El Hijo del Gran Duque [Pausada Indefinidamente]

Capítulo 22: Ayudando a Lady Ravenclaw

Una semana había pasado desde el duelo entre Harry y Mónica contra Zacharias y Dumbledore.

Desde ese día, la reputación de Harry recibió otro golpe cuando muchos aprovecharon su uso del Fuego Demoníaco en conjunto a sus amenazas de muerte para llamarlo Mago Oscuro, todos decían que Zacharias fue obligado al duelo todo por la ambición de poder de Harry. Pero no solo Harry recibió un golpe a su reputación, también la casa de Smith, que fue llamada una familia de cobardes debido a que Zacharias huyó de la batalla.

Irónicamente, Mónica no sufrió de nada debido a que ni siquiera necesito participar. Pero Dumbledore recibió el peor golpe, pues debido a que perdió un duelo contra un niño comenzó a ser la burla de todos.

- Ahora tengo dos de las reliquias, pero, ¿Para qué las necesitaría?

- No sé, la capa nos ha sido útil y la varita según se sabe es más poderosa que cualquier varita existente. - explicó Frey.

- El problema es la última, ¿Porqué querríamos algo que se supone revive a los muertos pero no los revive correctamente? Es la peor de las reliquias si me lo preguntas. - comentó Tracey.

- Aunque su uso de hablar con el alma de un muerto sin la necesidad de revivirlo por completo suena tentador... - añadió Luna.

- Bueno, primero lo primero, ¿Ya sabemos quien es el Heredero Ravenclaw?

- Aún no, Amy. Jibril se esta encargando de encontrar al heredero o heredera de la casa.

- Solo espero que no sea otra persona problemática. - comentó Yakumo.

- Si, también deseo eso.

...............

- ¿Estás segura?

- Completamente.

Harry miró a la chica que Jibril afirmaba era la Heredera Ravenclaw.

Era una Ravenclaw que cursaba su séptimo y último año en Hogwarts, era Penélope Clearwater.

Ella se veía muy diferente a como era usualmente, su aura ordenada y estudiosa estaba desaparecida, siendo esta reemplazada por movimientos torpes, una apariencia desaliñada y descuidada, además de unas enormes ojeras. Claramente no estaba pasando por su mejor momento.

- ¿Sabes si le pasa algo?

- Trataré de saber que le pasa a través de nuestra conexión...

- ¿Conexión?

- Si, estoy conectada a todos los descendientes de los fundadores, aunque solo soy completamente consciente de los estados de salud de aquellos que han reclamado sus lugares en las cuatro familias.

- Ya veo...

Harry observó con curiosidad como Jibril se sentaba con sus piernas cruzadas, mientras con sus manos hacía distintos movimientos, como claves o señas.

- Hay algo malo en ella, no puedo saberlo con exactitud, pero sé que algo le ocurre.

- Pues tendremos que averiguarlo.

El pelinegro y la castaña siguieron a la rubia a través de algunos pasillos, hasta que esta entró en una de las aulas desocupadas.

Harry usó un simple hechizo de camuflaje para entrar sin ser notados, y al entrar puso una expresión de absoluto horror y asco.

Percival Weasley, más conocido como Percy Weasley, el prefecto perfecto, estaba golpeando a la pobre chica, además de estarle haciendo tragar lo que sin duda eran pociones para afectar su mente.