La Voz Del Amor

15

Chat se sentó en el Gran Salón solo. Los sirvientes colocaron comida y bebida frente a él, cumpliendo con sus tareas. Marinette se había quedado dormida, y para asegurarse de que no la molestaría de nuevo, se había vestido y había dejado su dormitorio. Ella era demasiado tentadora como para no tocarla, y él ya la había tocado lo suficiente esta mañana.

Bebió la sidra caliente, pero apartó el tazón de papilla. No tenía hambre.
Tenía demasiado en mente. Zoe era terca, muy parecida a él, aunque hubo un momento en el que ella escuchaba, o al menos hablaba con él, y él contaba con que ese momento volvería.
Lo que más le molestó, después de pensarlo, fue lo inflexible que había sido Wayhem sobre casarse con Zoe y luego amenazarla cuando ella se negó.
Algo no parecía bien, y le preocupaba.

— ¿Te importa si me uno a ti? —Chat levantó la vista para ver a Luka de pie
allí, y le hizo un gesto de asentimiento al banco frente a él.

— ¿Mi hermana está bien?

Luka asintió— ¿Y la mío?

Chat tuvo que respetarlo. Con dos palabras y sin amenazas, Luka había
dejado claro que no era de la preocupación del otro mientras las mujeres fueran bien tratadas.

—Ella está bien—le dijo Chat.

—Se desmayó ayer.

Chat le diría que no era de su incumbencia, pero que no quería que Luka hiciera lo mismo cuando de Zoe se tratara

—Alix me asegura que está bien.

—Bueno. La acabo de encontrar. No quisiera que le pasara nada antes de
tener la oportunidad de conocerla mejor—dijo Luka y llenó una jarra de
sidra caliente.

—Entiendo como te sientes. Ha pasado demasiado tiempo desde que he visto a mi hermana.

—Entonces, ¿no te importaría si Zoe y yo nos quedamos aquí hasta que
nazca tu bebé? Creo que ayudaría a la situación no alejarla de la familia tan
pronto, mientras me da la oportunidad de conocer a mi propia hermana.

Chat estaba más que complacido por la oferta de Luka, aunque descubrió que nunca había sido bueno que un guerrero poderoso expresara algún
grado de gratitud. Y los hábitos eran difíciles de romper, así que mientras
estaba más que encantado,simplemente dijo:

—Claro, pueden quedarse.

—Gracias—dijo Luka respetuosamente, aunque no tenía ninguna duda de que el poderoso Chat no lo rechazaría. Lo había pensado esta mañana cuando se despertó con Zoe durmiendo cómodamente en sus brazos.
Era mejor que se conocieran aquí; ella tendría tiempo para reunirse con su
hermano y conocer a Marinette. Luego, cuando llegara el momento de que se
fueran, ella estaría más dispuesta a hacerlo, o al menos él esperaba que así
fuera.
Había otra cosa que molestaba a Luka y él consideraba que era importante
discutirlo con Chat, aunque Chat llegó primero.

—Algo sobre Wayhem me molesta—dijo Chat.

Luka fue rápido para ponerse de acuerdo.
—Siento lo mismo.

—Dime—instó Chat.

—Wayhem tiene planes, aunque no sé cuales son. Creo que él hizo que los
hombres secuestraran a Zoe, y luego la rescató utilizando un grupo diferente de guerreros, y ahora tiene otra tropa de guerreros con él. Lo que más me preocupa es que Zoe encontró a dos hombres muertos en el bosque. Uno era del grupo que la secuestró, y el otro de la tropa que la salvó, y ambos murieron de puñaladas.

— ¿Cómo los encontró mi hermana?

—Por pura casualidad—dijo Luka.

— ¿No estabas con ella? —preguntó Chat acusadoramente.