debía admitir que la bruja sabía como intimidar a alguien, pero él no estaba intimidado por ella en ese momento── Tú no puedes matarme.

── ¿Eso crees? ──da una pequeña sonrisa y mueve su mano desprendiendo su magia── Intentemos, a ver quien sobrevive ¿Qué dices?

── No haré tal cosa ──sentencia con seriedad y se aleja de la mujer y se levanta de la mesa para ir hasta el ventanal── Sólo quería decirte que todo esto fue repentino. Sólo acepté por tu bien.

── ¿Mi bien? ──se levanta de la mesa y camina hasta el hechicero── Yo no veo algo bueno de esto.

── Acepté porque no quiero verte encerrada en el santuario. Es preferible que estés conmigo, ambos nos cuidamos y vigilamos, además de que tienes libertad de ir donde quieras.

── ¿Sólo por eso debemos casarnos? Ni siquiera te amo o algo parecido. Además paso un tiempo de lo sucedió en westview, no estoy lista para casarme. ──al terminar de hablar agacha un poco su cabeza.

── Maximoff ──la voz del hechicero sonó algo molesta cosa que hizo que la bruja se tensara── Lo sé. Sé todo por lo que has pasado, pero mira el lado bueno ──se gira y ve a la pelirroja con una expresión seria── No tienes de otra más que aceptar.

La pelirroja no sabía que decir, mordió suavemente su labio bajo después de un rato lo soltó, y dio un suspiro para terminar aceptando aquel asunto del matrimonio.

𝘽𝙚𝙝𝙞𝙣𝙙 𝙩𝙝𝙚 𝙢𝙖𝙧𝙧𝙞𝙖𝙜𝙚 [ScarletStrange]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora