Mi secretaria (Haitani ran x lectora) 🔞

Capitulo 6:Atrapados entre sueños

—Elena...

Sin mirarlo al escuchar aquel nombre quedaste concentrada en su voz, había hablado con demasiada amabilidad, miraste por la ventana del auto para evitar mirarlo.

—si voy al departamento ahora —hubo un silencio y luego este soltó una risita — no seas idiota, te contaré todo después, iré a la clínica. Cuídate. Si si lo que digas, Adiós.

No ibas a preguntar el nombre de la chica, después de todo no estabas en el derecho de pedirles explicaciones, parecía que le hablaba bien, carraspeaste un poco aclarándote la garganta.

—sinceramente no entiendo porque voy contigo —dijiste rompiendo el silencio que se había ocasionado por unos momentos, ran sonrió y sentiste un suspiro de su parte.

—y yo no entiendo porque aceptaste —sonreíste y bajaste la mirada a tus manos las cuales estaban entrelazadas sobre tus piernas.

—está bien t/n si no quieres ir puedes irte si lo deseas, puedo llamar a rindou, aunque no se donde estará en esto momentos.

—ya estoy aqui, no tiene caso, después de todo tendremos que vernos todos los días —ran asintio y fue cuando ambos llegaron a un gran edificio de vidrios, ran entró por el estacionamiento subterráneo y estacionó en un lugar apartado de todos.

Te sacaste el cinturón de seguridad y bajaste del auto Justo al mismo tiempo que él, cerraste la puerta delicadamente. Ran alzó lentamente la mitada hacia ti, este se humedeció los labios con la lengua a la vez que llevaba su mano a su cabello para acomodarlo. Era un seductor por naturaleza, eso era seguro.

Caminaste hacia él rodeando el auto y llegaste a su lado, el eco de sus pasos era lo único que se escuchaba en el lugar, ran entró al ascensor junto a ti y ambos se quedaron en lados opuestos.

—¿donde vives actúalmente t/n? —pregunto el chico de cabello morado con tonalidades lilas. Giraste tu cabeza para mirarle. El ascensor comenzó a ascender, estabas algo nerviosa, ya que posiblemente ambos estarían solos en el departamento.

—rindou me obligo a vivir con él de momento, así que me hospedo con él, además tuve un problema en el café con...—callaste al recordar ese acontecimiento, ran alzó las cejas y te miro a los ojos. Notaste como este frunció levemente el entre cejo.

—¿qué tipo de problema?—pregunto este con la voz más seria. Resoplaste, era imposible ocultar aquello.

—un hombre se aprovechó demasiado, me iban a golpear o quizás que cosas hacer cuando rindou apareció — dijiste desviando la mirada, te sentiste algo intimidada por él aura que sentiste de él, si algo siempre temiste de ran, era que este siempre cuando se molestaba su aura era amenazante.

—¿te lastimaron?—volvió a preguntar, negaste con la cabeza en modo de respuesta.

—Rin llegó a tiempo, la verdad que sola no hubiese podido —ran asintio y fue cuando se abrió el ascensor frente a ustedes.

Ran salió primero que tú y tú le seguiste por detrás. Notaste lo impresionante que era el lugar, sillones negros y paredes grises y adornos morados y azules. No era diferente de la de rindou. Por la ventana se podía ver la ciudad, habían mesas de vidrio y una mesita de centro entre los sillones de cuero negro.

—ponte cómoda ¿cómo siguen tus pechos? —te pregunto de la nada.

—de maravillas, gracias por preguntar —lo habías dicho con un toque irónico que había hecho sonreír a ran. Este se sacó el saco y la camisa seguido de los zapatos sin que tú te dieras cuenta.
Este camino hacia ti para comprobar que no estuviesen tan mal.