Samara (+21)

34.Tranquilidad

Abro los ojos lentamente y inspeccionó todo a mi alrededor y me doy cuenta donde estoy,noto como mi vestido está arrugado y con mis pechos al aire,una sábana de seda blanca es lo único que me cubre.

Los ventanales están cubiertos por cortinas,pero el sol se cuela por algunas ranuras.

Me siento en la cama aferrandome a la sábana de seda,mientras que pongo mi mente en orden.

Los recuerdos de hace unas horas con Alessandro me golpean fuertemente la cabeza,fue tan especial el momento que hemos compartido.

Me dio el placer que nunca había sentido,me sentí cómoda con el para incluso explorar más,pero el no dejo que lo hiciera.

Busco mi placer y mi comodidad en este aspecto,fue un total caballero,bajo esa fachada dura,se encuentra alguien que le dio igual quedarse a medias para hacerme ver las estrellas.

Me acarició como si fuera de porcelana,su voz ronca acaricio mis oídos indicando lo que debía hacer para conseguir mi orgasmo,todavía hace que sienta el calor recorrer mi cuerpo.

Me sentí tan deseada con el,me miraba a los ojos y me daba seguridad,tuve momentos en los que los recuerdos resurgieron de momentos cruciales de mi pasado.

Pero no los deje ganar,el me cedió todo el control de la situación así que estaba a salvo con el,en cierta manera dejo que utilizará su cuerpo para satisfacerme,fue un acto muy generoso de su parte.

Gracias a como me trató,me hizo disfrutar del momento,nunca imaginé que mi primera vez con alguien al que deseara,fuera asi,tan natural y especial.

Me sentí bien en todo momento,que el me dejara estar todo el rato encima de él hizo las cosas más fáciles, cuando se dio cuenta de que había cambiado algo la postura y me había puesto nerviosa,lo corrigió sin preguntame.

Después de la noche que tuvimos,el dormir juntos,la pesadilla y el momento de placer,todo mi alrededor cala en mi,todavía hay caos en mi mente,pero no es tanto como en otras veces.

Mi cabeza solo se está adaptando a todo lo nuevo ,he sido valiente al ser yo la que tomara la decisión,y explorar lo que el me provoca.

Desahogarme también ayudo para que me sintiera más agusto con el,saque de mi interior temas que dañaban mucho mi corazón,y como dice Alessandro es el momento de avanzar.

No noto ningún ruido en la planta baja,no sé dónde está,me siento un poco mal al despertar sola,pero también reconozco que el debe tener su espacio, después del episodio de anoche.

Se que estará bien, después de lo ocurrido hace unas horas,se veía perdido de placer y en sus ojos había solamente deseo.

Así que camino hacia el baño,es lujuso como el de la mansión, pero tiene un toque de sencillez que a mí me gusta, también tiene todo lo necesario para mí higiene,mi vista se dirige a una bañera con vistas a la ciudad.

En vez de una ducha,decido meterme en la bañera,dejo caer el vestido a mis pies,y me quito la ropa interior,que se encuentra bañada con mis fluidos.

El calor sube a mis mejillas,ya que se vuelve a repetir una y otra vez,la sensación que recorría todo mi cuerpo cuando alcancé la orgasmo,fue alucinante.

Veo el cristal que está en la pared,ocupa la mayoría de la pared,al verme desnuda hace que mis mejillas se vuelvan más rojas.

Veo mi piel enrojecida en la zona de mi cintura,eso no me trae malos recuerdos sino hace que mi piel anhele otra vez su tacto.

Las marcas de sus dedos,la rojez de mi cuello por sus besos,son marcas que no me desagradan tener en mi cuerpo,me hacen recordar un buen momento.

Y como siempre esos momentos,solo los crea él,mi héroe.