Un Nuevo Comienzo El ciervo,el zorro y la tortuga.

Calma, Sospechas Y Reencuentros.

La vida en el pueblo siguió como de costumbre para los viajeros, habían pasado dos semanas y media desde que habían aterrizado en esta línea de tiempo y desde entonces no todo había cambiado en su nueva vida, Naruto, Lee y Shikamaru estaban haciendo un esfuerzo más consciente para ocultar sus habilidades, pero parecía que los más cercanos a ellos eran expertos en sentir el cambio que habían tenido.

Eventualmente llegaría el momento de decirle a alguien quiénes eran en realidad, aunque el Clan Nara o Kakashi probablemente serían los primeros en saberlo.

Por un lado, Shikaku había invitado activamente a Naruto y Lee a un "tiempo de calidad" con Shikamaru al menos tres veces por semana. Por supuesto, este tiempo lo pasaron en:

a) aprender Shogi (otra vez)

b) cuidando al venado (holgazanear)

c) observar las nubes (dormir)

d) entrenamiento (riguroso)

e) evitar el escurtineo del Nara mayor (tanto como sea posible)

f) discutir planes para el futuro. ¿O era el pasado? ¿El presente, tal vez?

Tch. Qué problemático.

Según sus cálculos, los exámenes de Chunin estaban programados para comenzar en una semana y media más, lo que significaba que en algún momento del día siguiente o dos, sus senseis, con suerte los nominarían para participar, este iba a ser un momento tenso, porque fue cuando todo había cambiado, Sasuke había sido mordido, Orochimaru había atacado, Suna casi había invadido Konoha, Gaara se durmió y desató al Shukaku, y lo más importante, el Tercero fue asesinado.

Los exámenes llevaron a Tsunade a convertirse en Hokage, la deserción de Sasuke, la batalla en el Valle del Fin y el viaje de entrenamiento de tres años de Naruto con Jiraiya.

Si se miraba bien, se podría decir que el Examen Chunin fue el catalizador de la Cuarta Guerra Shinobi.

Es por eso que los tres tuvieron que idear un plan de batalla decente que incluía asegurarse que Sasuke no fuera mordido por la serpiente, aunque tenían planes en caso de que él también fuera mordido, Gaara no lastimaria a Lee, y sobretodo ellos tenía que asegurarse que Shikamaru no saltara sobre los huesos de Temari en el momento en que la vea de nuevo.

Naruto y Lee no querían convertirse en tíos tan jóvenes...

Estos días habían sido demasiado locos y agitados, desde ver gente muerta, lidiar con sus emociones y evitar las sospechas que giraban a su alrededor, es por eso que se alegraron de tener algo de tiempo para descansar, era la calma antes de la tormenta.

En este momento los viajeros del tiempo se encontraban en la casa de Shikamaru, disfrutando de su mañana de domingo sin compromiso alguno. 

Detente, Ruto -  Shikamaru habló de repente mientras observaba las nubes moverse en el cielo y una ligera brisa alborotaba su cabello,

¿Que, Shika? - El futuro Hokage estaba alimentando con hierba a un cervatillo curioso, a la izquierda de Naruto, Lee estaba haciendo lo mismo con la madre de este ciervo, para diversión del Clan Nara, los ciervos estaban más que encariñados con los dos forasteros que de cualquier otro miembro del clan, cada vez que Lee y Naruto visitaban, el ciervo tenía que visitar a los niños.