¡AAAAH! Qué tal lectores? Cómo ha estado despúes de tanto tiempoo? ;n; les debo una enorme disculpa por la inactividad, pero me juré a mi misma que durante estas dos semanas de vacaciones volvería a escribir. No me he recuperado anímicamente del todo, pero tampoco quería dejar este fic inactivo para siempre :,) <3 ustedes se merecen lo mejor. Gracias por seguir dándole apoyo a esta historia, neta que eso me da muchísimas ganas de seguir escribiendo. RECUERDEN QUE LOS QUIERO MUCHÍSIMO ❤💖🤧 Y sin más que agregar, disfruten de este capítulo (❁'◡'❁)('▽'ʃ♡ƪ)
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El tráfago urbano y el mundanal ruido al que Meta Knight se había acostumbrado con el tiempo, iniciaban a mezclarse para crear una bomba atómica de ansiedad y emoción. La felicidad pintaba el aire como si de un lienzo blanquecino se tratase, dándole la total libertad de invadir a todo aquel que estuviese enterado del Festival de Invierno.
20 de diciembre... el día en el que hasta los más introvertidos salían a embelesarse con los regalos que el evento tenía para ofrecer. Comida, música de cámara, juegos tradicionales, espectáculo de luces... Un paraíso en la tierra de los sueños.
Con los años, los juegos artificiales fueron prohibiéndose para evitar contribuir a la contaminación acústica, siendo reemplazados por el espectáculo de luces. Además, de este modo incluso las personas con autismo podían disfrutar del festival sin que sus oídos saliesen lastimados.En fin, el caballero, se encontraba corriendo de un lado a otro haciendo encargos entre los distintos puestos que alegraban el lugar. Las personas comenzaban a llegar a pesar de ser relativamente temprano, así que como buen caballero debía desempeñar su labor de la manera más pulcra posible.
Por ahora, había dejado a Kirby al cuidado de sus "tíos" Blade y Sword, quienes disfrutaban de su día libre. Meta Knight quería trabajar al menos una parte de ese día para no sentir aquella sensación de inutilidad que tanto detestaba. Quería ayudar y hacerle saber a todos que era un gran caballero, que sin importar la circunstancia podían solicitar su presencia.
El sudor comenzaba a derramarse por su frente, manifestando el cansancio que poco a poco se instalaba en su cuerpo. Sin embargo ¿Qué sería de un caballero que muestra su cansancio? ¡Nada! Y Meta Knight lo sabía. De todas formas, no había nada mejor que un bonito recuerdo para recuperar energías.
—¡Señor Meta Knight! —Gritó uno de sus exalumnos desde una distancia considerable. Sword, ese jovencito vibrante de energía al cual quería como uno de sus hijos. Corrió como si un monstruo de 400 metros le estuviese persiguiendo, acercándose hasta su mentor con una brillante sonrisa. — ¿Qué tal está? ¿Ya terminó de trabajar? Son las cuatro y media, señor, debería acompañarnos a jugar canicas y ganar algo para Kirby. —Exclamó cuan infante contándole su día escolar a su tutor, acomodando al pequeño bebé que traía en brazos.
—¡Oh... Sword! No, aún no termino de trabajar. Quiero quedarme al menos hasta las 6. Sino, sentiré que he malgastado mi día y no quiero sentir eso, al menos no hoy. Y... creo que estoy bien, aunque ¿Cómo está Kirby?
—¡Él está muy bien! ¿Verdad mi niño hermoso precioso? —Inquirió con ese tono jocoso y cálido que siempre le caracterizó, haciendo muecas tontas para entretener a su "sobrinito", provocando que este mismo soltase risillas llenas de inocencia. —¿Lo ve?
—Sí, sí... —Meta Knight sonrió orgulloso, sintiendo que su corazón latía de puro amor y ternura. Escuchar a Kirby reír era lo único que necesitaba en un día tan ajetreado como ese. — Por cierto ¿Dónde está Blade?
—Ah... pues no sé, de hecho la estaba buscando. Dijo que iría por algo de comer, pero la perdí.
—¿Me estás diciendo que acabas de perder a tu futura esposa? —Le cuestionó utilizando su mítico acento de "Padre soltero".
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Un padre soltero
Roman d'amourDisclaimer: Todos los personajes utilizados en esta historia están humanizados. Meta Knight siempre fue descrito como un caballero de personalidad fría e insensible. Sin embargo, ni siquiera él entendía por qué. Nunca sintió que algo le hiciese falt...