3:00 𝙋. 𝙈.
Kathy está trabajando solo que no en el área que le toca. Está haciéndose encargada de mover el tráfico en una área al sur de Bangkok. Parada horas bajo el sol con su cabello (mojado por sudor) atado dentro de un sombrero milagrosamente con fleco extra, un chaleco de brillos neones verdes y guantes negros sin dedillos. Botas masculinas bien puertas con unos pantalones que ajustan todo de ella.
A una esquina de la carretera ella se encarga de darle señales a los autos de a dónde ir.
Un auto estaciona desenfrenado a un lado de ella. Afortunadamente al lado de una cera que va en escalada hacia abajo templado de césped. A la detective le basta con tomar una sola ojeada del auto antes de suspirar agotada, mirando de nuevo a los autos que debe liderar.
Pues de ese auto recién llegado se baja el policía First. Sí. Ese que estaba investigando esta mañana las muertes de la piscina. Camina determinado hacia ella con las manos en ambas caderas.
—¿Qué haces aquí, Kathy? — Pregunta súper serio mirándola mortal.
—No creo que sea de tu incumbencia ¿O sí?
—Esta no es tu área de trabajo y lo sabes. Eres la policía de ese niño no yo.
—Pues tendrán que reasignarte el caso. No puedo seguir con el suyo.
—Y por qué no, dime.
—Vaya. Ojalá hubieras sido así de serio para nuestra cita.
—¡Eso...! — Él presiona sus ojos a cerrarse súper frustrado mordiendose el labio inferior. Ella sigue guiando los autos por donde debe de lo más normal. Ya acostumbrada. —Eso fue un error. Lo siento. Pero no tiene nada que ver con que abandones el caso de un niño del cual me contabas confiaba en ti. ¡Préstame atención de una bendita vez, mujer!
—¡Oye voy que los autos no paran, no soy yo! — Ella se defiende gritando para atrás y mirándolo.
Entonces un auto se desvía del camino por el cuál debía ir. —¡Señor! ¡Señor! — Ella se da la media vuelta siguiendo el auto desviado con la mirada. Al verlo alejarse de la carretera por un camino de la perdición observa desamparada el auto. —¿Ves lo que me hiciste hacer? Si aparece un auto con un anciano muerto cerca de un río diré que fue tu culpa. — Dice la detective con un semblante serio a pesar de que lo dicho suena como una broma. Mirando al detective.
A First se le es inevitable soltar un bufido antes de reír.
—Qué ¿te parece gracioso que alguien vaya morir? No te verán a ti me verán a mí. — Ríe la detective entrando en un humor inevitablemente. Ella desvía el rostro mientras ríe.
Afortunadamente han dejado de venir autos mientras ella está distraída. De repente las risas de ella se convierten en lamentos. Comienza a llorar. Su cuerpo a moverse con los sollozos. Se limpia la nariz con una mano aún sin girar la cabeza, pero First deja de reír tan pronto la escucha lamentarse. Camina hacia ella sujetando a la misma por los laterales de sus brazos.
—Oye, oye.— Llama pausadamente First. —¿Qué pasa?
—Es que — La chica llora. Estirando rígidamente la cornisa de su boca para atrás con mucho dolor. El mismo gesto temblando por el llorar. —quiero ayudar a ese chico. Realmente que sí. Pero alguien que mató a mi compañera me amenazó... ¡Amenazo con matar a todos, First...! — Al fin conectan ojos aunque ella sigue llorosa. —Y no quiero que nadie más muera. No quiero. Dijo que si yo seguía con el caso morirían más personas.
—Así que por eso no quieres... — Dice First ahora con más entendimiento.
—Lo siento. — Ella llora.
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DIARIOS DE UN MÚSICO • ZEENUNEW
Mystery / Thriller🎻 𝙇𝙖 𝙝𝙞𝙨𝙩𝙤𝙧𝙞𝙖 nos cuenta un caso escolar que recibe la policía Rivera dónde un chico de dieciséis años llamado Charm NuNew, el mejor chelista de la clase, fue abusado sexualmente en grupo y sus piernas destruyeron hasta inmovilizarlas. Él...