En busca de un papá para mi bebé (Hanchul)

Capítulo 7.

Lo acomodo con cuidado en sus brazos, lo llevaría a su habitación si amanecía en el sillón seguramente tendría una contusión y el culpado seria el, además el chico no pesaba y le fue fácil subir las escaleras cargando su frágil cuerpo. Aun lado de la habitación del pequeño Heebum se hallaba el cuarto del mayor. Le dio una pequeño empujón con el pie a la puerta para que se abriera, esta cedió de inmediato camino hacia la cama recostando de inmediato a Heechul en ella, con cuidado lo cubrió con una fina sabana el chico seguía profundamente dormido.

-Ya es demasiado tarde- susurro mirando su reloj, se le había ido el día en compañía del otro, aun así no se arrepentía se acercó al cuarto del pequeño Heebum y revisar si él bebe se encontraba bien, respiro tranquilo al verlo dormir profundamente, al parecer se despertaría hasta el día siguiente.

Heechul se despertó, incorporándose noto que estaba en su cama ¿Cuándo había pasado que no se dio cuenta? Al quitarse la sabana de encima noto la frialdad de la noche, ¡Dios Heebum! Se levantó como un resorte y corriendo por el pasillo abrió la habitación de golpe, el niño se encontraba cubierto por una gruesa manta, el frio no le molestaba en lo absoluto, suspiro aliviado, pero otra duda regreso a su mente ¿Qué habrá sido de Hangeng? Bajo hacia la cocina y lo que vio le preocupo, en efecto la manta que tenía Heebum era la que se encontraba en el sillón por lo que el pobre rubio temblaba dormido.

Con rapidez se acercó a el —Hangeng despierta por favor- susurro con suavidad haciendo que el rubio se removiera —despierta...- el chico por fin abrió sus ojos con dificultad, Heechul le sonrió cálidamente —vamos, arriba, dormiremos juntos hace demasiado frio- el contrario aturdido asintió y así los dos caminaron al cuarto del mayor, llegando a la cama, el chino se dejó caer, el pelirrojo acomodo sus rojizos cabellos jalando una cobija lo cubrió y después se acomodó junto a él para dormir.

Estaba calientito acurrucado apretando algo con suavidad, el bultito que tenía en brazos estaba cálido, suave y olía a fresas, se aferró más a él notando como se removía desesperado, abrió los ojos de golpe para encontrarse con la cara de Heechul, tenía el ceño fruncido y los labios apretados —¿Eh?...- fue lo único que le salió de su boca —Buenos días- saludo después de oír el carraspeo del contrario —¿Me sueltas?- pregunto el chico, se sonrojo de inmediato al ver que en esos 5 minutos seguía abrazado de él —Lo siento- susurro apenado, ¿Cómo carajo había llegado a cama del mayor? Él sabía que se había quedado en el sillón después de arropar al bebe, se quedó se incorporó quedando sentado en el colchón —¿Cómo llegue aquí?- pregunto en voz alta —Yo te traje, hacia demasiado frio y no podías dormir en el sillón sin congelarte- vio como el pelirrojo caminaba buscando ropa —Me daré una ducha- anuncio entrando al cuarto continuo —Yo hare el desayuno- grito bajándose de la cama, antes pasaría por el cuarto de Heebum para ver que no necesitara nada, ya después prepararía algo, se sentía muy incómodo, su corazón no dejaba de latir con fuerza.

                                 

Heechul se metió dentro del chorro de agua, su cuerpo se relajó al sentir lo cálido que era estar debajo de la regadera, su corazón aun latía salvajemente después de lo acontecido, sus mejillas se sonrojaron al recordar lo ocurrido, cuando despertó tenia abrazado al rubio de la espalda, su cuerpo era tan cálido y duro que lo hacía sentir protegido, asustado de su forma de actuar y los pensamientos de ese momento lo soltó quedando a espaldas del colchón pero no conto con que el chino al no sentirlo lo abrazaría posesivamente; se veía tan lindo durmiendo, era sumamente atractivo, no se había dado cuenta de ese gran detalle. Trato de despejar su mente de esos pensamientos poco apropiados y continuo su ducha.

Con él bebe en brazos Hangeng se paseaba por la cocina, dijo que haría el desayuno pero al parecer ese pequeño comelón tenía hambre y debía alimentarlo primero, vio bajar a Heechul por las escaleras secando su cabello rojizo —Este pequeño es demasiado tragón- comento haciendo que Heechul se acercara a él para retirarlo de sus brazos —Lo sé, dame la mamila para que puedas preparar el desayuno- vio cómo el contrario tomo lugar en el sillón para alimentar a Heebum, se colocó un delantal azul que estaba sobre la mesa y comenzó a preparar el desayuno.

-Vayamos al parque- comento Heechul casual después de colocarle un adorable trajecito de gato a Heebum, -Vayamos- respondió Hangeng el mayor se sonrojo, se lo había dicho a su pequeño hijo realmente pero el escuchar la respuesta afirmativa del rubio lo hizo sonreír, su corazón no dejaba de palpitar después del desayuno que compartieron y mucho mas de haber acabado de duchar al bebe, Hangeng era una persona extremadamente amable sin contar lo atractivo pero aun así no dejaba de pensar en Kibum, no le contestaba las llamadas y no le quedo más que preguntarle a su cuñado que alegaba que su esposo estaba bien, ahora tener al chino en casa lo hacía sentir bien pero no quería confundir sus sentimiento y acabar haciendo una locura producto del dolor y el despecho.

Pasaron los días, Hangeng volvió a la universidad aun así después de clases continuaba yendo a ver al mayor y al lindo bebe, la preocupación por el pelirrojo era demasiada, Heechul decía estar bien pero no era cierto, había adelgazado y casi no dormía, sus ojos no tenían ese brillo que los caracterizaba las ojeras adornaban su cara y su piel era aún más pálida de lo normal, su esposo no daba rastros de aparecer y en las noches podía escuchar como el chico se encerraba a llorar, no sabía qué hacer para ayudarlo.

-¿En serio? Oh muchísimas gracias Leeteuk-hyung sé que Heechul necesita una noche de relajación- sonrió colgando el celular, le había pedido a la Omma del pelirrojo que se encargara esa noche del pequeño bebe el trataría de hacer que el ánimo del chico mejorará, no sabía exactamente que debía hacer pero esperaba que funcionara, le partía el corazón ver a Heechul así.

Tomo en brazos a Heebum empacando todo lo que necesitaba en su pequeña pañalera, mientras Heechul dormía profundamente lo iría a dejar con Teuk para después encaminarse al centro comercial y comprar todo lo necesario para esa noche no había planes ocultos detrás de eso, solo una creciente preocupación y cariño hacia el mayor, porque amor no era, en lo absoluto. Jamás. 

Hola, me alegra mucho que les guste historia >o< espero sigan comentando que les parece :3 seguire actualizando con regularidad. <3