Obsesión Daddy #2

Capitulo 15

Pov: Grabiel

He estado bastante inquieto desde que vi a mi hija con esos moretones. Obviamente Rose no sabe nada no quiero verla mal por todo esto. Sabía que podía pasar, pero no pensé que llegara a este nivel. Me ha declarado la guerra. Rose sigue viendo a Emanuel como la persona que la trato de ayudar. Yo solo lo veo como un idiota. Toco a mi hija y eso no lo perdono. Me encontraba pensando en esto mientras veía a Rose jugar con nuestro hijo, más bien le hacia muecas. Mi hijo es hermoso, sé que robará el aliento de muchas y se que mi hija le roba el aliento a cualquiera. Es una belleza andante, totalmente buena y fuerte.

—Amor ¿Estas bien?— Escucho unas palabras de Rose y la miro con una sonrisa.

—Esta todo muy bien amor.

—Hay algo que me preocupa.

Escucho eso y me mantengo alerta, ¿Qué le preocupa? No quiero que nada le pase.

—Mi hija.

Escucho eso y respiro hondo, a mi me preocupa quiero sacarla, de verdad quiero y la iba a sacar pero sabía que casi sería imposible mientras mi hija no pueda moverse.

—¿Por qué te preocupas?

—Siento que le paso algo Grabiel, lo siento en el pecho.

Me quedo mirándola sorprendido, ya podía sentirlo era demasiado pronto. Aunque con el dolor que siente nuestra hija es normal.

—Nuestra hija esta en peligro Rose.

Le miraba mientras veo como ella me mira seria y confusa.

—¿Qué me quieres decir? ¿Qué sabes que yo no sé?

—Nuestra hija esta siendo maltratada por Emanuel.

Veo su mirada negando lo que sucedía, ¿Cómo era posible? ¿Sentía algo por Emanuel aún? No entiendo.

—¿¡Por qué no me lo dijiste!? Mi hija esta en peligro y yo aquí contigo como si nada.

—Tienes que calmarte.

Digo algo cansado, estaba desesperado. No sabía que hacer por que para el colmo Emanuel tuvo que saber que estuve allá.

—Mi hija esta en peligro y no sabía nada.

Veo como sus ojos empiezan a cristalizar y yo sin esperarlo dos veces me acerco a ella para abrazarla de forma protectora. No la quiero hacer sufrir, debo protegerla. De todo lo que le haga daño, la miro a los ojos al ver que ella alza su mirada para verme.

—Vamos a ayudarla, solo hay que esperar.

—¿Esperar a que él la viole?

Trago en seco al escuchar esas palabras, ella no sabe todavía que eso ya paso y de la peor manera. Cuando iba a contestar, siento la presencia de Emanuel atrás mio y me volteo protegiendo a mi mujer e hijo.

—¿Qué haces aquí? Emanuel.

—Vengo a advertirle a tu esposa y a ti que no se vuelvan a acercar a Violeta.

Se veía mas poderoso que antes, veía como sus músculos estaban marcados. Sus rasgos estaban mas pronunciados eso quiere decir. Qué todos estos años él se preparo para esto. Sé que ahora mismo soy más poderoso que él pero lo que me mata es que tengo a mi hijo y mi esposa a mi lado.

—Es mi hija Emanuel. ¿Qué le has hecho? ¿Por qué le estas haciendo daño? Tu no eras así.

—Cierto no lo era.—Comienza a hablar mientras camina hacia el lado derecho mirando el cuarto de mi hijo. —Pero tu hija es mi compañera de vida y pase muchos años sin ella, no me quiero imaginar si Grabiel se hubiera sentido así. ¿Qué hubiera pasado? Tu sabes como es esto Grabiel. No quiero que nadie la separe de mi lado. Por suerte no te encontré en mi casa. Te hubiera atacado y lo sabes.

Veo como Rose me mira confundida ella no sabía que había salido a ver a Violeta.

—Mi hija Violeta, va a salir de tus brazos. Eso te lo aseguro. La venganza que te hará será muy dulce.

Le digo mirándolo serio, tomaba de la cintura a Rose mientras nuestro hijo estaba detrás de nosotros en su cuna. Emanuel nos mira con una sonrisa perturbadora y diabólica por así decirlo.

—Violeta, estará conmigo quiera o no quiera. Así mismo como tu enamoraste a tu Rose. Yo enamoraré a tu hermosa hija Violeta. La cuál pronto se casará conmigo. Ya lo verán.

Me estaba poniendo furioso en ese momento. Veo como Rose iba a acercarse para darle una cachetada pero la aguanto. No voy a permitir que él piense en lastimarla.

—Bueno futuros suegros, me tengo que ir. Mi hermosa mujer me esta esperando, creo que esta noche le haré saber que es mía.

Veo como se ríe y yo iba a golpearlo pero cuando lo iba a hacer el desapareció. Escucho un sollozo y me volteo rápidamente a ver a mi Rose arrodillada en el piso mientras tapaba su cara hermosa con sus manos. Me arrodillo con ella y en frente de ella para abrazarla.

—Nuestra hija Grabiel, yo no quería que le pasara esto.

—Yo tampoco quería Rose, pero nuestra hija es fuerte y sé que lograra de irse de ese hombre.

—¿No lo escuchaste? La quiere casar con él. ¿Qué viste cuando la visitaste? ¿Como estaba?

—Amor creo que eso...

—¡QUE ME DIGAS!

Dice mirándome con una mirada determinada, la fuerza que saco en esas palabras era bastante sorprendente.

—La vi mal, él la trato muy mal.

Solloza y se levanta mirando a Ethan en su cuna después me observo con seriedad.

—Hay que hacer algo. Quiero hablar con ella, no será fácil lo que pasará ahora. Ella puede ser muy fuerte pero es frágil en sentimientos.

Dice mientras me miraba seria, me levanto también con seriedad y la tomo por la cintura de manera posesiva.

—Yo a ti no te voy a arriesgar.

—Pero Daddy sabes que es mi hija y que hare lo que sea para ayudarla.

—Mi linda baby girls también te recuerdo que es hija mía y estoy haciendo lo imposible para ayudarla. Esto puede crear una guerra entre él y nosotros. Es su pareja de vida se supone que yo no me meta por que estoy violando una de las leyes de los carpatianos y mírame defendiendo y tratando de ayudar a nuestra hija.

Veo su sorpresa pero a la vez su tristeza, le beso la mejilla y la abrazo sin más.

—La vamos a ayudar, eso te lo aseguro...

Te quiero hija mía...

Me encanto este capítulo, La relación de Rose y Grabiel. Volverlos a recrear me hizo recordar mi primera novela. Tan hermosa y espero que la hayan podido leer.

¡Los quiero y gracias por todo!

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