𝙖𝙣𝙤𝙩𝙝𝙚𝙧 𝙡𝙤𝙫𝙚; 𝘢𝘴𝘩𝘵𝘳𝘢𝘺 ➜ 𝙥𝙖𝙪𝙨𝙖𝙙𝙖

𝑡ℎ𝑟𝑒𝑒；𝑦𝑜𝑢 𝑑𝑜𝑛'𝑡 𝑢𝑛𝑑𝑒𝑟𝑠𝑡𝑎𝑛𝑑

POV: Ivanna Bennet *ੈ✩‧₊˚

Entorné los ojos para confirmar mi teoría, la chica que había fuera era mi hermana, la que supuestamente estaba en rehabilitación, con su mirada perdida y su cabello desordenado.

Rápidamente salí en su búsqueda, enredando mis brazos en su torso mientras ella me rodeaba con los suyos, había echado de menos esto.

—¿Cuando has vuelto?—Le pregunté, aún sin querer despegarme de ella.

—Está mañana. Se supone que era una sorpresa pero cuando llegué a casa no estabas y sabía que ibas a estar aquí.—Hice una especie de mueca, odiaba con toda mi alma el hecho de que Rue me conociera tanto.

—Te odio.—Solté, mientras me aferraba más a ella con una sonrisa, esta vez no iba a dejarla ir, no iba a soltarla y no iba a dejarla caer, no de nuevo.

—¿Qué ha pasado para que no volvieras a casa?—Mierda. Hice una mueca, al igual que Fezco, quien decidió entrar al lugar, supongo que con la intención de dejarnos hablar solas.

Era la tercera vez que relataba todos los hechos y estaba empezando a hartarme.

Pero lo que más me consumía es que ni siquiera sabía cómo iba a demostrarle a Maddy que yo no le había pedido a Nate tal cosa.

Y quizá Rue podía ayudarme con eso.

—Ni puta idea.—Me contestó cuando se lo pregunté.—Yo te recomendaría decirle a Fez que lo amenace o algo.—Definitivamente, no iba a hacer eso.

—¿No puedo grabarle confesándolo? Como en la película que vimos aquella vez con mamá y...

—Puedes intentarlo, pero como tú hermana mayor, es mi deber decirte que la vida no es como las películas, y Nate Jacobs no es idiota.—Fruncí el ceño, esto iba a ser más complicado de lo que pensaba.—Pero no dejes que te consuma, Evie, en vez de estar depre por eso, dale al coco y piensa como vas a hacer para demostrar tu inocencia.—Me dijo, mientras me daba un golpe en la cabeza.

Rue, consejos vendo pero para mi no tengo.

—Ya lo sé, Sherlock, pero no puedes pedirme que no me preocupe si estoy puto sola.

—Relájate y déjalo fluir.—¿Cómo tú?—Como yo.

—Ni te creas que voy a drogarme.

—No decía eso, imbecil, pero date cuenta que si tus propias amigas no te creen, quizá no son tan amigas tuyas.—Esa fue su última frase antes de entrar a la tienda, me apuesto el cuello a que iba a joder a Ashtray.

Aún que mi hermana fuera una drogata, quizá esta vez tenía razón.

Iba a intentar aclarar las cosas con Maddy y si no confiaba en mi, ya no podía hacer nada más. Pero también pensaba intentar lo de grabar a Nate.

Estaba tumbada sobre mi cama. Hacía ya un rato que había vuelto a casa junto a mi hermana, no le había contado nada de lo sucedido a mi madre ni a Gia, simplemente había dicho que me emborraché y pasé la noche en casa de unas amigas. Estoy castigada una semana sin salir, y mamá ha pedido por internet un móvil nuevo que debería de llegar mañana. Lo iba a pagar yo misma con mis ahorros, que por suerte eran muchos.

Había cogido mi ordenador portátil para ver alguna serie, aún que acabé pidiendo libros por Amazon, ya que había abierto la hucha, ¿por qué no invertir ese dinero?

Aún que no podía negar que echaba en falta la compañía de ciertas personas, quería leer fanfics con Kat, experimentar con las paletas de sombras de Maddy y hacernos peinados con Cassie. Quizá también llegué a echar en falta el olor a sandía del vaper de BB.