Obsesión Daddy #2

Capitulo 8

Pov: Violeta Rivera Santana

Bajaba del avión, respirando profundo. Sentía que volvía a tener libertad. Ya no tendría que escapar de nadie. Cuando termino de bajar del avión me hecho a un lado viendo a Gael mirándome con una sonrisa.

—¿A dónde vamos primero?.

Pregunta mirándome y sonriéndole contesto.

—A casa de Rose y Grabiel.

Digo diciendo el nombre de mis padres con orgullo, viendo como se estaciona un auto frente mio y Gael me abre la puerta. Agradeciendo entro, busco mi celular en mi bolsillo. Gael me había cerrado la puerta y ahora arreglando mis maletas en el baúl.

Mientras miraba instagram y esas redes veo un mensaje de una persona desconocida llegarme.

—Llegaste mi pequeña angel.

Me quedo mirando el mensaje y mi mirada se vuelve seria. Tenía que apresurar el paso a casa de mis padres. Veo como Gael se sienta a mi lado cerrando la puerta.

—¿Qué sucede?.

Dijo al ver mi mirada, le hecho una mirada a mi chofer y este empieza a conducir.

—Sabe que llegue.

—Bueno, siendo él jefe de la mafia de aquí. Tiene que saberlo.

—¿A él lo vamos a ayudar?.

Digo alzando una ceja, mientras sostenía el celular en mis manos.

—Si, parece que nos necesita.

Me rio bajo mientras empiezo a ver el camino, estaba casi todo como lo recordaba. Mis padres siguen viviendo donde siempre. Ellos acaban de tener un bebé. Si soy hermana a los 20 años de edad. Es nene se llama Michael Rivera Santana. Es curioso, apenas acaba de nacer hace 2 meses. Mis padres cuando se enteraron que venia estaban muy emocionados. Volteo mi vista al celular y busco el mensaje para responder.

—Claro, ahora más fuerte que nunca.

Le doy a enviar y apago mi celular ya estábamos por llegar. Me muerdo el labio suavemente, hace tiempo no los veía estaba completamente nerviosa. Aunque firme como una piedra.

—Todo saldrá de maravilla.

Dice Gael y yo mirándolo sonrío.

—Estoy nerviosa, años sin verlos. Conoceré a mi hermano. Es increíble, aunque un poco triste por no ser una adolescente normal en mi tiempo.

Digo mientras siento como el toma mi mano mostrando apoyo.

—Siempre estaré contigo.

Dice sonriendo, dato curioso, no tiene familia nunca me ha hablado de eso. Solo tiene una pequeña obsesión con una sirvienta de la casa. Espero que no se agrande.

—Yo también para lo que necesites.

Digo amablemente y volteándome veo como habíamos llegado a la casa de mis padres, Gael me suelta mi mano y se baja del auto para esperar a que yo baje. Suavemente bajo y el me ofrece su ayuda. Con mucho gusto se la recibo.

Veo a mi mamá en el jardín con papá y mi hermano en sus brazos. Una hermosa familia, sonriendo caminando hacia dónde ellos veo sus caras al verme llena de felicidad. Caminan hacia donde mi. Me quedo parada frente a ellos, temblaba de la emoción. No tenía idea de que decirles.

—Hija.

Veo a mi madre quien me llama, mientras tiene a mi hermano en sus brazos.

—Madre.