Capítulo XXVI: HABLA DESDE EL CORAZÓN.

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Shadow lo miró fijamente mentas buscaba una respuesta a su repentina pregunta; aún no decidía sobre sus sentimientos, pero si algo era claro, era que él la apreciaba, la "quería" y el quererla ya era algo, algo más que la nada que sentía antes, aquella nada que, desde su llegada, se fue esfumando poco a poco.

Su mente divagaba de un lado a otro, poniéndose más confundido, como si estuviera intentando encontrar una excusa para decir que no y que no le importaba en lo absoluto, pero no podía, todos sus quejidos y lloriqueos sin sentido le cansaban, y esas semanas en su casa le hicieron detestarla bastante, además del hecho de que ella era algo difícil; pero... había descubierto también ese otro lado suyo, la fortaleza en su interior y sus motivaciones, además de la fuerza descomunal que poseía, y no estaba hablando de acuerdo al físico, sino a su espíritu, quien a pesar de todo había decidido seguir adelante, luego estaba su temperamento, algo que sin duda le enloquecía, más aún así, él ya estaba convencido de su decisión. Ella era desesperante, desastrosa e insoportable en algunos casos, pero el calor que ella le proporcionaba era sensacional y extasiante, jamás había conocido a una chica que se atreviera a desafiarle, o tan siquiera a levantarle la voz y golpearlo, la locura de Amy le tentaba bastante, y él estaba dispuesto a caer en ella, así que lo decidió.

- La quiero, y si salimos de esto, le haré saber eso.

...

Todos habían entrado a sus tiendas ahora, a excepción de Shadow, quien decidió al final de todo permanecer un rato afuera, solo por precaución, y más para tranquilizar un poco más a Amy, puesto que la pobre chica aún seguía sintiéndose culpable por el incidente ocurrido.

Mientras tanto, en la tienda, Sonic se encargaba de darle de comer, ya que el azabache no había tenido oportunidad de hacerlo, manteniéndose al margen de la situación y evitando tocar los "temas delicados" (más por el hecho de que Shadow se lo había ordenado). Aunque de cualquier forma deseaba mantenerse en silencio respecto a eso, su amiga había recibido ya bastantes "golpes" en ese día, lo último que deseaba era abrumarla más, así que se limitó a acompañarla en la cena.

Hasta que vio sus pies moverse en un intento por salir de la tienda.

- ¿Amy?.- preguntó al verla levantarse abruptamente.

- Iré a buscar a Shadow, debemos dormir, le pediré que deje la guardia. - dijo ella volteandolo a ver, para después darle una sonrisa reconfortante.

...

Su mano recorrió con delicadeza la cortina y su vista se acopló a la oscuridad de afuera, permitiendole abrirse paso entre el pastizal del lugar.

- ¿Huyendo de nuevo?.- cuestionó la voz grave del erizo por delante de ella, claro que aún no podía verlo, pero estaba segura de que estaba ahí.

- No realmente. - respondió de inmediato con sus manos en alto, como si quisiera llamarlo. - venía por ti. - informó dando giros lentos, intentando observar al chico, aunque este la sorprendió más al caer "del cielo" justo frente suyo, viéndose fijamente a sus ojos.

- ¿Tienes algo que decirme?.- preguntó divertido. - debe ser importante para que hayas venido aquí.

- Es hora de dormir, vuelve a la tienda. - pidió, aunque él la ignoró y caminó en lado contrario al que ambos debían de ir.

- ¿Sonic te dejó salir? Hmp, ahora sé a quien no puedo pedirle favores. - añadió con tono serio, aunque a ella le resultó divertido y soltó un par de risas, no sin antes tomar su brazo para caminar, dispuesta a no dejar que se alejara.

- La neblina es fuerte, y no te permitiré irte sin mi. - se justificó al sentir la penetrante mirada roja sobre ella, esperando que su paciencia fuera más grande hoy.

Y así era, puesto que no dijo nada al respecto.

- Siento lo de hace rato. - añadió con voz átona, a lo que ella se había sorprendido, ¿ese era Shadow pidiendo una disculpa sincera?, por poco y no lo reconocía.

- No, yo lo siento, fui muy tonta, tú tenias razón. - añadió con cuidado dándole una sonrisa débil, a lo que él devolvió, manteniendo ahora su caminata hasta un punto en el que él se detuvo, no tenía idea del porqué, pero solo lo hizo, para después señalar un punto entre los árboles, viendo así un universo entero de estrellas brillantes, hipnotizandola por completo en su infinidad de color y extraña calidez que le proporcionaban.

- Rose. - le llamó con delicadeza, captando su atención de inmediato. - Toma. - extendió hasta ella una pequeña flor de algodón, claro que Amy la recibió de inmediato, aumentando más esa extraña sensación de confianza que sentía con él. - Es como tú, bella, fuerte y peligrosa, pero totalmente diferente al resto, especial. - añadió mirándola fijamente a los ojos, permitiéndose caer en ese universo verde frente a él.

- Shadow... yo debo decirte...

- No. - la interrumpió. - no me digas nada, no quiero una respuesta tuya hasta saber que saldremos de esto, hasta saber que yo saldré de esto y podré estar contigo después.

- Ok.- respondió tomando su mano con delicadeza, sin decir nada, sin prometer nada, solo teniéndose por ahora en un presente con un futuro incierto.

"Saldremos de esto, podremos con esto, verás que si."

Recordaba Amy Rose con la esperanza ahora nula al ver lo que estaba por ocurrir.

✨...✨

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