32.Oscuridad

14.7K 836 56
                                    

Estaba tocando esa melodía,que me traiga buenos recuerdos de momentos que pase con mi abuela.

Mis dedos se movían fluidamente sobre el piano,con mucha familiaridad al tocar está melodía.

Estaba logrando que hubiera un poco de calma antes de la tempestad.

Había pasado un rato de que se había acabado la cena,yo me estaba tomando un momento más para develar la parte que más me duele de mi pasado.

Alessandro estaba apoyado en el piano escuchando atentamente cada nota que tocaba,su mirada no se despegaba de mi.

Empiezo a hablar suavemente,tocando las últimas notas.

—Cuando volví a su casa,o mejor dicho a ese infierno,lo hice por proteger a mis amigos como te dije pero la vuelta fue mucho peor de lo que me esperaba—dejo de tocar y notó como cae una lágrima por mi mejilla.

Simplemente dejo caer esa lágrima,mientras que mi mente vuelve a esos recuerdos.

—Me pase meses en los que mi día a día era una paliza tras otra, por sus hombres, en un sótano oscuro,podía soportar eso,el dolor podía anularlo con mi mente—dije mientras que recordaba cuantas veces me habían dado una paliza —pero eso no era lo que más odiaba, que me dejaran vulnerable al drogarme era mucho peor que las palizas que sentia,me hacían ser un trapo sin vida a su merced.

»Lo hizo los años que estuve antes de escaparme,pero volver a pasar por eso, después de haber construido una vida nueva, haber saboreando esa libertad,eso me empezó a romper por dentro.

»Mi estado mental en ese momento era nefasto,pero sabía que al estar otra vez bajo sus garras podría salvar a mis amigos de lo que yo estaba viviendo con el,así que merecía la pena en el fondo.

»Al principio luche aun con los efectos de la droga,incluso mate a varios de sus hombres,pero mi estado mental estaba al límite,hubo un momento en el que deje de luchar.

»Cuando se cansó de verme llena de sangre y heridas,y prácticamente inconsciente todo el tiempo por las palizas,mando a todos sus hombres que me violaran una y otra vez hasta que no quedará nada de mi,en ese momento apague todas mis emociones.

»Las cicatrices de mi espalda además de hacerme pagar por escaparme las hizo por resistirme a lo que él decía que era mi deber.

»Lo peor era ir a una de sus estúpidas galas despues de que te violaran cada uno de sus hombres y tener que sonreír, además de ser la hermana que todo el mundo esperaba.

»Llego un momento en el que pensé acabar con mi vida,pero no tenía valor.Asi que siemplemente me deje consumir,deje que todo el tiempo pasará,era una muñeca sin vida—lo miro al decir eso y veo como sus ojos a medida que voy hablando se vuelven más oscuros.

Pero necesito continuar, hablarle de lo que más me cuesta a día de hoy.

—Una noche después de hacer su teatro y emborracharse el mismo me violo,cruzó la línea que nunca pensé que pasaría.

»Luche pero solo me gane una puñalada en el muslo,la perdida de sangre y los golpes que me dio,me dejaron casi inconsciente, aunque sentía todo lo que pasaba.

Me tocó por encima de la tele del vestido la cicatriz que me hizo aquella noche también noto la mirada intensa de Alessandro pero debo continuar.

Solo un poco más.

—A la mañana siguiente no se arrepintió,sino que encontró una forma más de torturarme.

»Cuando el se enteró de que estaba embarazada quiso sacármelo,pero con ayuda del doctor de la familia consegui el tiempo que necesitaba para avisar a mis amigos para que se protegieran y poder escapar de ese calvario.

Samara (+21) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora