¿Me recuerdas? [Finalizada]

Capitulo 16

—Señor, le estoy comentando que algún terrorista, ladrón, lo que sea que haya sido quemó media escuela para robarnos —Explicaba el director con frustración— Hagan algo, estamos asustados por que pase nuevamente —Dijo señalando a algún que otro alumno que veía la escena con curiosidad.

—¿Que van a querer robarle? —Preguntó el oficial — Mire, veámoslo por el lado lógico, un par de estudiantes querían hacer una travesura, vieron sus licores y quisieron beberlos, uno de los estudiantes quiso jugar con uno de sus encendedores que tenía guardado en su cajón de escritorio, el encendedor se cayó al lado del licor y se empezó a incendiar por lo que ellos escaparon —Dió una explicación sin ninguna prueba, probablemente se quería largar y darse una siesta.

—¿Y usted cómo está tan seguro? —Cuestionó el director con enojo —Está diciendo disparates sin ninguna prueba.

—No se si usted lo sabe, pero no es correcto tener licores en un instituto —Terminó el tema para luego decir —¿Tiene un seguro? Esto le costará bastante —Dijo mirando al rededor, todo un desastre a causa del fuego.

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Las tres chicas se habían puesto una que otra prenda rara pero era bastante cómoda por la cual no se quejaban, la ducha que se habían dado hace un rato no fue muy relajante pero al menos se quitaron la basura que les habían lanzado al llegar.

—Esta falda es muy cómoda a pesar de que sea de un tono tan deprimente como el negro, el cinturón celeste fosforescente lo arregla un poco... —Dijo la rubia acomodando su playera que estaba un poco rasgada y la hacía ver una parte de su abdomen.

—Si llegas a tener la necesidad de correr se te van a ver los calzones Miyako —Advirtió la azabache que llevaba unos pantalones militares, que para su suerte le quedaban perfectos.

—Ya lo pensé antes Kaoru, por eso siempre llevo unos shorts abajo, son de emergencia —La rubia se giró a mirar a su amiga que para su sorpresa llevaba un top blanco que no alcanzaba a ser blanco a causa del polvo, y un poco escotado. —Nunca te he visto con un top, pensé que no te gustaban —Dijo curiosa.

—Siguen sin gustarme, es lo único que había para mi mala suerte, me siento expuesta —Reclamó la azabache con mala cara.

—Agradece que nos acogieron aquí, nos dieron la oportunidad de bañarnos y darnos ropa nueva, no cualquiera hace eso por un desconocido —Respondió la pelirroja terminando de abrocharse un corset al rededor de su cintura, no muy ajustada, su idea no era verse delgada.

—No me estoy quejando... —Negó Kaoru, para prestarle atención a lo que rodeaba la cintura de su amiga —¿Por que te pones eso? —Pegunto con curiosidad.

—Es... es cómodo —Mintió— Haces muchas preguntas Kaoru —Reprochó para terminar de cerrar el corset.

—¡Está bien! No seguiré preguntando —Alzó las manos en forma dé inocencia.

Momoko ocultaba una gran cicatriz en su estómago que fue causa de uno de los ataques de ira de su madre, cuando tenía 5 años la pelirroja faltó a sus clases de matemáticas para salir a jugar y a cambio de eso su profesora renunció a seguir enseñándole causando la rabia de su madre que la lanzó por las escaleras haciendo que uno de los jarrones se quebrara y causara esa cicatriz. Odiaba tener que aceptar que esa cicatriz la tendría por el resto de su vida, y que cada vez que la veía en el espejo le causara un nudo en la garganta, esta era una de las más grandes que tenia y la que más odiaba, era la que demostraba lo mierda que fue su infancia.